Trato inhumano

La filtraci¨®n a la prensa de las vejaciones y torturas que han sufrido algunos prisioneros iraqu¨ªes han alarmado a un Bush que est¨¢ en horas bajas y teme perder las elecciones. Lo que ha pasado en las c¨¢rceles de Irak y Afganist¨¢n no le ha preocupado al presidente, que, al igual que el m¨¢ximo responsable de la l¨ªnea de mando, a¨²n no ha tenido tiempo de leer los informes y ver las degradantes fotograf¨ªas que figuraban en ellos. Por eso, el sentimiento de sentirse asqueado por un comportamiento que dice le repugna, no es cre¨ªble: los soldados norteamericanos que abusan de esa manera, y parecen haberlo hecho con el consentimiento de sus jefes, no hacen mas que seguir los ejemplos que les muestra su Gobierno. El reconocimiento sanitario ante las c¨¢maras del ex presidente iraqu¨ª, tratado como un animal expuesto al escarnio p¨²blico, y, sobre todo, la detenci¨®n en Guant¨¢namo de prisioneros isl¨¢micos contra los que no existe otro cargo que la venganza son las fuentes en las que han bebido esos soldados. Para que sea cre¨ªble el rechazo de Bush y su Gobierno, deber¨¢ liquidar la c¨¢rcel de Guant¨¢namo y poner en libertad a todos los presos sobre los que no hay pruebas de haber ejercido el terrorismo. Lo dem¨¢s es interesada hipocres¨ªa.