Dos guardias civiles afirman que el 12-M Zouhier neg¨® saber nada de los atentados

"?T¨² de esto no sabr¨¢s nada?". "?Yo! ?Qu¨¦ voy a saber?". En estos t¨¦rminos se produjo el di¨¢logo entre los miembros de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y el confidente Raf¨¢ Zouhier el pasado 12 de marzo, un d¨ªa despu¨¦s del 11-M y una semana antes de que el marroqu¨ª fuese detenido por su implicaci¨®n en la venta de los explosivos utilizados en los atentados. Seg¨²n explicaron ayer ante la comisi¨®n de investigaci¨®n del Congreso el capit¨¢n Paco y el alf¨¦rez V¨ªctor, la conversaci¨®n se produjo hacia las once de la noche en una cafeter¨ªa del centro comercial de la Ermita del Santo, en Madrid.

La reuni¨®n, seg¨²n el testimonio de ambos, se prolong¨® por espacio de unos 45 minutos y su objetivo era obtener del confidente informaci¨®n sobre una red de falsificaci¨®n de tarjetas de cr¨¦dito en la que estaban implicados ciudadanos cubanos y que ¨¦ste identificase a un cabeza rapada buscado por la comandancia de Barcelona y que trabajaba como portero en locales nocturnos. "Un guardia civil como yo, con esta cara, no puede andar por esos ambientes", se excus¨® el capit¨¢n Paco. Pero fue inevitable que en la conversaci¨®n surgieran los atentados del d¨ªa anterior, sobre los que Zouhier aleg¨® absoluta ignorancia. A la conversaci¨®n del d¨ªa 12 asisti¨® tambi¨¦n un tercer agente de la Guardia Civil.

"Ni la mente m¨¢s perversa pod¨ªa imaginar entonces que la dinamita de la que nos hab¨ªa hablado un a?o antes tuviera alguna relaci¨®n con el 11-M", dijo en la comisi¨®n de investigaci¨®n del Congreso el jefe de la secci¨®n de fuentes de la UCO. ?ste atribuy¨® a la casualidad que justo ese d¨ªa decidiera conocer personalmente al marroqu¨ª que colaboraba con su unidad. Lo volvi¨® a ver el pasado d¨ªa 9 de abril cuando, acompa?ado por dos agentes del Servicio de Informaci¨®n, acudi¨® a visitarle en prisi¨®n. "Se ech¨® a llorar", record¨® ayer.

El alf¨¦rez V¨ªctor explic¨®, por su parte, que la primera vez que Raf¨¢ Zouhier le habl¨® de los autores de los ataques contra los trenes fue el 16 de marzo. "Me llam¨® para decirme que hab¨ªa visto en el peri¨®dico la foto de dos hind¨²es y un marroqu¨ª a los que conoc¨ªa", explic¨®. La imagen que se difundi¨® ese d¨ªa fue la de Jamal Zougam, uno de los tres marroqu¨ªes detenidos el d¨ªa 13, de perfil ante el locutorio de la calle Tribulete, en el barrio de Lavapi¨¦s, pero a quien Zouhier conoc¨ªa bien era a otro Jamal: Jamal Ahmidam, El Chino, que se suicid¨® el pasado d¨ªa 3 de abril en un piso de Legan¨¦s.

"Gente muy peligrosa"

"Hasta entonces, nunca me hab¨ªa hablado de El Chino", afirm¨® ayer V¨ªctor. "Me dijo que eran asuntos muy delicados, gente muy peligrosa, con la que no quer¨ªa problemas", agreg¨®. Pero ni siquiera en ese momento le confes¨® Zouhier que hab¨ªa hecho de intermediario en la venta de explosivos a El Chino y su grupo, a pesar de que ¨¦ste le hab¨ªa comentado, a ra¨ªz de la participaci¨®n espa?ola en la guerra de Irak, que "le encantar¨ªa volar el Bernab¨¦u y que a Espa?a hab¨ªa que darle un escarmiento".

Los dos agentes coincidieron en minimizar el "vasto y extenso operativo" que, seg¨²n el informe de la Guardia Civil, se despleg¨® para comprobar la denuncia que en febrero de 2003 hab¨ªa hecho el confidente sobre la existencia de un mercado negro de explosivos en Asturias. Seg¨²n dijo el confidente, Antonio Toro buscaba comprador para 150 kilos de dinamita. El equipo de la UCO que se desplaz¨® a Avil¨¦s permaneci¨® all¨ª 48 horas y se limit¨® a controlar un contacto entre Raf¨¢ y Toro, que se hab¨ªan conocido en prisi¨®n, y a seguir a este ¨²ltimo hasta su tienda de veh¨ªculos y su domicilio. Aunque los guardias vieron entonces a Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras, el ex minero que facilitaba la Goma 2 a la trama, no supieron su identidad hasta m¨¢s tarde y s¨®lo se enteraron de que era confidente de la polic¨ªa cuando lo leyeron en la prensa, seg¨²n aseguraron ayer los dos comparecientes.

El 20 de febrero de 2003, de vuelta en Madrid, Raf¨¢ les entreg¨® un bote con una muestra de explosivo que le hab¨ªan facilitado Toro y Trashorras. Pero el material se encontraba tan deteriorado que ten¨ªa "m¨¢s peligro que valor", en palabras del capit¨¢n Paco. Igual que sus superiores, los dos agentes dijeron que la UCO se desentendi¨® de la investigaci¨®n cuando la traslad¨® a la Zona de la Guardia Civil de Asturias, que nunca le dio cuenta de su resultado.

"En esa investigaci¨®n no fall¨® nada", respondi¨® ayer el capit¨¢n Paco al portavoz de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, quien le pregunt¨® por qu¨¦ no se hab¨ªa logrado desarticular la red que acabar¨ªa suministrando los explosivos del 11-M. "Actuamos de acuerdo a las normas, y creo que ahora lo har¨ªamos exactamente igual", respondi¨® el capit¨¢n de la Unidad Central Operativa.

La comisi¨®n de investigaci¨®n ha reclamado el informe sobre la trama de explosivos elaborado por la Guardia Civil de Asturias pero, en un escrito recibido ayer en el Congreso, el Gobierno da a entender que no existe pues s¨®lo menciona un estudio sobre los envoltorios de los explosivos utilizados el 11-M, remitido el 19 de abril por la Comandancia de Oviedo a la Intervenci¨®n Central de Armas y Explosivos que, aparentemente, no tiene nada que ver con el asunto.