Cuando Escandinavia era el para¨ªso
Hasta 1968, 14 a?os despu¨¦s de Bannister, no consigui¨® un espa?ol bajar de los cuatro minutos: Alberto Esteban en Estocolmo
El recuerdo de la milla de Bannister le lleva a Jorge Gonz¨¢lez Amo al a?o 1961, siete despu¨¦s de que el atleta ingl¨¦s bajara de los cuatro minutos, y a la primera televisi¨®n que lleg¨® a su casa. Pocos d¨ªas despu¨¦s de enchufarla, echaron un reportaje. En ¨¦l, en un blanco y negro granuloso, desva¨ªdo, se vio la carrera de Bannister.
"Yo ten¨ªa 16 a?os. Y mi padre", cuenta Gonz¨¢lez Amo, "que hab¨ªa hecho atletismo, empez¨® a hablarme de Bannister, y de John Landy, el australiano que le quit¨® el r¨¦cord mundial mes y medio despu¨¦s, y de la carrera de los Juegos de la Commonwealth, que entonces se llamaban los Juegos del Imperio, en Vancouver". Gonz¨¢lez Amo entr¨® entonces de lleno en la m¨ªstica de la milla, el sentimiento casi religioso, casi tr¨¢gico, que sienten los mediofondistas ante la carrera sim¨¦trica, perfecta, cuatro vueltas a la pista de 400 metros, cada vuelta un minuto, cada vuelta un acto de un drama que se desarrolla a toda velocidad. Cuando Gonz¨¢lez Amo acab¨® siendo atleta, muy buen atleta, -lleg¨® a correr el 1.500 en 3.40m en 1968, pista de ceniza, zapatillas de largos clavos en los que se incrustaban pegotes de suelo-, ning¨²n espa?ol hab¨ªa logrado a¨²n bajar de los cuatro minutos en la milla, pero ¨¦l no fue el primero. "El primero fue el aragon¨¦s Alberto Esteban. Lo hizo en Estocolmo y casi sin propon¨¦rselo. Fue el verano de 1968, 14 a?os despu¨¦s de Bannister".
"Corr¨ª los ¨²ltimos 100 metros a ritmo de maratoniano, en 18s. Acab¨¦ en 3m 59,02s"
Sin embargo, en los a?os 50, coet¨¢neo de Bannister, hab¨ªa brillado un gran atleta catal¨¢n, Tom¨¤s Barris, de Barcelona, que pod¨ªa haber sido el primer espa?ol que bajara de los cuatro minutos. "Y no lo hice porque por entonces en Espa?a apenas hab¨ªa competiciones", dice Barris, nacido en febrero de 1930. "Fui el r¨¦cordman espa?ol de la milla en mis tiempos de Escandinavia. Me mov¨ªa entre 4.05 y 4.02m. Eran los tiempos en que hasta que Bannister no baj¨®, los cuatro minutos se consideraban una barrera infranqueable". En 1958, en Turku (Finlandia), logr¨® una marca magn¨ªfica en 1.500 metros: 3m 41,7s. Teniendo en cuenta que para los 109,344 metros restantes hasta la milla se sol¨ªa invertir entre 16 y 18 segundos, si la carrera hubiera sido una milla, la barrera habr¨ªa sido franqueada. "El d¨ªa anterior me hab¨ªa retirado de un 5.000 porque me encontraba mal, y despu¨¦s, por la noche, estuve en la fiesta de los atletas. Pero logr¨¦ una marca espectacular. Mejor que la que nunca logr¨® Bannister en 1.500 metros. Por primera vez la mejor marca de un espa?ol estaba a s¨®lo tres a?os del r¨¦cord mundial".
El atletismo espa?ol de los a?os 60 era una pista de 300 metros en la Ciudad Universitaria de Madrid, unos cuantos estudiantes en la residencia Blume pasando el invierno y un par de meses de verano con beca en Escandinavia. Alberto Esteban, Gonz¨¢lez Amo, ?lvarez Salgado, Mariano Haro... se concentraban en Voledalen (Suecia) y desde ah¨ª recorr¨ªan toda la pen¨ªnsula en coche alquilado participando en reuniones. Eran los a?os del amateurismo marr¨®n, en que estaba prohibido cobrar pero todo se arreglaba con gastos de viaje y dietas. "Entre unas cosas y otras volv¨ªamos a casa con cuatro o 5.000 pesetas. Y tan contentos", recuerda Gonz¨¢lez Amo. "Se corr¨ªa infinitamente mejor que en el resto de Europa".
En aquel ambiente, el 2 de julio de 1968, Alberto Esteban particip¨® en una milla en el estadio ol¨ªmpico de Estocolmo. "Y yo no quer¨ªa ir porque estaba lesionado del tal¨®n de Aquiles", dice Esteban, nacido el d¨ªa de Reyes de 1943. "Pero Manuel Ballesteros, mi entrenador, me convenci¨® para ir porque pod¨ªa hacer la m¨ªnima para el 1.500 de los Juegos de M¨¦xico. Fui pero ni quer¨ªa salir, porque me dol¨ªa mucho el tal¨®n. 'Int¨¦ntalo por lo menos', me insisti¨® Ballesteros. Y a pesar de los dolores corr¨ª a tope. Al pasar por la l¨ªnea del 1.500 me cantaron la marca: 3m 41.3. Hab¨ªa hecho la m¨ªnima y adem¨¢s el r¨¦cord de Espa?a, se lo quitaba a Barris 10 a?os despu¨¦s. Y a partir de ah¨ª me dej¨¦ ir. Ni pensaba en los cuatro minutos. Corr¨ª los ¨²ltimos 100 metros a ritmo de maratoniano, en 18s. Acab¨¦ en 3m 59.2s. Qued¨¦ cuarto, por delante de Ron Clarke, pero no volv¨ª a correr m¨¢s millas".
Hasta 1985, 17 a?os despu¨¦s, Espa?a no ataj¨® el atraso en la milla. Fue una medianoche de julio, en el estadio Bislett de Oslo, siempre en Escandinavia, y fue Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez, segundo en la carrera en que Steve Cram dej¨® el r¨¦cord mundial en 3m 46.32s. El toledano logr¨® 3m 47.79s, la cuarta mejor marca de la historia entonces. Han pasado casi 20 a?os y sigue siendo r¨¦cord espa?ol.
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