El Valencia recurre a Ranieri

Los jugadores del Valencia son los m¨¢s contentos de que Claudio Ranieri regrese a Mestalla cinco a?os despu¨¦s. Los cuatro que coincidieron con ¨¦l en sus dos cursos en el banquillo valencianista -Ca?izares, Carboni, Angulo y Albelda-, les han contado al resto historias y an¨¦cdotas de las que sale muy bien parado. El Valencia lleg¨® ayer a un acuerdo con Ranieri para que dirija al cuadro valenciano las tres pr¨®ximas temporadas, a expensas de que el t¨¦cnico cierre primero su finiquito con el Chelsea, que lo despidi¨® esta semana pese a los tres a?os de contrato que le quedaban.

Ranieri ha mantenido una estrecha relaci¨®n con el Valencia. Siempre abrig¨® la intenci¨®n de volver. Hace dos meses, entr¨® en una lujosa tienda de ropa del centro de la capital valenciana acompa?ado por su compatriota Carboni, buen amigo suyo. No es el ¨²nico. Ca?izares debut¨® con ¨¦l en el que fue el primero de sus seis a?os triunfantes en la porter¨ªa valencianista. Angulo dice que con nadie jug¨® tan a gusto como con Ranieri. Y Albelda recuerda que el italiano fue el primero que, sin conocerlo de nada, le dio la alternativa para que se foguease en Primera.

"Ranieri se abre a los jugadores m¨¢s all¨¢ del f¨²tbol", dijo ayer un futbolista del Valencia, en contraste con la fr¨ªa reacci¨®n de la plantilla a la dimisi¨®n de Rafa Ben¨ªtez, que rompi¨® el martes el a?o de contrato que le ligaba a Mestalla al sentirse ninguneado por los directivos. "En el plano futbol¨ªstico, Ben¨ªtez nos dio mucho [dos Ligas y una Copa de la UEFA]; en el humano, nada", resumi¨® ayer este jugador, que se quej¨® tambi¨¦n del excesivo protagonismo que asumi¨® el preparador madrile?o en los triunfos conseguidos: "Parece como si nosotros no hubi¨¦ramos hecho nada. Y ¨¦l no es Dios".

Llega Ranieri, de 53 a?os, un tipo simp¨¢tico e histri¨®nico a quien le encantaba pasear por el centro de Valencia, del brazo de su esposa, repartiendo abrazos entre la hinchada, que lo adoraba. Se march¨® aclamado despu¨¦s de haber arrollado al Atl¨¦tico en la final de la Copa del Rey de 1999 (3-0), el primer t¨ªtulo valencianista tras 19 a?os de sequ¨ªa. "El humor, el amor, la lealtad y el trabajo hay que conservarlos siempre", proclam¨® entonces a modo de m¨¢xima. "Mestalla es mi casa. Mi ilusiona mucho volver", declar¨® ayer.

Ahora bien, no todo son buenos recuerdos lo que dej¨® en la sociedad de Mestalla, que le acus¨® en su d¨ªa de cinismo: Ranieri se hab¨ªa comprometido para entrenar al Atl¨¦tico y, sin embargo, aseguraba que era la directiva que presid¨ªa Pedro Cort¨¦s la que no quer¨ªa renovarle, ech¨¢ndole el p¨²blico encima. Despu¨¦s fracas¨® en sus ocho meses en el Manzanares y recal¨® en el Chelsea en 2000 en sustituci¨®n de Vialli. Su mayor logro: las pasadas semifinales de la Champions. En sus comienzos, Ranieri reflot¨® equipos en precario como el Cagliari, el N¨¢poles y, sobre todo, el Fiorentina, al que subi¨® a Primera y luego conquist¨® una Copa y una Supercopa italiana. Como jugador, fue un defensa "muy, muy duro", admite, con m¨¢s de 200 partidos en la Serie A.

Al igual que Ben¨ªtez, Ranieri se considera heredero de Arrigo Sacchi: "?l nos abri¨® los ojos a todos", dijo. Y propugn¨® un f¨²tbol el¨¦ctrico y frontal que lanz¨® al estrellato a Mendieta y Piojo L¨®pez. Por eso se atrevi¨® a proclamar que no le interesaba la posesi¨®n del bal¨®n. "Aqu¨ª est¨¢ mi porter¨ªa, aqu¨ª la otra: yo me voy recto y marco m¨¢s goles. En tres segundos se puede hacer un gol".