"Rajoy pierde gas, s¨®lo intenta escabullirse, necesita respiraci¨®n asistida"

Pregunta. El lema de su campa?a, "derrotaremos al PP" cita al adversario, algo in¨¦dito.

Respuesta. In¨¦dito aqu¨ª, pero no en otros pa¨ªses. Permite visualizar el segundo mensaje, "si gana Zapatero, gana Catalu?a. Para que gane Zapatero, antes hay que derrotar al PP.

P. La dureza del mensaje contrasta con el pactismo angelical mostrado por el PSOE en la oposici¨®n.

R. No ha habido un pactismo angelical. Es verdad que hemos pactado temas de Estado, como el acuerdo por las libertades y contra el terrorismo, que ha dado sus frutos. Ha sido positivo. El PP ha firmado otros pactos con la previsi¨®n de no cumplirlos, pero lo hemos denunciado. Tampoco ha habido tantos.

P. Media docena de ofertas.

"El aznarismo nos deja m¨¢s crispaci¨®n, divisi¨®n pol¨ªtica y problemas sociales que nunca"

"No hemos practicado un pactismo angelical, hemos sido duros. Por supuesto que queremos ganar"

R. La pol¨ªtica exterior deber¨ªa ser objeto de pacto, pero eso, m¨¢s que una oferta, es una cr¨ªtica. Los socialistas hemos sido firmes y duros respecto a la guerra de Irak, en el asunto del Prestige, en la ¨²ltima reforma del C¨®digo Penal, en Gescartera. A Zapatero le colgaron el sambenito de pactista. Ha buscado pactos, s¨ª, pero en grandes temas de pa¨ªs: entre la fuerza que gobernaba y la que puede gobernar y gobernar¨¢. Y ha desarrollado una oposici¨®n firme.

P. Muchos critican al PSOE por falta de ambici¨®n. ?De verdad quieren gobernar?

R. Esa cr¨ªtica carece de fundamento. Por supuesto que queremos ganar. Pero no solo queremos ganar para hacer otra pol¨ªtica, sino para hacer pol¨ªtica de otra manera. Con otro estilo, m¨¢s amable, buscando acuerdos y complicidades, di¨¢logo y entendimiento m¨¢s que crispaci¨®n y divisi¨®n. ?Qu¨¦ nos deja el aznarismo despu¨¦s de cuatro a?os? M¨¢s crispaci¨®n que nunca en la vida pol¨ªtica, m¨¢s problemas sociales que nunca, y una Espa?a que tiene un papel en Europa y en el mundo m¨¢s perif¨¦rico que nunca. ?Nos podemos permitir un Gobierno que hace de la mentira, la descalificaci¨®n y la agresi¨®n al adversario su norma de conducta? Eso no resuelve los problemas, los agrava.

P. Parece como si se conformasen con el objetivo de romper la mayor¨ªa absoluta del PP.

R. El objetivo es ganar al PP. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero lo ha dicho bien claro. Y ha precisado que s¨®lo si obtenemos m¨¢s votos que la derecha aceptar¨¢ la responsabilidad de ser investido como presidente del Gobierno. Aspiramos a gobernar, pero no a cualquier precio. Es cierto que Felipe Gonz¨¢lez necesit¨® tres elecciones para presidir el Gobierno, lo mismo que Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. O sea, que no ganar en la primera convocatoria no supone un desastre. Pero nuestro objetivo es ganar.

P. Si no rompen al menos la mayor¨ªa absoluta, el PSOE puede desestabilizarse.

R.

