Con gaitas y sin 'orbayu'
Asturias celebra la boda con m¨²sica, sidra y estandartes- El Ateneo Republicano homenajea en Cangas de On¨ªs al oso que mat¨® al rey Favila
Una asturiana se convirti¨® ayer en Princesa de Asturias, y ¨¦ste es un acontecimiento in¨¦dito en los 616 a?os de existencia del t¨ªtulo que vincula a los herederos de la Corona de Espa?a con un territorio peque?o pero cargado de historia: monta?oso y aislado durante siglos, y entre cuyas cumbres se forj¨® un reino, que es el origen remoto de la actual monarqu¨ªa espa?ola, llen¨® de orgullo el sentimiento ¨ªntimo de la generalidad de los asturianos. La regi¨®n, en la que a Felipe de Borb¨®n se le considera un asturiano m¨¢s, y en particular Oviedo, su capital, ciudad natal de la Princesa, y Ribadesella, donde residen sus abuelos paternos, vivieron la boda como un acontecimiento propio.
Oviedo se engalan¨® para la ocasi¨®n. La imagen de los contrayentes preside desde el jueves la torre del reloj del Ayuntamiento de la capital asturiana, la fachada del colegio p¨²blico La Gesta II -donde la nueva princesa, Letizia Ortiz, curs¨® los estudios primarios- y los frontales y escaparates de algunos establecimientos comerciales. Las principales calles de la ciudad lucieron estandartes y banderolas con la imagen de los novios.
Casi un millar de gaiteros procedentes de diversos concejos hicieron vibrar las v¨ªas p¨²blicas a lo largo de la jornada con los recios sonidos ancestrales del folclore aut¨®ctono. Hasta el orbayu, la llovizna a la que Asturias debe su verde intenso, y que hab¨ªa sido pertinaz la v¨ªspera, estuvo ausente hasta la tarde y permiti¨® que el sol entreluciera.
La pasteler¨ªa ovetense que el pasado oto?o se sum¨® al anuncio del compromiso con la creaci¨®n de las letizias -un dulce relleno de almendra y yemas de huevo escaldadas, cocido al horno y cubierto con una capa de yema dura, tostada con una pala candente, y culminada con una coronita de chocolate- se vio desbordada por la demanda desde el viernes, y ayer visti¨® sus pasteles de blanco nupcial.
Con no menor emoci¨®n se vivi¨® la jornada en Ribadesella, el municipio costero, a 84 kil¨®metros de Oviedo, en el que residen los abuelos paternos de la nueva Princesa de Asturias y donde Letizia Ortiz vio transcurrir sus veranos de infancia y adolescencia. Para Ribadesella la jornada fue tambi¨¦n una fiesta. Numerosos vecinos siguieron la boda en una carpa habilitada por el Ayuntamiento en la Plaza Nueva y brindaron con 500 litros de sidra en los t¨ªpicos vasos sidreros, tallados esta vez con los nombres de los pr¨ªncipes.
Pero la jornada no estuvo exenta de contracelebraciones. En Llueves, cerca de Covadonga, en el municipio de Cangas de On¨ªs, primera sede del Reino astur, el Ateneo Republicano homenaje¨® al oso regicida, que mat¨® a Favila, segundo rey de la Monarqu¨ªa asturiana e hijo del rey Pelayo, precursor de la Reconquista, y de Gaudosia.
![Vecinos de Ribadesella brindan con sidra al terminar la ceremonia nupcial.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/CV2ZKGUBAVNLEHB2FX2J2W2KFA.jpg?auth=d0481c0b4763d8779c761e326ae169eff943b2c099f40bd26b73a921a3f8b63a&width=414)
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