Todos ganan
Aun habiendo sido tan dura la derrota del PP, sus dirigentes deber¨ªan levantar el ¨¢nimo si consideran que, gracias a ella, quiz¨¢ puedan jubilar pol¨ªticamente a Aznar. Y no s¨®lo eso: tal vez en estos momentos de tristeza consigan espantarse al fin de haberse enamorado de un hombre cuya misi¨®n hist¨®rica era la de sacarlos de la nada para conducirlos a la m¨¢s profunda de las miserias. No estar¨ªa de m¨¢s tampoco que, aunque con efectos retroactivos, se horrorizaran del aplauso obsceno que se dieron a s¨ª mismos en el Congreso tras haber dicho s¨ª a una guerra atroz, injusta e ilegal. Quiz¨¢, al penetrar en su ¨¢nimo la fr¨ªa aguja de la depresi¨®n, empiecen a preguntarse de qu¨¦ rayos se re¨ªan, por qu¨¦ se felicitaban, qu¨¦ clase de estupefaciente les administraron aquel d¨ªa aciago con el caf¨¦. A veces, para recuperar la cordura hay que perder otra cosa.
Adem¨¢s de los dirigentes del PP, descansar¨¢n en sus tumbas los poetas de la generaci¨®n del 27, cuyos huesos temblaban cada vez que sus nombres eran pronunciados en voz alta por el mismo individuo que en los m¨ªtines presum¨ªa de tenerla m¨¢s larga que sus adversarios. Reposar¨¢n tambi¨¦n los intelectuales org¨¢nicos encargados de propagar la especie de que el l¨ªder se hab¨ªa acercado a la obra de Kant y la hab¨ªa comprendido. Gozar¨¢n de un respiro los columnistas que, m¨¢s inquietos por la obtenci¨®n del Cervantes que por la calidad de su obra, proclamaban que Ana Botella ten¨ªa los hombros m¨¢s bellos del reino. En cuanto a los poetas vivos, cuyos versos citaba el interfecto para crecer unos cent¨ªmetros en las sobremesas, tambi¨¦n le agradecer¨¢n que deje de nombrarlos en p¨²blico con el desprestigio que ello implicaba. M¨¢s de un vate espa?ol ha dejado de publicar por miedo a acabar en su mesilla de noche.
Reconforta pensar que todos hemos salido un poco ganadores en estas elecciones que ojal¨¢ marquen el fin de un espa?olismo de bragueta. Hasta el Rey, que creo que no vota, se sentir¨¢ aliviado si piensa que, una vez fuera de la escena pol¨ªtica, no es probable que Aznar intente casar al resto de sus hijos en El Escorial. Nuestra enhorabuena a Espa?a entera, en fin, y que el occiso alcance en la presidencia de Faes y las Jons la paz que no le dio la presidencia del Gobierno.
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