El Pr¨ªncipe y la alcaldesa

A Rosa Aguilar la han invitado a la boda. Al parecer, a su doble condici¨®n de vicepresidenta segunda de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias y alcaldesa une, seg¨²n ella t¨ªmidamente da a entender, el gozar de amistad personal con la Real Casa. ?Ay, Izquierda Unida y sus contradicciones! Mientras su mentor y ex alcalde se esfuerza a favor de la III Rep¨²blica, tenemos a su protegida pol¨ªtica fomentando con su asistencia la reproducci¨®n mon¨¢rquica y su adhesi¨®n de hecho a la instituci¨®n mas anti igualitaria que existe.

La cr¨®nica social nos informa que la invitada, acompa?ada de Antonio Gala, acudir¨¢ a la ceremonia luciendo un traje confeccionado por un prestigioso modisto. Pienso, que ya que asiste a la boda en calidad de alcaldesa comunista ser¨ªa m¨¢s consecuente con su ideolog¨ªa que fuese ataviada con un mono a lo Mao que no con un traje de decadentes lentejuelas capitalistas.

Ya hay rumores de que la boda real puede salir por unas cuantas decenas de millones de euros. Pero, ?cu¨¢nto le costar¨¢ a C¨®rdoba la asistencia de la primera dama municipal? Me temo que esto es algo que no llegaremos a conocer nunca, a pesar de vivir en la ejemplar ciudad de los presupuestos participativos a lo Porto-Alegre. La suerte que tenemos en Espa?a es que tenemos un solo pr¨ªncipe y, por tanto, confiamos, que una sola boda. Imag¨ªnense que esto fuera Arabia-Saud¨ª donde hay m¨¢s de 6.000 pr¨ªncipes.

Do?a Rosa, que ¨²ltimamente nos sorprende a los ciudadanos y ciudadanas al o¨ªrla hablar de s¨ª misma en tercera persona, diciendo cosas como: "Rosa Aguilar decidir¨¢ en su d¨ªa que...", o "Rosa Aguilar se compromete a...". No nos sorprender¨ªa que despu¨¦s de estos pr¨®ximos y mon¨¢rquicos d¨ªas se nos dirigiera a los cordobeses y cordobesas usando el plural mayest¨¢tico. Todo se pega.