El abrupto final de Aznar
La herencia pol¨ªtica que leg¨® a Mariano Rajoy ha quedado hecha trizas
![Luis R. Aizpeolea](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Ff032c279-3573-47a5-a57d-a7b6f47e9b37.png?auth=52e2cc61bf66c3e2879814e3c93a226021616ea94cf5743439c78732fc137c24&width=100&height=100&smart=true)
Cuando Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar design¨® el 2 de septiembre de 2003 a Mariano Rajoy como candidato para sucederle en la presidencia del Gobierno en absoluto pod¨ªa imaginar que seis meses despu¨¦s no se consumar¨ªa esa sucesi¨®n. Ni que la misma jornada de la votaci¨®n sufrir¨ªa un enorme abucheo a la entrada de su colegio electoral y que, tras una inesperada derrota, desaparecer¨ªa una semana de la vida p¨²blica, escondi¨¦ndose en un mutismo que romper¨¢ hoy, en Londres, donde reaparecer¨¢ junto a Tony Blair, y en Tele 5, donde ser¨¢ entrevistado a las 21.30.
En tan s¨®lo 15 d¨ªas de campa?a electoral y tras su final traum¨¢tico, por el brutal atentado terrorista de Madrid, Aznar ha visto c¨®mo se le iba de las manos un capital pol¨ªtico del que cre¨ªa disponer para que Rajoy lo administrara en los pr¨®ximos cuatro a?os.
Apost¨® por la uni¨®n con Bush y ahora prevalecer¨¢ el reforzamiento de los lazos con la UE
Tras su enfrentamiento con los nacionalismos, el PP ha perdido esca?os en Euskadi y Catalu?a
El final de Aznar est¨¢ lleno de paradojas precisamente all¨¢ donde quiso dejar huella para la historia. No hay que olvidar que Aznar, amante de la historia de Espa?a, lleg¨® a comparar su retirada con la de Carlos I, que en 1555 abdic¨® y se instal¨® en Yuste.
Aznar apost¨® por legar a Rajoy como herencia un cambio radical en la presencia de Espa?a en el mapa internacional y ha conseguido exactamente lo contrario de lo que pretend¨ªa. Quiso acabar con los nacionalismos perif¨¦ricos y ha terminado su mandato con un auge in¨¦dito en la democracia del nacionalismo catal¨¢n radical, una consolidaci¨®n del nacionalismo vasco y una derrota estrepitosa del PP en Catalu?a y Euskadi. Se present¨®, durante todo su mandato, como el adalid de la lucha antiterrorista y su retirada coincide con el atentado terrorista m¨¢s brutal de la historia de Espa?a. Pretendi¨® dejar un legado pol¨ªtico a Rajoy y ha dejado a su sucesor sin proyecto pol¨ªtico.
Aznar se hab¨ªa cre¨ªdo el referente de la derecha en Europa. Todav¨ªa al final de la campa?a electoral daba lecciones al presidente franc¨¦s, Jacques Chirac. "No hay nada peor que un l¨ªder simp¨¢tico que sea un mal dirigente... Jacques Chirac es un jefe de Estado muy simp¨¢tico", dijo a Le Monde. Y a?adi¨® que Chirac no hac¨ªa caso de la receta que ¨¦l hab¨ªa ofrecido a la derecha francesa: que "en vez de tener demasiados hombres que quieren mandar" apostasen "por un solo proyecto, un solo l¨ªder".
Pero lo m¨¢s parad¨®jico es que su proyecto de romper los lazos de Espa?a con el eje europeo y apostar por unas relaciones privilegiadas con los Estados Unidos de George Bush se ha hecho trizas. Tras la victoria de Zapatero, se ha producido una conmoci¨®n internacional en sentido contrario. "Espa?a es ahora protagonista internacional porque el replanteamiento de Zapatero sobre la participaci¨®n espa?ola en la guerra de Irak y su inminente acercamiento a Europa ha movido todo el tablero internacional. Estos d¨ªas se habla de Espa?a m¨¢s que nunca, pero en el sentido opuesto al que hubiese deseado Aznar, porque lo que se impulsa es el reforzamiento de la unidad europea", se?alan en el ¨¢rea de relaciones internacionales del PSOE.
