"En Cuba hemos tenido que vivir entre la Patria y la Muerte"
Sus obras de teatro fueron las que empezaron a moldear el nombre de Abilio Est¨¦vez en Cuba durante sus inicios literarios. Aunque ya fuera de la isla, ha sido la narrativa (novela y cuento), la que le ha dado a conocer en el exterior y a ser considerado uno de los escritores cubanos contempor¨¢neos m¨¢s destacados.
1. Es dif¨ªcil responder a esta pregunta. Se acerca a la especulaci¨®n. La realidad o la historia o como quiera que se llame a esa pesadilla, ha sido como ha sido y ha provocado, supongo, la literatura que deb¨ªa provocar. Consideradas con cierto cinismo (y hasta masoquismo), las duras circunstancias ?no estimulan la creaci¨®n literaria? En estos cuarenta a?os han aparecido libros extraordinarios. Baste citar Los pasos perdidos, Paradiso, Tres tristes tigres, El pan dormido, El mundo alucinante, Muecas para escribientes, Retrato de mujer con traje de batalla, sin olvidar algunos grandes poetas. ?C¨®mo hubiera podido ser de otro modo? No lo s¨¦.
2. Aunque vivir en un pa¨ªs o fuera de ¨¦l no condiciona la calidad de una literatura, no cabe duda de que estar "fuera" o "dentro" transforma el modo de acercarse (o de alejarse) a esa extra?a fantas¨ªa llamada Cuba. Se niega, se afirma, se sufre, se a?ora o se odia en cualquier sitio por igual. No deja de ser significativo, por poner un ejemplo del XIX, que, frente a las cataratas del Ni¨¢gara, Jos¨¦ Mar¨ªa Heredia echara de menos las palmas reales, mientras que despu¨¦s, en La Habana, Juli¨¢n del Casal reclamara una tormenta de nieve. Cambia el signo, pero la rebeld¨ªa permanece. En la isla o en el exilio, lo propio de la literatura es la inconformidad.
PREGUNTA. Vida, amor y muerte es la trinidad de la literatura en general y de Cuba claramente, ?c¨®mo es la relaci¨®n de la creaci¨®n literaria de su pa¨ªs con cada uno de estos temas?
RESPUESTA. En Cuba hemos tenido que vivir entre la Patria y la Muerte. En la disyuntiva de semejante elecci¨®n, nos hemos obligado a situar el Amor y la Vida. La particularidad de nuestra literatura (y de nuestra subsistencia) puede que se halle en ese rozar los extremos del peligro, en la inminencia de la cat¨¢strofe. La proximidad del Apocalipsis confiere un ¨¦nfasis especial a esas tres palabras tremendas.
Abilio Est¨¦vez (La Habana, 1954). Reside en Barcelona. Entre sus libros figuran la novela Tuyo es el reino (Premio de la Cr¨ªtica de Cuba en 1999 y Mejor Libro Extranjero en Francia en 2000), los cuentos El horizonte y otros regresos, las prosas de Manual de tentaciones y el volumen de teatro Ceremonia para actores desesperados (toda su obra la edita Tusquets).
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