Pero es que la mayor¨ªa absoluta del PP se romper¨¢. No s¨®lo lo deseo, sino que hay condiciones para que esto sea posible. Las encuestas evolucionan, el PP va perdiendo apoyo. El candidato Rajoy pierde gas. Su campa?a es mediocre, gris. Parece que necesita respiraci¨®n asistida. Tiene pocas ideas propias. De otros dirigentes de su partido se conocen sus ideas. De Rajoy s¨®lo sabemos que intenta escabullirse. Reh¨²ye un debate. Rato no lo har¨ªa. Dicen que Rajoy ten¨ªa otro estilo, m¨¢s pausado. Era un cuento chino. Al final ha hecho suyas las descalificaciones brutales de Acebes y de Zaplana. Pero al cabo estallar¨¢n las contradicciones del PP, seguramente desde la oposici¨®n, entre los Legionarios de Cristo Rey y los que son un poquito m¨¢s liberales.

P. El PP ofrece dos mercanc¨ªas que interesan. Una econom¨ªa en marcha y una rotundidad en las promesas de seguridad.

R. No se quede en los esl¨®ganes y mire los resultados. ?La gente tiene seguridad en el barrio?. Hay menos polic¨ªa y los ¨ªndices de criminalidad han crecido.El mismo Rajoy admite que hay que aumentar las plantillas de la polic¨ªa: viene a reconocer que fracas¨® como ministro del Interior. Y aunque en l¨ªneas generales la econom¨ªa espa?ola no va mal, el crecimiento que se ha producido es m¨¢s que discutible, tiene los pies de barro. Est¨¢ basado en el ladrillo, en una parte del sector servicios, en la p¨¦rdida de peso de la industria, en el trabajo precario y poco cualificado. Este modelo no tiene futuro.

P. Muchos piensan que m¨¢s vale p¨¢jaro en mano, un mal modelo pero que produce crecimiento, que ciento volando.

R. Pero las familias jam¨¢s hab¨ªan estado tan endeudadas como ahora. No es s¨®lo el crecimiento del precio de la vivienda. Hay poco ahorro.

P. En fiscalidad, el PP ha dicho pocas cosas, pero muy concretas. El PSOE, bastante filosof¨ªa y pocas concreciones.

R. ?Deber¨¦ recordar cuatro ejemplos concretos respecto a cuatro impuestos? Reduciremos el IVA de determinados servicios b¨¢sicos, libros y productos. En sucesiones, que es un impuesto cedido a las comunidades aut¨®nomas, elevaremos el m¨ªnimo exento para evitar cargas a quienes heredan un piso normal para vivir en ¨¦l. En el impuesto de sociedades no tiene sentido el tipo del 35%, cuando tras el manejo de diversos mecanismos el tipo medio resulta al 27 ¨® 28%; por tanto, reducci¨®n del tipo al 30%, y reducci¨®n de las exenciones. En el impuesto sobre la renta, reduciremos el n¨²mero de tramos y tenderemos a un tipo m¨¢s equiparable al de sociedades. Es injusto que la persona que gana cinco millones de pesetas trabajando pague m¨¢s impuestos que otra que gana cinco millones en la bolsa a trav¨¦s de una sociedad. Son propuestas claras.

P. En asuntos sociales las encuestas les valoran m¨¢s.

R. Nuestras propuestas buscan cubrir las necesidades que tiene hoy nuestra sociedad, sobre todo en un primer flanco que afecta a la juventud, como vivienda -construir, en el caso de Catalu?a 42.000 viviendas, la mitad de alquiler-, formaci¨®n y empleo: eso requiere incrementar el gasto en educaci¨®n, que ha bajado en casi medio punto en los ¨²ltimos ocho a?os y est¨¢ por debajo de la media comunitaria; significa reformar la formaci¨®n profesional y apostar por ella, integrando los tres subsistemas (reglada, educacional y continua); reformar el mercado laboral, sumido ahora en una selva normativa. No puede ser que s¨®lo uno o dos contratos de cada diez sean estables; en precariedad somos campeones europeos, pero s¨®lo en eso.

P. ?Y el otro flanco?

R. Es el apoyo a la gente mayor, las pensiones, las pol¨ªticas de familia. Lo cual significa guarder¨ªas y ayudas para posibilitar la compatibilizaci¨®n del horario laboral y la vida familiar. Pol¨ªticas de apoyo a las personas mayores. Servicios de proximidad, residencias, centros asistidos... Pensiones complementarias para aumentar de verdad las m¨¢s bajas.

