Zucchero re¨²ne sus duetos con m¨²sicos de g¨¦neros distintos

El d¨ªa 17 de este mes sale a la calle Zu, ¨²ltimo disco de Zucchero en el que ¨¦ste mide su aguardentosa voz con las de primeras figuras del rock, el pop, el blues, el jazz e, incluso, el bel canto, algunas de las cuales ya han fallecido. El cantante italiano cuenta que este disco no es el recopilatorio de turno -"a m¨ª no me gustan los recopilatorios"-, sino un proyecto en el que se han tomado las voces o los solos instrumentales de los artistas que han grabado con ¨¦l -Miles Davis, John L. Hooker, B. B. King, Tom Jones, Sting o el ex Queen Brian May, entre otros- volvi¨¦ndose a arreglar, grabar, cantar por ¨¦l, remezclar y reproducir del todo en una tarea de modernizaci¨®n del sonido.

Zucchero, cuyo nombre real es Adelmo Fornaciari y nacido el 25 de septiembre de 1955 en Roncocesi, Italia, confiesa: "A lo largo de mi carrera he tenido muchas oportunidades de hacer duetos con grandes m¨²sicos y siempre he pensado que, cuando tuviera tiempo, har¨ªa un disco con ellos". Sin embargo, la rutina del artista con presencia comercial -disco de estudio, gira, disco de estudio, gira...- le impidi¨® tener ese tiempo libre para abordar el proyecto. "Este a?o no tengo la cabeza para escribir canciones nuevas. As¨ª que decid¨ª embarcarme en este viejo proyecto. Mi idea era la de volver a grabar las canciones como si hubieran sido escritas hace dos meses, y no diez o quince a?os".

La biograf¨ªa art¨ªstica de este m¨²sico italiano at¨ªpico -"no soy un bello Stallone con voz blanca; m¨¢s bien parezco irland¨¦s"- recoge muchos momentos en los que los grandes nombres del rock y el pop anglosaj¨®n se fijaron en sus canciones: "En 1988 Miles Davis escuch¨® mi canci¨®n Dune Mosse y quiso sonar en ella. Me fui a Nueva York, grabamos la canci¨®n y la guard¨¦ en mi casa".

Pr¨¢cticamente lo mismo le ocurri¨® con Eric Clapton: "Acudi¨® a un concierto m¨ªo en Sicilia y me invito a telonearle en toda su gira europea. Hicimos juntos A wonderful world, otro ¨¦xito". Pero la canci¨®n que rompi¨® el mercado fue Senza una donna, que grab¨® en 1991 junto al cantante brit¨¢nico Paul Young: "?l la descubri¨® en 1991 estando de vacaciones en Italia, y decidimos grabarla juntos. Se public¨® sin apoyo promocional y fue el mayor superventas de mi carrera".

"No siendo ingl¨¦s o americano es muy dif¨ªcil hacerse aceptar por las primeras figuras internacionales", comenta Zucchero, que tambi¨¦n ha tenido que batallar por no ser el cantante italiano rom¨¢ntico de baladas al uso: "En mi pa¨ªs soy un rockero que se enfrenta a las instituciones. El Gran Baboomba, por ejemplo, podr¨ªa parecer una canci¨®n de verano muy simple, pero su letra tiene muchos dobles sentidos. El Gran Baboomba es Mr. Berlusconi".