Aznar tambi¨¦n pretendi¨® la derrota de los nacionalismos catal¨¢n y vasco, y el resultado ha sido un fracaso estrepitoso. En su segundo mandato, cuando ya no necesit¨® los votos del PNV ni de CiU, protagoniz¨® una feroz campa?a contra el nacionalismo vasco y, la consecuencia de esa pol¨ªtica de confrontaci¨®n ha sido que, en estas elecciones, el nacionalismo vasco se ha mantenido mientras el PP ha ca¨ªdo de 7 a 4 esca?os. Y en Catalu?a, donde Aznar, tras las elecciones de noviembre, centr¨® sus bater¨ªas contra ERC, se ha producido un tremendo auge del nacionalismo independentista, de 1 a 8 esca?os, y el PP ha perdido la mitad de sus esca?os, de 12 a 6.
En pol¨ªtica antiterrorista, Aznar se crey¨® un adalid de ese combate a escala internacional, tras los atentados del 11-S. De manera creciente, interpret¨® de manera unilateral el Pacto Antiterrorista, que hab¨ªa suscrito un a?o antes con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, al que siempre acus¨® de debilidad por no comprometerse en una alternativa conjunta con el PP contra el PNV en el Pa¨ªs Vasco, y de apoyar el pacto de Gobierno en Catalu?a entre el PSC y ERC.
Su interpretaci¨®n unilateral del Pacto Antiterrorista le empuj¨® a gestionar en solitario la crisis, tras la masacre del pasado d¨ªa 11 en Madrid: no convoc¨® el Pacto Antiterrorista; decidi¨® en solitario la convocatoria de la manifestaci¨®n y toda la respuesta pol¨ªtica la dieron en exclusiva ¨¦l y sus ministros. En las filas del PP surgen ahora voces que lamentan ese comportamiento. "Si en su primera declaraci¨®n institucional Aznar hubiera convocado a los partidos democr¨¢ticos y se hubiese sacado la foto con ellos, la gesti¨®n de la crisis hubiera sido compartida, y probablemente el Gobierno no hubiera sido v¨ªctima de las acusaciones de faltar a la verdad", admiten fuentes del PP.
Tambi¨¦n reconocen, esas mismas fuentes, que aunque los principios en la lucha contra el terrorismo siguen siendo v¨¢lidos, tras una matanza que ha segado la vida a m¨¢s de 200 personas es imposible decir que esa pol¨ªtica ha sido un ¨¦xito, como defend¨ªa todav¨ªa Aznar a las 19.40 del 11 de marzo.
Adem¨¢s, Aznar ha dejado a Rajoy sin proyecto. "Aznar quiso forzar un cambio en la mayor¨ªa sociol¨®gica espa?ola. Quiso que los espa?oles aceptaran un modelo unilateral de la Constituci¨®n, del que se eliminara el consenso como procedimiento pol¨ªtico. Aznar siempre pens¨® que de la pol¨ªtica de consenso en la transici¨®n, como los Pactos de La Moncloa (1978), se benefici¨® la izquierda. Por eso, cuando tuvo la mayor¨ªa absoluta, ensay¨® la pol¨ªtica de imposici¨®n. Todo eso ha saltado por los aires. Ahora, con su derrota, el PP tendr¨¢ que revisar ese proyecto", se?alan fuentes de la oposici¨®n.
![Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, junto al pr¨ªncipe Felipe y el presidente del Gobierno franc¨¦s, Jean Pierre Raffarin, en la manifestaci¨®n en Madrid contra el atentado del 11-M.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/GUZTV74ADN4DQOYYF72F2HFMGE.jpg?auth=6f3503883160540e4b2f40d5d04df791061a12ef437d3181d31490a74ae003db&width=414)
![Aznar y su esposa, Ana Botella, en el colegio electoral donde votaron. A la derecha, junto a Rajoy en la sede del PP, tras la derrota del 14-M.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/37S5GQRCZ5LQH4K27KLI3BVEI4.jpg?auth=a039ff0318e2471731600bb6a62095d5c4aae4ed4a5430dd8ed8331612f6a64d&width=414)
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.