P. El programa es calcado del que adopt¨® el Gobierno Maragall. ?Lo export¨® el PSC al PSOE?

R. No es una exportaci¨®n. Ocurre que es normal que las formaciones de izquierdas compartamos propuestas, especialmente las sociales.

P. En su campa?a propone un "Ministerio de las Culturas" y lanza un mensaje muy federalista en cultura y en pol¨ªtica general. ?Habla el PSC o el PSOE?

R. Hablo como socialista catal¨¢n, y tambi¨¦n como socialista espa?ol. Nuestra visi¨®n del Estado de las autonom¨ªas y de su futuro es muy diferente a la del PP. Queremos una Espa?a plural, de tipo federal, en las ant¨ªpodas de la Espa?a radial y centralista que ha sido la pr¨¢ctica y es la propuesta de la derecha.

P. ?Zapatero es c¨®mplice de esa visi¨®n?

R. Evidentemente. Y la concreta, por ejemplo, en la necesidad de que organismos del Estado, como los reguladores, no se concentren todos en Madrid, sino que est¨¦n aqu¨ª, en Barcelona... que se repartan.

P. No es el discurso de Bono y de Rodr¨ªguez Ibarra.

R. Tambi¨¦n son del PSOE. El programa con el que se presenta el PSOE recoge estas propuestas, de una Espa?a polic¨¦ntrica y en red, y fue votado por ambos. Algunas salidas de tono ya han sido corregidas.

P. Si Zapatero mejora pero no rompe la mayor¨ªa absoluta, le saltar¨¢n a la yugular.

R. No contemplo esa hip¨®tesis. El PSOE obtendr¨¢ un buen resultado. El liderazgo de Zapatero saldr¨¢ reforzado. Cualquier escenario previsible ser¨¢ mejor que el actual.

P. Usted pide al Gobierno Maragall que ayude al cambio, gobernando. Pero parece que el Gobierno catal¨¢n est¨¦ a medio gas.

R. No. Lo que pasa es que la atenci¨®n p¨²blica se centra en la carrera electoral, y as¨ª las iniciativas del Gobierno tienen menor efecto medi¨¢tico. Es normal.

P. ?Por qu¨¦ ningunea a CiU?

R. No es cierto, yo tengo mucho respeto por todas las formaciones pol¨ªticas. En democracia, todos los votos son ¨²tiles. Pero ahora la alternativa es Rajoy o Zapatero, no hay cinco opciones, hay dos. El voto ¨²til para cambiar es el voto socialista.

P. En el mejor caso, el PSOE necesitar¨¢ apoyos para gobernar.

R. Eso es secundario. Si no hay un buen resultado socialista, los otros, aunque queden bien, servir¨¢n de muy poco. Un Gobierno de progreso no podr¨¢ ser s¨®lo la suma de gente que lo que tiene en com¨²n es su distancia hacia el PP. Adem¨¢s, tenemos que gustar nosotros. Nosotros tenemos un proyecto, no pretendemos una ensalada de siglas.

P. Si Esquerra confirma el ascenso que le auguran las encuestas, el portavoz de la Catalu?a progresista en el Congreso, aunque tenga menos esca?os que usted, ser¨¢ Carod Rovira.

R. No podr¨¢ formar grupo parlamentario, porque deber¨ªa obtener m¨¢s de cinco diputados, y adem¨¢s alcanzar el 15% de los votos. La presencia m¨¢s importante ser¨¢ el PSC, que tendr¨¢ capacidad para influir en los temas importantes. No nos preocupa el ruido... Ya se visualizar¨¢.

P. ?Con grupo propio?

R. No digo eso, lo que digo es que ya se visualizar¨¢ la presencia de socialistas catalanes en el Congreso. Todo a su debido tiempo.