El man¨¢ de los fondos, en peligro
Espa?a perder¨¢ al menos el 30% de lo que recibe debido a la incorporaci¨®n a la UE de pa¨ªses m¨¢s necesitados
Espa?a ha sido el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea m¨¢s beneficiado de la llamada Pol¨ªtica de Cohesi¨®n, la encaminada a potenciar el desarrollo en los pa¨ªses y regiones menos favorecidas del club. En el actual marco financiero de la Uni¨®n (2000-2006), Espa?a se lleva 56.000 del total de 233.000 millones de euros dedicados a ese fin.
Espa?a ha sido el pa¨ªs de la Uni¨®n Europea m¨¢s beneficiado de la llamada Pol¨ªtica de Cohesi¨®n, la encaminada a potenciar el desarrollo en los pa¨ªses y regiones menos favorecidas del club. En el actual marco financiero de la Uni¨®n (2000-2006), Espa?a se lleva 56.000 del total de 233.000 millones de euros dedicados a ese fin.
Anualmente, supone una media del 1% del producto interior bruto (PIB) espa?ol. Para el pr¨®ximo marco financiero (2007-2013), Espa?a perder¨¢ al menos el 30% de esos fondos por dos razones: ya no es un pa¨ªs tan poco desarrollado en comparaci¨®n con la media europea, y acaban de entrar en el club Estados mucho m¨¢s necesitados.
La mayor parte del pastel se reparte entre las denominadas regiones Objetivo 1, aquellas en las que la renta por habitante es inferior al 75% de la media europea. En el actual periodo se han beneficiado de esos fondos regionales o estructurales todas las comunidades aut¨®nomas salvo Navarra, Madrid, Pa¨ªs Vasco, Arag¨®n, La Rioja, Catalu?a y Baleares. La construcci¨®n de infraestructuras p¨²blicas ha sido su principal destino y ha originado decenas de miles de puestos de trabajo.
Pr¨®ximo marco financiero
Para el pr¨®ximo marco financiero de la Uni¨®n Europea, varias regiones habr¨¢n superado ya de forma natural ese l¨ªmite del 75%. Se trata de Canarias, Cantabria y Comunidad Valenciana. Otras lo har¨¢n por efecto estad¨ªstico, es decir, porque se han incorporado ya muchas regiones de Europa Central y Oriental menos desarrolladas y eso har¨¢ que la renta por habitante en Asturias, Murcia, Ceuta y Melilla est¨¦ por encima del 75% de la media europea.
El otro trozo importante del pastel es el Fondo de Cohesi¨®n, repartido entre los pa¨ªses, no regiones, con renta inferior al 90% de la media europea. En este caso, Espa?a se lleva en este periodo financiero 11.600 del total de 25.000 millones de esa partida. Para el siguiente periodo, sin embargo, Espa?a ya estar¨¢ por encima de ese 90%.
Si las reglas se aplicaran estrictamente, Espa?a perder¨ªa de golpe casi el 70% de todo ese dinero. Para evitar semejante impacto, Bruselas ha propuesto periodos transitorios, un nuevo Objetivo 1-bis para las regiones afectadas por el efecto estad¨ªstico (recibir¨ªan el 50% de lo que les hubiera correspondido en el Objetivo 1) o la posibilidad de recibir fondos de otros cap¨ªtulos. A su vez, Espa?a quiere negociar un periodo de transici¨®n para el Fondo de Cohesi¨®n.
Pagar toda la factura
Hasta aqu¨ª las propuestas. La realidad puede acabar siendo otra. Todos los pa¨ªses ricos, y sobre todo los contribuyentes netos a los fondos comunitarios, exigen que los fondos regionales se concentren en los nuevos pa¨ªses incorporados a la Uni¨®n. Si as¨ª fuera, argumenta el Gobierno, ser¨ªa Espa?a la que pagara casi toda la factura de la ampliaci¨®n de la Uni¨®n Europea.
El mismo grupo de pa¨ªses (Alemania, Francia, Reino Unido, Holanda, Suecia y Austria) quiere recortar el presupuesto de la Uni¨®n a costa de esta pol¨ªtica regional y alguno, sobre todo Alemania, prefiere que esas ayudas se renacionalicen, es decir, que sean aportadas por cada Gobierno. A su vez, la Comisi¨®n Europea ya ha advertido de que no hay posibilidades legales para que Espa?a disfrute de un periodo de transici¨®n en el Fondo de Cohesi¨®n.
Ser¨¢ este contencioso el m¨¢s importante para Espa?a a lo largo del a?o y medio que a¨²n resta para que los 25 socios del club pacten el futuro marco financiero plurianual. En contra tiene a los pa¨ªses m¨¢s potentes del club. A favor, el sistema vigente en la Uni¨®n Europea para lograr el acuerdo final: por unanimidad, es decir, con derecho a veto por parte de todos.
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