Lygia Pape, el genio que revolucion¨® las artes pl¨¢sticas brasile?as

La genial artista brasile?a Lygia Pape, que acab¨® revolucionando las artes pl¨¢sticas, dec¨ªa siempre que no ten¨ªa ning¨²n inter¨¦s en pasar a la posteridad. Quiz¨¢s por ello la noticia de su muerte, ocurrida por parada cardiaca en el hospital S?o Lucas, de Copacabana, en R¨ªo de Janeiro, el lunes 3 de mayo, se sali¨® de las p¨¢ginas habituales de la seccion de necrol¨®gicas para ocupar grandes espacios en los suplementos culturales de la prensa brasile?a.

Todo lo que de fr¨¢gil ten¨ªa su cuerpo, que m¨¢s parec¨ªa un ruise?or, lo ten¨ªa de fuerte su arte y su creatividad. Fue sin duda la creadora en Brasil de la mayor revoluci¨®n en su campo art¨ªstico y su fama pronto atraves¨® las fronteras. Lygia fue la pionera del Movimiento Constructivo Nacional y una de las fundadoras, en 1954, del Movimiento Neoconcreto, que revel¨® talentos como los de H¨¦lio Oiticica, Lygia Clark, Am¨ªlcar de Castro y otros m¨¢s.

Pero donde quiz¨¢s Pape atrajo la atenci¨®n mundial fue cuando propuso que el espectador no fuera un mero observador pasivo de una obra de arte, sino que deb¨ªa tambien participar de su proceso creativo. As¨ª se hizo famosa su experiencia en 1968 con su obra O ovo, formada por tres grandes cubos de color. El espectador pod¨ªa entrar dentro de la escultura y quebrar su parte lateral como si naciera del huevo. Cre¨® nuevos lenguajes en las artes pl¨¢sticas y lleg¨® a predicar la "libertad absoluta"en la creaci¨®n. Fue polifac¨¦tica: profesora, dise?adora y creadora de logotipos. Llev¨® su arte hasta a los supermercados, con logotipos como el de las galletas Piraqu¨¦, a las que aplicaba los principios geom¨¦tricos del concretismo.

Mujer de izquierdas y dem¨®crata, fue una gran luchadora contra la dictadura militar. Lleg¨® a ser detenida, pero de ello nunca quiso hablar. Ella estaba concentrada en su arte y creaba grandes pol¨¦micas, ya que fue de las primeras en romper todos los moldes tradicionales, llegando a llevar cucarachas a los museos.

Fue a veces incomprendida en sus delirios art¨ªsticos, y en otras ocasiones era idealizada hasta el extremo. Sin duda, Lygia deja una huella profunda en la cultura del pa¨ªs.

Se apag¨® antes su cuerpo que su esp¨ªritu. Tras luchar durante a?os contra una mielofibrosis, un tipo de degeneraci¨®n de la m¨¦dula espinal, y tras superar todas las expectativas imaginadas por los m¨¦dicos, su esp¨ªritu estuvo l¨²cido hasta el ¨²ltimo instante, cuando su coraz¨®n se cans¨® de latir.-