Buen rollo

El jueves pasado consegu¨ª ver el segundo de los debates electorales, pese al empe?o que ha puesto Canal Sur TV en esconderlos. Si la idea es que la gente vote guiada por la propaganda de los telediarios, estos debates deber¨ªan retrasarse un par de horas para eliminar a esos residuos de audiencia que, como yo, son capaces de tragarse a las doce de la noche un debate sobre "Econom¨ªa, empleo y sociedad de la informaci¨®n". Rafael Camacho, director de RTVA, cree que las cr¨ªticas a ¨¦l dirigidas son el resultado de un cierto cretinismo mental. Lo dice quien programa a horas de m¨ªnima audiencia una serie de debates cuya ¨²nica raz¨®n de ser es que la vea el mayor n¨²mero de votantes posible. He aqu¨ª su idea de televisi¨®n p¨²blica.

El debate del jueves no pasar¨¢ a la historia. Los invitados se sentaron tras una mesa en forma de ceja de Zapatero en cuyo v¨¦rtice se situ¨® el periodista Carlos Mar¨ªa Ruiz, un buen ¨¢rbitro. Por el PSOE acudi¨® Magdalena ?lvarez con uniforme corporativo: traje de chaqueta color rojo psoe y una mariposita en la solapa que no hubi¨¦ramos echado en falta de no hab¨¦rsela puesto. Por el PP, Salvador Fuentes con un traje tan oscuro como el de Concha Caballero, la representante de IU; qu¨¦ cosas. Y en plan s¨ªntesis, Juan Carlos Benavides, del Partido Andalucista, con traje oscuro y corbata a listas coloradas.

A m¨ª Magdalena ?lvarez me gusta, qu¨¦ quieren que les diga. Me gusta su descaro, su actitud fresca y zumbona, su facilidad para ponerse de repente seria y marcar muy claramente las distancias. Pero lo que m¨¢s me gusta es el desparpajo con el que dibuja ese para¨ªso macroecon¨®mico llamado Andaluc¨ªa, que crece m¨¢s que Espa?a, m¨¢s que Europa, m¨¢s que el mundo entero. Seg¨²n Magdalena ?lvarez somos los primeros. ?Ser¨¢ posible -piensa uno luego- que siendo como somos los primeros estemos sin embargo tan atrasados!

Salvador Fuentes, del PP, pidi¨® como los espont¨¢neos "una oportunidad" para "la se?ora Te¨®fila" y se pas¨® el debate ense?ando a la c¨¢mara gr¨¢ficos en los que no se ve¨ªa nada. Andaluc¨ªa crece, vino a decir, pero no lo suficiente. Su f¨®rmula para remediarlo consiste en incentivar a los empresarios para que lo sean todav¨ªa m¨¢s. Aguant¨® con estoicismo y paciencia las provocaciones de Magdalena ?lvarez, que acotaba burlonamente sus observaciones.

Concha Caballero, de Izquierda Unida, dio una imagen de mujer dulce y eficaz, comedida y muy sensata. Su discurso, compartido por el PA, es que PP y PSOE son las dos caras de la misma moneda: seducidos ambos por el canto de sirenas del d¨¦ficit cero ninguno de los dos est¨¢ dispuesto a que el Estado aumente el gasto p¨²blico y se endeude para ofrecer una mejora en los servicios p¨²blicos e incentivos para el crecimiento industrial.

Por el PA, Juan Carlos Benavides, deque¨ªsta, busc¨® tambi¨¦n la equidistancia: ni la gesti¨®n del PSOE (salvo en la consejer¨ªa de turismo, que casualmente es la que ellos llevan) ha sido la mejor para crecer m¨¢s deprisa, ni el PP, con su negativa a invertir en Andaluc¨ªa y a no satisfacer la famosa deuda, ha estimulado el desarrollo.

Me pareci¨® que este formato a cuatro imped¨ªa el di¨¢logo y convert¨ªa el debate en una sucesi¨®n de mon¨®logos. M¨¢s que adversarios, los invitados parec¨ªan amiguetes. Aprender no aprend¨ª mucho; pero me fui a la cama con buen rollo.