Una visi¨®n distinta de Dal¨ª como artista moderno y antimoderno
El Reina Sof¨ªa abre una nueva sala con 400 obras del pintor en la cultura de masas
El pintor Salvador Dal¨ª tambi¨¦n tom¨® partido entre la cultura aristocr¨¢tica y la cultura democr¨¢tica. F¨¨lix Fan¨¦s, comisario de la exposici¨®n Dal¨ª. Cultura de masas, presentada ayer en el Museo Nacional Reina Sof¨ªa, de Madrid (Santa Isabel, 52, www.museoreinasofia.mcu.es), investiga la confrontaci¨®n entre la alta cultura y la cultura popular e industrial a trav¨¦s de 400 obras de Dal¨ª. En la nueva sala de exposiciones del museo, Dal¨ª se convierte en "alimento de las masas hambrientas" a trav¨¦s del cine, la publicidad, la fotograf¨ªa, el dise?o, las revistas y la prensa. "Es moderno y antimoderno", afirm¨®.
El cuadro Muchacha de Figueres, de 1926, incorpora en una fachada el anuncio de Ford. Est¨¢ en la primera sala de la exposici¨®n Dal¨ª. Cultura de masas, inaugurada ayer en un nuevo espacio del edificio Nouvel que ampl¨ªa el Museo Nacional Reina Sof¨ªa. El conjunto de 400 obras, entre pinturas, dibujos, objetos, pel¨ªculas y revistas, quiere ofrecer una visi¨®n distinta de las antol¨®gicas del pintor, seg¨²n declar¨® F¨¨lix Fan¨¦s, comisario de la muestra.
"Dal¨ª se lanza suicidamente a la confrontaci¨®n entre la alta cultura y la cultura popular", se?ala Fan¨¦s al explicar las intenciones de la exposici¨®n, a partir de los propios textos de Dal¨ª en los que se sit¨²a "bajo el signo de autosacrificio" para convertirse en "alimento de las masas hambrientas". El comisario observa la influencia de la cultura popular e industrial al asumir su lenguaje y contenidos (pinta una coca-cola antes que Rauschenberg y Warhol) y trabajar con su nombre en la publicidad y la moda.
Los temas urbanos que se identifican con la modernidad y el cubismo ocupan la primera sala de la exposici¨®n, que avanza en ocho espacios diferentes desde el paso de la est¨¦tica maquinista a la surrealista y la cuesti¨®n de original y copia a trav¨¦s del collage. "Aqu¨ª intentamos romper el molde y presentar un Dal¨ª distinto, una reflexi¨®n sobre Dal¨ª y la cuesti¨®n del arte con may¨²sculas y la baja cultura, que es central en el arte contempor¨¢neo".
Fan¨¦s defiende la "originalidad" de la exposici¨®n que, en montaje de Llu¨ªs Pera y Anna Alcubierre, entra en los temas modernos con cuadros como El gran masturbador, y el objeto de tel¨¦fono-langosta, que es la imagen del anuncio de la fachada. El tema de la reproducci¨®n se coloca tras un Angelus recortado, con las variaciones sobre la pintura de Millet. Tras una cortina de celuloide aparece el mundo del cine, el de la vanguardia y el de Hollywood, con cartas a Bu?uel, las im¨¢genes de las primeras pel¨ªculas, los decorados para Recuerda, un gui¨®n para los Marx y los bocetos para el proyecto Destino, de Walt Disney, junto al saliva-sof¨¢. Sue?o de Venus recuerda el pabell¨®n que dise?¨® para la exposici¨®n de Nueva York de 1939, presentada como un gran objeto surrealista. La moda y su concepto del cuerpo femenino como objeto desmontable comprende campa?as de televisi¨®n, dise?os de telas, perfumes, corbatas, medias..., para seguir por los documentos fotogr¨¢ficos (Man Ray, Brassa?, Halsman) y su presencia en las revistas y peri¨®dicos, para acabar siendo filmado por Andy Warhol.
Junto a Warhol y Liechtenstein
Dal¨ª y Warhol se conocieron en Nueva York en 1965. La exposici¨®n termina con el documento de esta relaci¨®n en una fotograf¨ªa y en los dos "retratos cinematogr¨¢ficos" que le hizo, dos pel¨ªculas en 16 mil¨ªmetros, blanco y negro, de cuatro minutos, en una con la cabeza hacia abajo, y que Warhol proyectaba en sus fiestas. F¨¨lix Fan¨¦s destac¨® ayer este ep¨ªlogo de la exposici¨®n, "que abre una puerta a la interpretaci¨®n de Dal¨ª como antecedente de la pintura pop". El Dal¨ª pop tiene la vecindad de Liechtenstein, que comparten el verano en las nuevas salas de 1.100 y 1.000 metros cuadrados en el edificio proyectado por el arquitecto Jean Nouvel. "Liechtenstein es fr¨ªo, cl¨¢sico, moderno; Dal¨ª es recalentado, barroco, antimoderno", afirma Fan¨¦s.
La exposici¨®n forma parte del A?o Dal¨ª. Organizada por la Fundaci¨®n La Caixa, con la colaboraci¨®n de la Fundaci¨®n Gala-Salvador Dal¨ª, y coproducida por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC), ya se ha visto en el CaixaF¨®rum de Barcelona y despu¨¦s viajar¨¢ al Museo Dal¨ª de St. Petersburg, Florida (EE UU), y al museo Boymans van Beuningen, de Rotterdam, que ha sido generoso en los pr¨¦stamos, junto a otras instituciones y particulares. La cultura visual de Dal¨ª, desde la Barcelona de los a?os veinte a los surrealistas y las estancias en Estados Unidos desde 1940, fue seguida ayer por la ministra de Cultura, Carmen Calvo; el presidente de la SECC, Luis Miguel Enciso; la directora del Reina Sof¨ªa, Ana Mart¨ªnez de Aguilar; el subdirector de conservaci¨®n, Kevin Power, y el presidente del patronato, Juan Manuel Urgoiti. El cat¨¢logo tiene textos de Fan¨¦s, Aguer, Bouhours, Mendelson, Kachur, Lubar, Jeffett, Ram¨ªrez y De Diego.
Babelia
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