Botell¨®n a la catalana
Joan y Jaume llevan nueve a?os acudiendo a la Acampada Jove d'Arb¨²cies: "Somos los fundadores del festival; vinimos los primeros", asegura Jaume, militante de ERC. "El primer a?o ¨¦ramos 200 personas y s¨®lo aspir¨¢bamos a que viniera la gente del pueblo". Desde entonces, ni ¨¦l ni su amigo Joan (que se define como militante hippi) han faltado a ninguna edici¨®n. Claro que el concepto de acampada no les acaba de gustar y terminan en un hotel.
La acampada se ha desarrollado durante tres d¨ªas (de jueves a s¨¢bado) y ha contado con la participaci¨®n, entre otros, de Els Pets, Llu¨ªs Llach, Lax'n'Busto y Orishas. La entrada para los tres d¨ªas (cuyo precio oscila entre 40 y 50 euros) permite acceder a los conciertos y a la zona de acampada y va acompa?ada de un kit que incluye tanto un cond¨®n como una bolsa de basura.
En el apartado gastron¨®mico ganan por goleada los puestos de crepes (hay m¨¢s de seis), aunque pueden encontrarse butifarras, hamburguesas y platos m¨¢s ex¨®ticos como el falafel y el cusc¨²s. Para pagar en estos puestos hay que adquirir las g¨¢rgolas, moneda oficial del recinto. Los precios son razonables (desde 0,50 euros el botell¨ªn de agua hasta los 3,50 euros del cubata con Red Bull). Eso s¨ª: lo que m¨¢s se lleva es el botell¨®n.
A pesar de que el Espai Independ¨¨ncia sea el lugar estrella del festival, la zona de acampada est¨¢ llena a todas horas. "Aqu¨ª todo el mundo va a su rollo", comenta Joaquim, un joven de Bell-lloc que ha acudido a Arb¨²cies por tercer a?o consecutivo. Tanto ¨¦l como la mayor¨ªa de j¨®venes van al festival por los conciertos y por la "fiesta" m¨¢s que por la cuesti¨®n pol¨ªtica. La mayor¨ªa recala en El Pol, la nueva zona de acampada de este a?o, que se encuentra a tres kil¨®metros del pueblo. "Hemos tenido alg¨²n problema con los autobuses. Ayer tuvimos que esperarlo una hora", afirma un joven, mientras que la organizaci¨®n asegura que pasan cada 15 o 20 minutos. La piscina chill-out es el sitio preferido de los j¨®venes para pasar el d¨ªa. Aunque se tengan que pagar tres euros, permite hacer la siesta c¨®modamente y ducharse en condiciones.
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