Procesi¨®n al este y Asia
Arcelor es un gigante que da empleo a 104.000 personas en un centenar de centros de trabajo a lo largo de 60 pa¨ªses, pero fundamentalmente en Europa. Las plantas que se ver¨ªan afectadas por una deslocalizaci¨®n en caso de no resolverse el cap¨ªtulo de los derechos de emisi¨®n de CO2 ser¨ªan las siete integrales que el grupo mantiene abiertas para la elaboraci¨®n de productos planos, adem¨¢s de las de Espa?a. En Francia est¨¢n los altos hornos de Dunkerque en el norte, Florange, centro, y la de Fos-sur-Mer, cerca de Marsella. En B¨¦lgica ser¨ªan las de Lieja y Gante, aunque la primera est¨¢ en v¨ªas de desaparici¨®n. En Alemania est¨¢n las plantas de Bremen y Eko Stahl. Francia, B¨¦lgica y Alemania acaparan el 63% del empleo de todo el grupo, mientras que en Espa?a est¨¢ el 15%.
Fuentes de la empresa puntualizan que al total del empleo directo que se ver¨ªa afectado en caso de una deslocalizaci¨®n de los anteriormente citados altos hornos habr¨ªa que sumar el empleo indirecto que genera la implantaci¨®n de la industria pesada en sus ¨¢reas de influencia.
Los objetivos de Arcelor, que ahora produce el 80% de los cerca de 55 millones de toneladas en Europa, pasan por doblar esa cifra en 10 a?os, dejando en Europa el 50% de la producci¨®n. Van a crecer gracias a sus alianzas con Bao en China; con Tata Steel en Jamshedpur, India; con Severestal en Rusia, y con sus plantas en Brasil. En estos pa¨ªses, que no han suscrito el protocolo de reducci¨®n de gases contaminantes, disponen no s¨®lo de esa ventaja, sino de una mano de obra sensiblemente m¨¢s barata, y adem¨¢s mineral en origen, con lo cual los costes se abaratan sustancialmente.
"Ser¨ªa cuesti¨®n de acelerar el crecimiento en esos pa¨ªses", dijo el presidente de Arcelor, Guy Doll¨¦, durante la presentaci¨®n de los resultados de 2003, en relaci¨®n a la peor de las hip¨®tesis relacionadas con Kioto. Este a?o Arcelor invertir¨¢ unos 1.300 millones.
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