'En la ciudad sin l¨ªmites', de Antonio Hern¨¢ndez
Ma?ana con EL PA?S, por 5,95 euros, el filme interpretado por Fernando Fern¨¢n-G¨®mez
El director Antonio Hern¨¢ndez, que hab¨ªa obtenido un buen ¨¦xito con Lisboa, su pel¨ªcula anterior, acariciaba el proyecto de En la ciudad sin l¨ªmites desde 14 a?os atr¨¢s, cuando junto a sus hermanos hab¨ªa acompa?ado a su padre en su larga agon¨ªa. "Mi padre tuvo una grave enfermedad y sufri¨® una especie de enajenaci¨®n en la que su imaginaci¨®n mezclaba realidad y recuerdos, creando una ficci¨®n cuyos c¨®digos s¨®lo conoc¨ªa ¨¦l. Ninguno de sus seres queridos tuvimos la osad¨ªa de convertirnos en su c¨®mplice, tal vez lo ¨²nico que ¨¦l necesitaba para morir en paz. Supe siempre que le deb¨ªa esta pel¨ªcula sobre la memoria, el perd¨®n, el derecho a elegir tu manera de vivir y tambi¨¦n tu manera de morir. En la pel¨ªcula, un joven se aventura a viajar a la fantas¨ªa de su padre, buscando con ¨¦l, dentro de la locura, la posibilidad de pedir perd¨®n".
"Supe siempre que le deb¨ªa a mi padre esta pel¨ªcula sobre la memoria y el perd¨®n"
En El Mundo, Manuel Hidalgo asegur¨®: "Un magn¨ªfico gui¨®n, una estupenda realizaci¨®n y una interpretaci¨®n irreprochable; la pel¨ªcula es un entretenimiento, una diversi¨®n y, al mismo tiempo, contiene una carga de profundidad sobre la sensibilidad, la inteligencia y la conciencia. Dif¨ªcilmente se puede pedir m¨¢s". El periodista auguraba que En la ciudad sin l¨ªmites se iba a convertir en una de las mejores pel¨ªculas espa?olas del a?o y, en efecto, fue nominada a cinco premios Goya, mejor pel¨ªcula y mejor director entre ellos. Obtuvo los de gui¨®n (Antonio Hern¨¢ndez y Enrique Bras¨®), y el de mejor actriz de reparto para Geraldine Chaplin, recuperada para el cine espa?ol.
Mar¨ªa Casanova sintetiz¨® en Cineman¨ªa el n¨²cleo central de la trama: "Un viejo irrecuperablemente enfermo y que ha perdido la raz¨®n (Fernando Fern¨¢n-G¨®mez) est¨¢ internado en un hospital parisiense. Su mujer (Geraldine Chaplin), hijos (Roberto ?lvarez y ?lex Casanovas) y nueras (Adriana Ozores y Ana Fern¨¢ndez) se han trasladado all¨ª. La madre dirige la empresa familiar en la que trabajan los hijos mayores. El m¨¢s peque?o e independiente (Leonardo Sbaraglia) llega acompa?ado de su novia (Leticia Br¨¦dice) desde Argentina. Le dicen que el enfermo no reacciona ni habla y que ha sido encontrado una noche al borde de la terraza del hospital queriendo huir. Sin embargo, el viejo rompe su aparente autismo con su benjam¨ªn pidi¨¦ndole ayuda. Se inicia entre ellos cierta complicidad, el joven le sigue la corriente para tranquilizarle, intrigado por un bot¨®n que su padre guarda en la mano, y un nombre que repite, Roncel. Su madre asegura no saber qu¨¦ significa. El anciano, muy angustiado y consciente de que se muere, le pide que localice y advierta de un peligro seguro a Roncel. Y el hijo, convencido del desequilibrio de su padre pero movido por un extra?o instinto de desconfianza hacia la familia, comienza a tirar de un hilo que parece muy tenue. Y la madeja que va apareciendo, adem¨¢s de inesperada, es tan enredada como s¨®lo pueden serlo los grupos familiares que comparten secretos. Los sentimientos ocultos y controlados durante a?os pueden ser la explosi¨®n m¨¢s letal".
Los elogios de la cr¨ªtica se desbordaron al comentar la interpretaci¨®n de Leonardo Sbaraglia, Geraldine Chaplin y especialmente Fernando Fern¨¢n-G¨®mez, que hab¨ªa filmado la pel¨ªcula tras la convalecencia de una enfermedad tan grave como la del personaje de ficci¨®n. "Nunca hasta ahora hab¨ªa interpretado a un anciano con una enfermedad terminal. Personalmente me es muy interesante adentrarme en ello", coment¨® en El Mundo, siendo m¨¢s expl¨ªcito en sus conversaciones con Enrique Bras¨®, guionista del filme: "El que en la pel¨ªcula el personaje atravesara una situaci¨®n muy parecida a la que acababa de atravesar yo, era algo que me entusiasmaba. Sal¨ª de la cl¨ªnica para hacer lo mismo que dentro de la cl¨ªnica, y acept¨¦ esa situaci¨®n sin querer perturbarla".
Fern¨¢n-G¨®mez "sostiene y vertebra con vigor, con apasionante econom¨ªa de recursos, sin apenas moverse, convirtiendo cada actitud y cada destello en una explosi¨®n de misterio, el armaz¨®n de este bello e intenso drama cojo, que se gan¨® a pulso una formidable ovaci¨®n en Berl¨ªn", tal como se?al¨® Fern¨¢ndez-Santos.
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