"Muchos no entienden la singularidad del PSC"

La placidez que ha presidido el 36? congreso del PSOE s¨®lo se ha roto por la pol¨¦mica sobre la continuidad en la ejecutiva federal del PSOE de Jos¨¦ Montilla (Izn¨¢jar, C¨®rdoba, 1955). El Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) mantuvo el pulso hasta el final y logr¨®, contra los criterios iniciales de la direcci¨®n federal, mantener la presencia de su primer secretario en la ejecutiva.

Pregunta. ?Qu¨¦ ha pasado en estos dos d¨ªas para asegurarse su continuidad en la ejecutiva?

Respuesta. El tema no es que yo me asegurara la continuidad. La discusi¨®n no se plante¨® sobre personas. El PSC ha defendido su estatus y su singularidad, reconocida por el secretario general en su respuesta a las diferentes delegaciones. Y dentro del respeto a esa singularidad el PSC, que no es una federaci¨®n del PSOE sino un partido federado, debe ser tratado como tal. Uno de esos elementos singulares es que las personas que nos representen deben ser ratificadas por el PSC.Nuestro problema nunca ha sido de cuotas, de tener m¨¢s o menos miembros en la ejecutiva, a diferencia de otros.

P. ?Los barones entienden esa singularidad?

R. Me consta que hay muchas personas que no la entienden, seguramente porque no conocen la historia de nuestro partido com¨²n, la del PSOE y el PSC. Por eso me alegr¨® que el secretario general aludiera a esa singularidad, que no quiere decir privilegios sino el reconocimiento de un hecho.

P. ?Estos dos d¨ªas van a dejar heridas entre el PSOE y el PSC?

R. De los congresos siempre salen rasgu?os. Incluso de este, con un alt¨ªsimo grado de coincidencia y con un resultado bastante satisfactorio.

P. ?Y entre el PSC y algunos barones territoriales?

R. Nunca planteamos nada en contra de los dem¨¢s, sino el reconocimiento de nuestra propia singularidad.

P. O sea, que todos los dem¨¢s secretarios generales pueden sentirse satisfechos con la nueva ejecutiva.

R. Aunque nosotros no hubi¨¦ramos tenido representaci¨®n en la ejecutiva, la habr¨ªamos apoyado. Que nadie se equivoque. Y no s¨¦ lo que piensan los dem¨¢s secretarios generales.

P. ?Se dio en alg¨²n momento la posibilidad de que no tuvieran representaci¨®n?

R. No se lleg¨® a abordar, pero era una de las posibilidades.

P. ?Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero sale debilitado de este episodio al tardar tanto en tomar una decisi¨®n sobre su persona?

R. En absoluto. Ha salido fortalecido, como lo demuestran las votaciones a su gesti¨®n y a su candidatura.

P. ?Y usted, debilitado?

R. Eso es lo menos relevante. Lo importante es que el PSC se encuentre c¨®modo con la salida que ha tenido este congreso desde el punto de vista pol¨ªtico y organizativo.

P. ?Y sale contento?

R. El PSC nunca ha planteado este congreso como un problema de cuotas. Si as¨ª hubiera sido, habr¨ªamos tenido que pedir m¨¢s y nos tocar¨ªan m¨¢s representantes en la ejecutiva. Basta con hacer n¨²meros.

P. ?Ha sido determinante para su continuidad el apoyo de Manuel Chaves y Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra?

R. La decisi¨®n final es del secretario general. Es cierto que hay personas, como secretarios generales o presidentes auton¨®micos, quiz¨¢ porque conocen mejor la historia de este partido, que tienen mucho m¨¢s claro el estatus del PSC.

P. Alguien dec¨ªa entre los delegados que Montilla deb¨ªa estar en la ejecutiva para as¨ª tener m¨¢s controlado a Pasqual Maragall.

R. Bueno. Si a alguien le sirve como excusa...

P. ?Qu¨¦ deber¨ªa ser el Consejo Territorial?

R. B¨¢sicamente, un ¨®rgano para poner en com¨²n las grandes orientaciones de las pol¨ªticas respecto a cuestiones territoriales y al desarrollo auton¨®mico. La voluntad de potenciarlo refleja la vocaci¨®n inequ¨ªvoca de este partido de apostar por la Espa?a plural.

P. Una especie de Senado.

R. El Senado de momento es bien poquita cosa. Pero cuando sea una verdadera C¨¢mara de representaci¨®n territorial, s¨ª podr¨ªan equipararse. Seg¨²n los estatutos, ser¨¢ un ¨®rgano consultivo. As¨ª es y as¨ª deber¨ªa ser. Pero su opini¨®n tendr¨¢ que ser determinante. No nos enga?emos.