Mueren dos excursionistas al despe?arse por una ladera helada cerca de Pe?alara

La sierra se convirti¨® ayer en una trampa mortal para un grupo de seis trabajadores del hospital General de M¨®stoles que hab¨ªan decidido pasar el d¨ªa libre en el paraje del pico de los Claveles, cerca de Pe?alara, en el t¨¦rmino municipal de Rascafr¨ªa. La enfermera Esperanza Aguilar Parra perdi¨® la vida al resbalar y caer por una ladera helada m¨¢s de 15 metros. Dos compa?eros intentaron ayudarla, pero tambi¨¦n se despe?aron. El celador Felipe Criado Mart¨ªn muri¨® en el acto, y el enfermero Carlos Mota result¨® herido muy grave. Ninguno llevaba el material adecuado para la alta monta?a.

Los dos fallecidos, el herido grave y los otros tres excursionistas hab¨ªan salido de Madrid por la ma?ana en direcci¨®n al puerto de Cotos, en el t¨¦rmino municipal de Rascafr¨ªa. El d¨ªa amaneci¨® soleado y despejado, aunque fr¨ªo, as¨ª que el grupo de amigos, trabajadores todos del hospital de M¨®stoles, aprovecharon su jornada libre para subir a la sierra y dar un paseo. No era la primera vez que lo hac¨ªan, seg¨²n explicaron empleados del centro sanitario donde trabajaban. Unos diez d¨ªas antes de la tragedia, el mismo grupo hab¨ªa hecho una excursi¨®n similar. "Les hab¨ªa gustado el paseo tanto que ayer decidieron repetir, aunque no formaban parte de ninguna pe?a monta?ista", se?al¨® un compa?ero. Nadie pens¨® entonces que una de las caminatas del grupo de amigos terminar¨ªa de forma tan dram¨¢tica.

Los excursionistas regresaban, pasada la una y media de la tarde, de hacer un recorrido por la zona y visitar, entre otros lugares, la laguna de los P¨¢jaros. El grupo alcanz¨® los 2.100 metros al llegar a la conocida como cresta o Pico de los Claveles, un terreno escarpado lleno de grietas y gateras entre pe?ascos, en el linde entre Madrid y Segovia. Hac¨ªa fr¨ªo, aunque no hab¨ªa niebla, y la visibilidad era perfecta. El terreno estaba helado, con una capa de nieve endurecida debido a las bajas temperaturas.

"A pesar de que la zona es muy peligrosa, muy escarpada, ninguno de los paseantes llevaba el equipo adecuado para transitar por ah¨ª", explic¨® un portavoz del servicio de Emergencias 112. Es decir, no llevaban ni crampones (especie de pinchos que van en la planta de la bota para sujetarse mejor al suelo helado) ni piolet (bast¨®n de alpinista, con contera puntiaguda de hierro en un extremo y una especie de piocha en el otro). Esos son materiales imprescindibles en las salidas invernales de alta monta?a. Los excursionistas s¨ª que llevaban, en cambio, ropa de abrigo y botas de monta?a.

Resbal¨®n

Una de las integrantes del grupo, Esperanza Aguilar, resbal¨® en una ladera y se precipit¨® al vac¨ªo. Apenas le dio tiempo a gritar. Cay¨® 15 metros y su cuerpo, sin vida, qued¨® tendido en una terraza despu¨¦s de golpearse con los pe?ascos y las rocas. Sus compa?eros, al o¨ªrla gritar y verla desaparecer, casi no tuvieron tiempo de reaccionar. Felipe Criado Mart¨ªn y Carlos Mota intentaron agarrar a la mujer, pero en el intento perdieron el equilibrio, y uno de ellos tambi¨¦n la vida. Los dos se despe?aron y cayeron 100 metros por debajo de donde estaba el cuerpo de Esperanza, en la falda de la ladera.

Los otros tres excursionistas, entre los que estaba un hijo de Felipe Criado, contemplaron lo ocurrido estupefactos e impotentes por no poder hacer nada. Apenas hab¨ªan pasado unos segundos entre la tranquilidad de su paseo y el hecho de tener a tres de los integrantes del grupo despe?ados ladera abajo.

Felipe Criado, celador y casado con otra celadora del hospital de M¨®stoles, falleci¨® en el acto. Carlos Mota, de 30 a?os, instrumentista de quir¨®fano, est¨¢ ingresado en el hospital Doce de Octubre y su pron¨®stico es muy grave. Sufre traumatismo craneoencef¨¢lico y m¨²ltiples facturas. Est¨¢ entubado y los m¨¦dicos temen por su vida. El herido est¨¢ casado con la enfermera Isabel Machado, tambi¨¦n empleada en el hospital de M¨®stoles, donde ayer se hallaba trabajando en el momento de la tragedia.

Rescate aparatoso

El hijo de Felipe Criado sac¨® fuerzas y llam¨® desde su tel¨¦fono m¨®vil al servicio de Emergencias 112. Indic¨® perfectamente la posici¨®n donde se encontraban. El rescate de los cuerpos y de los heridos fue muy laborioso debido a la orograf¨ªa del terreno y al mal tiempo. Dur¨® m¨¢s de cuatro horas. Un helic¨®ptero del Servicio de Urgencia M¨¦dica de Madrid (Summa) evacu¨® al herido hasta el Doce de Octubre. En la operaci¨®n intervino el servicio de rescate de la Guardia Civil y el Grupo de Rescate en Altura de los Bomberos de la Comunidad de Madrid. El cuerpo de Esperanza Aguilar tuvo que ser trasladado en camilla, atado por unas cuerdas. As¨ª fue descendido hasta el lugar donde se encontraba el otro fallecido. Ambos cad¨¢veres fueron evacuados en helic¨®ptero.

Los tres paseantes que resultaron ilesos en el suceso fueron trasladados a unas instalaciones que la Consejer¨ªa de Medio Ambiente tiene en la zona, y luego fueron bajados a Madrid.

Los trabajadores del hospital de M¨®stoles acogieron ayer por la tarde la noticia con desolaci¨®n. "Eran compa?eros muy queridos. ?C¨®mo ha podido pasar algo as¨ª? Es horrible", se?al¨® uno de los m¨¦dicos del centro sanitario.