La realidad son las palabras

Si no se puede cambiar la realidad, cambiemos las palabras que la nombran.

Hagamos de la guerra un "conflicto", de la marea negra una "mancha", de la huelga general una "movilizaci¨®n sindical"... Y de Comisiones Obreras, "ce-ce o- o". Despu¨¦s sustituyamos "subvenciones" por "cofinanciaci¨®n" y ya veremos en su d¨ªa si nos interesa que la realidad siga siendo la misma pese a haber cambiado sus t¨¦rminos.

He aqu¨ª las frases de la candidata Te¨®fila Mart¨ªnez (PP): "Desde que yo sea l¨ªder andaluza, las subvenciones ser¨¢n cofinanciaci¨®n de proyectos y programas". "Por culpa de los socialistas, el concepto subvenci¨®n est¨¢ muy devaluado". "Mi pol¨ªtica y programa de gobierno contemplan estas ayudas, pero no con ese concepto peyorativo, prefiero que sean denominadas de una forma m¨¢s importante y que les d¨¦ el valor que realmente tienen". "El PP apuesta por potenciar claramente todas las ayudas, proyectos y pol¨ªticas que generen empleo y solidaridad".

Pero atenci¨®n: estamos ante esas conocidas "palabras grandes" que usan los pol¨ªticos. "?rbol" es una palabra grande, porque yo la escribo imaginando un roble y usted puede leerla recreando en su mente un ¨¢lamo. Mi ¨¢rbol y el suyo son distintos, por m¨¢s que los nombre el mismo vocablo. As¨ª sucede con "justicia", "democracia", "libertad", "igualdad", "solidaridad"... Son palabras grandes porque luego la idea que cada uno tiene de ellas puede resultar muy distinta de la que se ha puesto en la oferta electoral.

Lo mismo ocurre en "cofinanciaci¨®n". ?Qu¨¦ significa exactamente? Parece que Te¨®fila Mart¨ªnez lo identifica con "subvenci¨®n" (s¨®lo que con un sonido m¨¢s prestigioso, "m¨¢s importante"), pero no sabemos qu¨¦ idea tiene en la cabeza, qu¨¦ tipo de ¨¢rbol es esa "cofinanciaci¨®n".

Igual que no es lo mismo repoblar un bosque con casta?os que con eucaliptos, aunque en ambos casos se trate de una repoblaci¨®n forestal, no parece igual cofinanciar un proyecto tur¨ªstico que subvencionar a M¨¦dicos sin Fronteras; como no habr¨ªa ning¨²n parecido entre cofinanciar a M¨¦dicos sin Fronteras y subvencionar un proyecto tur¨ªstico. ?De d¨®nde sacar¨ªa M¨¦dicos sin Fronteras su parte de financiaci¨®n (de cofinanciaci¨®n) para un proyecto, si no busca ning¨²n negocio y no va a tener ning¨²n ingreso?

Esas palabras grandes y confusas son salvoconductos para escoger luego, de entre su vasto campo, el trozo sem¨¢ntico que m¨¢s interese. Se iba a confianciar todo, se iba a generar empleo, a crear solidaridad, con "ayudas, proyectos y pol¨ªticas" concretos que nadie detalla ahora.

Quiz¨¢s ninguna ilusi¨®n se cumpla luego, y todo se quede en unas frases grandilocuentes que los electores entendieron mal porque quiz¨¢s creyeron que en realidad escond¨ªan esas "promesas de subvenci¨®n masiva" de las que se anuncian en campa?a. Pero no hab¨ªa tal, nadie las hallar¨¢ despu¨¦s; y no s¨¦ porqu¨¦ nos habr¨ªamos de sorprender. ?Eso dijeron? ?Lo garantizaron? Qu¨¦ va. A ellos no les consta.