"Jesucristo era el juglar por antonomasia"

Rafael ?lvarez, El Brujo (Lucena, C¨®rdoba, 1950), celebra 25 a?os en los escenarios con Una noche con El Brujo, mon¨®logo en el recurre a la literatura del Siglo de Oro para adornar sus vivencias. Hasta el domingo, el juglar andaluz, un "transmisor de la poes¨ªa que quiere hacer re¨ªr al p¨²blico, pero tambi¨¦n tocarle el coraz¨®n", contar¨¢ en el Teatro Barakaldo c¨®mo le inici¨® su padre en la poes¨ªa o c¨®mo se enfrent¨® su abuela a la muerte.

Pregunta. ?C¨®mo es esta obra?

Respuesta. ?ntima, autobiogr¨¢fica, comparto con el p¨²blico momentos de mi vida que me han hecho ser actor, y el tipo de actor que soy. Hay un hilo conductor, pero tambi¨¦n improvisaci¨®n constante.

P. La palabra es protagonista.

R. S¨ª, se comparte la vivencia de la palabra, que en griego es el logos, y el logos es la sabidur¨ªa. La palabra es una emisi¨®n de amor compartido, la posibilidad de compartir una experiencia, y de que ¨¦sta vuelva a revivir en los que la escuchan.

P. Parece que va por libre. ?Ha sufrido alg¨²n desencanto con la industria teatral?

R. Sufro desencantos constantes, pero no s¨®lo con la industria. Todo est¨¢ muy mediatizado, instrumentalizado por los medios de comunicaci¨®n de masas y por el mercado, y entrar ah¨ª de independiente, de solitario y de juglar es duro.

P. Dice que en Espa?a es dif¨ªcil estar 25 a?os en los escenarios sin "acabar KO".

R. S¨ª, hay que pelear much¨ªsimo y con muchas cosas. Con la pol¨ªtica, por ejemplo. Si las instituciones pagan el teatro quieren una compensaci¨®n a cambio, y es duro mantener el criterio de independencia. A Jesucristo ya le crucificaron por decir la verdad, y era un gran juglar, el juglar por antonomasia. El Evangelio de San Juan dice que la propia palabra era Dios.