Alemania alcanza el 4% de d¨¦ficit pese a que la econom¨ªa recupera pulso

La econom¨ªa de Alemania crece, gracias a las exportaciones y a pesar del derrumbe de la demanda interna, pero el d¨¦ficit p¨²blico alcanz¨® el pasado semestre un 4% del producto interior bruto (PIB), m¨¢s del 3% que permite el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la Uni¨®n Europea. De mantenerse esta tendencia, Alemania incumplir¨¢ en 2004, por tercer a?o consecutivo, con sus compromisos europeos. Ello a pesar de que el segundo trimestre la econom¨ªa alemana creci¨® un 0,5%, una d¨¦cima m¨¢s que el trimestre anterior, y un 2% en el ¨²ltimo a?o. En 2003 el crecimiento fue negativo.

La locomotora de la econom¨ªa europea, Alemania, arranca, pero a trompicones y con signos evidentes de debilidad. La Oficina Federal de Estad¨ªstica en Wiesbaden confirm¨® ayer que el PIB creci¨® un 0,5% en el segundo trimestre, un 2% respecto al a?o anterior, un porcentaje respetable si se considera que en los tres primeros trimestres de 2003 el crecimiento fue negativo en una d¨¦cima. Desde el cuarto trimestre del a?o pasado el PIB crece, pero con un crecimiento sobre pies de barro, basado en las excelentes cifras de la exportaci¨®n y con un estancamiento e incluso ca¨ªda en la demanda interna.

El mensaje de los estad¨ªsticos de Wiesbaden es inequ¨ªvoco. El crecimiento del PIB se debe a la subida de un 3,2% de las exportaciones. Al mismo tiempo, la demanda interna ha sufrido una ca¨ªda del 0,1%. Los alemanes viven en una situaci¨®n de p¨¢nico ante el futuro y ahorran todo lo que pueden y m¨¢s. Con unas cifras de paro por encima del 10%, y m¨¢s de un 20% en muchas regiones del este; con las amenazas de los empresarios de llevar las f¨¢bricas a otros pa¨ªses con mano de obra m¨¢s barata; con una espada de Damocles en forma de recortes en las prestaciones de los pilares b¨¢sicos de la seguridad social, la salud, el paro y la jubilaci¨®n; con un precio del petr¨®leo que ha llevado el litro de gasolina a 1,20 euros y amenaza con poner por las nubes la factura de calefacci¨®n este invierno, el p¨¢nico cunde entre los alemanes.

Las noticias de Wiesbaden no se limitaron al crecimiento. La cifra del d¨¦ficit p¨²blico, del Gobierno federal, los Estados federados y los ayuntamientos, alcanz¨® los 42.700 millones de euros, un 4% del PIB, en el primer semestre. Alemania marcha por tercer a?o consecutivo hacia el incumplimiento del Pacto de Estabilidad y con tendencia ascendente. El d¨¦ficit fue del 3,7% en 2002 y del 3,8% el a?o pasado.

El Ministerio de Hacienda y los estad¨ªsticos de Wiesbaden han reaccionado de forma un tanto relajada a la noticia y argumentan que el 4% del primer semestre no puede proyectarse a todo el a?o y en la segunda mitad la mejora de la coyuntura podr¨ªa rebajar ese porcentaje. En Bruselas tampoco quieren hacer mucha sangre y esperan a tener las cifras propias para pronunciarse, pero en Berl¨ªn se habla ya de que la UE podr¨ªa tener que sacar de nuevo la tarjeta amarilla a Berl¨ªn por incumplir con el d¨¦ficit.

Inasequible al desaliento, Gerhard Schr?der se mantiene firme en su defensa de los planes de recortes sociales iniciados por su Gobierno. Las protestas han remitido algo en el este. El frente de la protesta parece quebrarse en parte como consecuencia de su heterogeneidad: desde el poscomunista PSD al neonazi NPN y diversos grup¨²sculos m¨¢s o menos izquierdistas. Pero la bronca es aut¨¦ntica. Unos cientos de manifestantes recibieron ayer al canciller en Wittenberge con insultos y lanzamiento de huevos.