Juicio al muro israel¨ª
El Tribunal Internacional de Justicia comienza a estudiar la legalidad de la barrera de separaci¨®n
En lo que podr¨ªa calificarse de "d¨ªa de Palestina", su delegaci¨®n ante el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya (TIJ) abri¨® la vista oral destinada a establecer la legalidad del muro que Israel construye en Cisjordania calific¨¢ndolo de "obst¨¢culo insalvable para la creaci¨®n de dos Estados independientes". El Gobierno de Tel Aviv niega la jurisdicci¨®n del TIJ, m¨¢ximo ¨®rgano judicial de Naciones Unidas, en este caso y no acudi¨® a Holanda. En su lugar, present¨® una alegaci¨®n escrita se?alando que el terrorismo palestino viola el mismo derecho internacional invocado ante una corte que deber¨ªa negarse a adoptar resoluci¨®n alguna. Ayer se libraron dos batallas en La Haya con la barrera cisjordana de fondo, una legal y otra publicitaria.
La primera tuvo como escenario el Palacio de la Paz, sede del TIJ. La otra descendi¨® a las calles de la ciudad, aprovechadas por ambas partes para divulgar sus dispares puntos de vista.
El encargado de presentar la causa palestina en su apartado jur¨ªdico fue Naser al Kidwa, su observador permanente ante la ONU. Vestido de oscuro, con voz pausada y poniendo ¨¦nfasis en los pasajes m¨¢s duros contra Israel, habl¨® del muro como el s¨ªmbolo de la ocupaci¨®n militar a que est¨¢ sometido su pueblo desde hace 37 a?os. "Hemos sido deshumanizados y humillados y carecemos de derechos de autodeterminaci¨®n y soberan¨ªa. La cerca s¨®lo ratifica la anexi¨®n de facto de zonas enteras de los territorios ocupados. De completarse, impedir¨¢ la soluci¨®n del conflicto palestino-israel¨ª", dijo. Donde Israel habla de seguridad y protecci¨®n, los palestinos denunciaron opresi¨®n e invocaron las normas internacionales para ponerle fin. "Si Israel no se pliega a las reglas del derecho internacional, la Asamblea General de la ONU est¨¢ en su derecho de esperar que el Consejo de Seguridad adopte las medidas oportunas. El pueblo palestino conf¨ªa en que este proceso pueda dar frutos positivos", se?al¨® su delegado.
Dicha frase dejaba entrever la principal esperanza con que han acudido a La Haya. Dado que la resoluci¨®n que deben dictar los quince jueces del Tribunal no es vinculante, los palestinos esperan que la fuerza moral de un fallo que calificara de ilegal el muro sirviera para presionar a Tel Aviv y forzar su derribo. O eso, o bien las sanciones, para las que existe un precedente jur¨ªdico. En 1971, el TIJ calific¨® de ilegal la ocupaci¨®n de Namibia por parte de Sur¨¢frica. Esta ¨²ltima sufri¨® al final sanciones generadas en el propio seno de la ONU.
Tinte pol¨ªtico
Como era de prever, los argumentos palestinos tuvieron un marcado tinte pol¨ªtico, que fue aumentando a media que Al Kidwa profundizaba en ellos. En un momento dado lleg¨® a calificar el muro de "expresi¨®n f¨ªsica de un r¨¦gimen que impedir¨¢ movimientos vitales para la mayor¨ªa de los palestinos".
Sabedor del tono que pod¨ªa adquirir esta comparecencia, el presidente del TIJ, el juez chino Shi Jiung, hab¨ªa iniciado la sesi¨®n recordando que la Corte se hab¨ªa reunido a petici¨®n de la Asamblea General de Naciones Unidas, y no de una de las partes en conflicto. Israel no comparte esta opini¨®n y de ah¨ª que haya decidido no intervenir en las sesiones orales.
Lo que s¨ª ha hecho el Gobierno de Ariel Sharon es presentar un documento donde afirma sin dobleces que los palestinos "no acuden al TIJ con las manos limpias". El texto tambi¨¦n lamenta que la Asamblea General de Naciones Unidas no mencionara el terrorismo palestino ni las razones por las que se considera necesario el muro, cuando solicit¨® la resoluci¨®n consultiva sobre su legalidad al Tribunal. "El terrorismo palestino viola las reglas y convenciones del derecho internacional y deliberar en este foro sobre la barrera es un abuso del procedimiento consultivo de la corte", concluye el escrito.
David Saranga, portavoz del Ministerio de Exteriores de Israel destacado ayer en La Haya, lo dijo muy claro mientras interven¨ªa la delegaci¨®n palestina. "Ellos prefieren saltarse las negociaciones directas y se lanzan a la arena internacional. Es verdad que la ruta del muro penetra en algunos tramos dentro de Cisjordania, pero puede derruirse en cuanto haya un liderazgo palestino democr¨¢tico", asegur¨®. Para los palestinos, la idea misma de que la construcci¨®n del muro tenga car¨¢cter temporal resulta inconcebible.
"Est¨¢ ah¨ª para la anexi¨®n de grandes ¨¢reas de nuestro territorio. Y para trazar una frontera futura que haga imposible la creaci¨®n de un Estado propio", dec¨ªan ayer todos los manifestantes en las calles de la ciudad holandesa. El propio Naser al Kidwa hab¨ªa dicho por la ma?ana que Israel podr¨ªa haberse ahorrado las acusaciones de invadir un territorio ajeno de haber dejado el muro en sus l¨ªmites. "Que levanten vallas de 80 metros si quieren, pero en su tierra".
Lo que nadie discute es el sufrimiento padecido por ambas comunidades en litigio, con cifras de muertos que rondan el millar del lado israel¨ª y se acercan a los 3.000 en el palestino. La atribuci¨®n de la culpa por las v¨ªctimas es m¨¢s conflictiva. Al Kidwa conden¨® los atentados, pero dijo que Israel era el responsable ¨²ltimo de los mismos. Los enviados de Tel Aviv no tuvieron que esforzarse mucho.
El pasado domingo, otro suicida palestino se inmol¨® de nuevo en un autob¨²s de l¨ªnea en Jerusal¨¦n matando a ocho personas y causando heridas a m¨¢s de sesenta.
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