Sexo virtual
Por primera vez se trata el sexo de manera expl¨ªcita en un videojuego exclusivo para adultos - La empresa de preservativos Durex lo utiliza en una promoci¨®n
El objetivo es que la pareja protagonista haga realidad sus deseos sexuales, pero para conseguirlo se deber¨¢ utilizar una estrategia donde el flirteo y la coqueter¨ªa son las armas principales; como en la vida misma. El fabricante habla de su creaci¨®n como un simulador de relaciones personales, y es as¨ª, lo que empieza como una relaci¨®n de compa?eros de piso acabar¨¢, en el mejor de los casos, como un apasionado y ardiente romance.
La compa?¨ªa de preservativos Durex ha pensado que Singles ?en tu casa o en la m¨ªa?, podr¨ªa ser un buen reclamo publicitario y ha lanzado una campa?a en la que sortea 1.000 unidades del juego en determinados packs de sus productos, concretamente en los preservativos de sabores. Se trata de una alianza publicitaria sin precedentes, pero la ocasi¨®n no pod¨ªa ser m¨¢s oportuna.
Singles ?en tu casa o en la m¨ªa?
G¨¦nero: Estrategia
Fabricante: Rotobee
Plataformas: Windows 2000, XP, Me
Precio: 20 euros
Edad recomendada: Mayores de 16 a?os
Internet: www.ubisoft.es
Pese a que al distribuidor, Ubi Soft, no le gusta que se compare Singles con Los Sims, el famoso programa de Maxis en el que debemos dirigir unos personajes en su vida cotidiana, la relaci¨®n es inevitable ya que la base del juego de Robotee es la misma que la de Maxis. El sistema en ambos t¨ªtulos es que el jugador debe conducir a unos personajes que bajo sus ¨®rdenes realizar¨¢n determinadas acciones: ir¨¢n al lavabo a realizar sus necesidades o a tomar una ducha, abrir¨¢n la nevera para saciar sus est¨®magos, tendr¨¢n su dosis de televisi¨®n para mantener un buen nivel de diversi¨®n o bien planchar¨¢n sus orejas en confortables camas. Robotee, adem¨¢s, ha exprimido una visi¨®n de la vida humana que Maxis no ten¨ªa demasiado en cuenta: las relaciones amorosas y el sexo.
Con el precio de los pisos por las nubes, los protagonistas de esta rom¨¢ntica historia, Mike y Linda, deciden compartir piso y reducir gastos. Lo que no sab¨ªan es que su socio inmobiliario pod¨ªa convertirse en su m¨¢s ardiente amante. La culminaci¨®n de la trama es pasar un buen rato en la cama con el compa?ero de piso, pero para ello deber¨¢n consumirse bastantes horas en encandilar al adversario amoroso con chistes, cotilleos, conversaciones rom¨¢nticas y dem¨¢s estratagemas para cultivar la relaci¨®n y llegar al objetivo final.
Obviamente no deben descuidarse otros elementos importantes, como el aseo, es importante conquistar al compa?ero de piso tambi¨¦n por la nariz o de lo contrario se encerrar¨¢ en su habitaci¨®n para no tener que sufrir los malos olores; las comidas, donde se compartir¨¢n todo tipo de conversaciones que ayudar¨¢n a subir los niveles de romanticismo y erotismo, o las jornadas delante del televisor, que evidentemente no facilitar¨¢n la conversaci¨®n pero, aunque parezca mentira, s¨ª aumentar¨¢n los niveles de diversi¨®n.
Es importante tambi¨¦n tener cuidado en fabricarles un entorno adecuado a los personajes; a disposici¨®n del jugador existe una herramienta que permite adquirir todo tipo de mobiliario para conseguir su felicidad de la manera m¨¢s consumista posible, cuanto mayor y m¨¢s caro es el artilugio adquirido mayor es el grado de satisfacci¨®n. Pero adem¨¢s de crear bienestar tambi¨¦n es importante para llamar la atenci¨®n del compa?ero de piso, por ejemplo el banco de gimnasia sirve para modelar un cuerpo escultural que se har¨¢ irresistible a los ojos del contrincante amoroso.
En Singles se han tenido en cuenta tanto relaciones heterosexuales como homosexuales. Sus creadores lo han llamado "el momento rosa", y es en estas ocasiones donde dos hombres o dos mujeres entrar¨¢n en el juego amoroso. En pr¨®ximas expansiones del t¨ªtulo tendr¨¢n en cuenta los tr¨ªos; el refr¨¢n dice que tres son multitud pero Robotee no lo cree as¨ª.
Para los que ya est¨¢n cansados de jugar con Los Sims este Singles puede representar un aliciente m¨¢s, aunque muy pocos llegar¨¢n a obtener el regalo final, que es una casa en la playa despu¨¦s de muchas horas de cuidar la relaci¨®n de Mike y Linda. Para otros, el simple hecho de ver a los protagonistas d¨¢ndose un revolc¨®n en la cama compensar¨¢ las horas de dedicaci¨®n.
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