Un rostro portugu¨¦s

Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso es un buen candidato para presidir la Comisi¨®n Europea en estos tiempos de mudanza. Ante los descartes habidos en la reciente cumbre de Bruselas, su nombre, confirmado ayer por la presidencia irlandesa, ha conciliado finalmente el consenso para que los l¨ªderes de los 25 miembros de la UE le designen el martes como sucesor de Romano Prodi. Pertenece a la familia derechista del Partido Popular Europeo, el grupo con m¨¢s diputados en la nueva Euroc¨¢mara, que ha de ratificar su nombramiento, y es tambi¨¦n uno de los candidatos de ese elector externo que es EE UU, pues Washington quer¨ªa un verdadero amigo al frente de este cuasiejecutivo en Bruselas, que tanto influye en decisiones que afectan a intereses estadounidenses. Que Francia haya minimizado el hecho de que fue el anfitri¨®n de la reuni¨®n de las Azores indica que no hay ganas de agitar las aguas sobre Irak, sino de cerrar el nombramiento.

Dur?o, 48 a?os, tiene experiencia europea como primer ministro de Portugal desde 2002, y ha demostrado un valor en pol¨ªtica, que es el de saber encajar derrotas. Su aceptaci¨®n del puesto abre una crisis pol¨ªtica en el pa¨ªs vecino. No tiene hechuras de l¨ªder, pero puede sorprender. Romano Prodi s¨ª parec¨ªa tener las condiciones para ello y fracas¨®. El italiano ha tenido un plantel de comisarios de calidad y no ha sabido sacar provecho de ¨¦l. Una de las primeras cualidades que se requieren ahora del presidente de la Comisi¨®n, especialmente tras la ampliaci¨®n, es, justamente, saber formar un equipo. ?sta va a ser una de sus mayores tareas. Que el presidente de la Comisi¨®n sea portugu¨¦s es positivo para Europa y para Espa?a. Cuando los grandes han afianzado su peso en una Uni¨®n en la que ha crecido el n¨²mero de pa¨ªses peque?os, este nombramiento tranquilizar¨¢ a estos ¨²ltimos y fomentar¨¢ la confianza en las instituciones. Tambi¨¦n pone de relieve los l¨ªmites del poder franco-alem¨¢n, toda vez que Chirac y Schr?der han tenido que dar su brazo a torcer.

El futuro jefe de la Comisi¨®n es m¨¢s un atlantista que un europe¨ªsta, pero esto importar¨¢ menos ahora, pues la pol¨ªtica exterior, de defensa y seguridad se hace para buscar autonom¨ªa europea y no se impulsa desde la Comisi¨®n, sino desde el Consejo, bajo la batuta de Javier Solana, que tambi¨¦n ser¨¢ ratificado el martes como futuro ministro de Exteriores de la UE, con un apoyo que ha contado con la unanimidad desde el inicio. En los ¨²ltimos a?os, el poder en la Uni¨®n se ha ido desplazando desde la Comisi¨®n al Consejo, pero eso no significa que carezca de importancia qui¨¦n est¨¦ a la cabeza de la instituci¨®n m¨¢s original de la construcci¨®n europea. Se quiera o no, a¨²n es la cara de Europa, y por vez primera, un rostro del amigo Portugal.