Menos de la mitad de los socios de la UE han entregado su plan para cumplir Kioto

Menos de la mitad de los socios de la Uni¨®n Europea (UE) han entregado hasta ahora -aunque el plazo oficial termin¨® el 31 de marzo y el 1 de mayo para los pa¨ªses reci¨¦n incorporados- sus planes nacionales de asignaci¨®n (PLA) de emisiones contaminantes para el cumplimiento de los acuerdos de Kioto. La Comisi¨®n Europea ha anunciado la apertura de un expediente a seis pa¨ªses, entre ellos Espa?a, y la comisaria de Medio Ambiente, la sueca Margot Wallstr?n, ha calificado de insuficientes y poco estrictos los planes nacionales recibidos.

Han presentado planes definitivos a la Comisi¨®n Europea Alemania, Finlandia, Irlanda, Dinamarca, Austria, Luxemburgo, Holanda, Suecia, Reino Unido, Eslovenia y Lituania, y han hecho p¨²blicos borradores de sus PNA Portugal, B¨¦lgica, Italia, Letonia y Estonia. Francia, Grecia y Espa?a no han presentado todav¨ªa documento alguno y Chipre y Malta gozan de un tratamiento espec¨ªfico en este tema.

Los derechos de emisi¨®n y su comercio est¨¢n planteados con el objetivo de facilitar y abaratar a los Estados el cumplimiento de los compromisos del Protocolo de Kioto (una reducci¨®n del 8% de las emisiones de gases de efcto invernadero en el periodo 2008-2012 frente a las de 1990 en la UE). El r¨¦gimen cubre aproximadamente un tercio de las emisiones totales (casi el 50% de ellas son CO2).

La posibilidad de comprar y vender derechos entre empresas debe garantizar el objetivo de reducir la cifra total de emisiones al menor coste posible. Los planes de asignaci¨®n reparten entre empresas y sectores los compromisos nacionales sobre emisiones asumidas por cada Estado miembro de la UE.

La mayor¨ªa de los PNA de emisiones contaminantes que ya han sido presentados ante la Comisi¨®n abogan por criterios de reparto de emisiones similares a los defendidos en Espa?a por el conjunto de las compa?¨ªas el¨¦ctricas, salvo Iberdrola, que mantiene una posici¨®n diferenciada, y por los nuevos entrantes del sector el¨¦ctrico.

El grueso de estos planes apuesta por una asignaci¨®n gratuita de los derechos y por un criterio de reparto entre instalaciones basado en las emisiones hist¨®ricas, y no en el de las emisiones previstas en el futuro. Cuatro de los 11 planes conocidos (los de Italia, Portugal, Irlanda y Holanda) prev¨¦n recurrir, en porcentajes que oscilan entre el 6% y el 20%, al uso de los mecanismos de flexibilidad recogidos en el Protocolo de Kioto (inversiones para reducir contaminaci¨®n en pa¨ªses en desarrollo, reforestaci¨®n, etc¨¦tera) para el cumplimiento de los objetivos. Las el¨¦ctricas espa?olas propugnan tambi¨¦n la adopci¨®n de esta f¨®rmula.

La posibilidad de la subasta

Los planes de Irlanda y Dinamarca, por otra parte, son los ¨²nicos hasta ahora que recogen la posibilidad de aplicar un procedimiento de subasta (v¨¦ase gr¨¢fico) a la asignaci¨®n de una parte de sus derechos de emisi¨®n (un 0,75% del total en el caso irland¨¦s y un 5% en el dan¨¦s). Extrapolando los datos de los planes hasta ahora conocidos, el volumen de derechos subastables en Europa no llega a los dos millones de toneladas de di¨®xido de carbono, lo que equivale aproximadamente al 0,1% del total de derechos asignados.

Salvo Italia, que ha adoptado la referencia de las emisiones previstas para el futuro en el caso del sector el¨¦ctrico, el criterio de reparto fijado en el resto de PNA conocidos asigna los derechos atendiendo a las emisiones hist¨®ricas de las instalaciones (una mayor¨ªa opta por contabilizar los periodos 1988-2001 o 2002).

Los planes de asignaci¨®n publicados, seg¨²n estudios comparativos realizados por el¨¦ctricas espa?olas, reconocen tambi¨¦n la necesidad de ir acometiendo reducciones de emisiones en los sectores afectados por la directiva, entre 2005 y 2012, con el objetivo de afrontar en esta ¨²ltima fecha las exigencias del Protocolo de Kioto.

El volumen de emisiones asignado en los PNA publicados est¨¢ en todos ellos por debajo de las emisiones previstas en escenarios econ¨®micos normales, es decir, en escenarios donde no existiese la necesidad de reducir emisiones.

En general, los esfuerzos de reducci¨®n de CO2 previstos en los distintos planes oscilan entre el 15,1% de Dinamarca y el 1% del Reino Unido. Las el¨¦ctricas espa?olas propugnan una reducci¨®n del 6,4% en Espa?a. Las reducciones fijadas para las el¨¦ctricas en los PNA oscilan entre el 5% y el 10%, aunque Irlanda las fija en el 2% y Dinamarca en el 28% (este pa¨ªs tiene un elevad¨ªsimo nivel de emisiones: 0,64 toneladas de CO2 por megavatio hora generado en 2001).

Los planes de asignaci¨®n holand¨¦s e irland¨¦s, que recurren a los mecanismos de flexibilidad ante la imposibilidad de reducir f¨ªsicamente las emisiones hasta los l¨ªmites de Kioto, especifican que ser¨¢ el Estado quien aporte los fondos necesarios para la compra de derechos de emisi¨®n o para cr¨¦ditos de proyectos CDM (Clean Development Mechanism) y JI (Joint Implementation).

La posibilidad de agrupar instalaciones ha sido incorporado expl¨ªcitamente por varios de los planes publicados hasta ahora y s¨®lo uno, el de Reino Unido, lo proh¨ªbe expresamente.