Deberes de oto?o

Con la mente puesta ya en el nuevo curso pol¨ªtico, despu¨¦s de unos d¨ªas descanso y maduraci¨®n de proyectos, el Gobierno de Chaves y la oposici¨®n afilan estrategias. La primera de ellas la dej¨® caer d¨ªas atr¨¢s el chusquero pol¨ªtico del PP, Antonio Sanz. Apunten, por favor. "Chaves, miente"; "el Gobierno de Chaves es un mentiroso". No importa si hay algo de verdad, verdad a medias. Por la mentira de Irak cay¨® el Gobierno de Aznar; por las reiteradas mentiras del duo din¨¢mico, Acebes and Zaplana, el pueblo le dio la espalda a quienes en los ¨²ltimos meses se hab¨ªan convertidos en pinochos. Las gracietas de Rajoy no llegaron a tapar la realidad por mucho que Acebes, el legionario de Cristo, diera una lecci¨®n de fortaleza en la mentira.

Manuel Chaves tendr¨¢ que fajarse en asuntos de calado: el papel de Andaluc¨ªa en el nuevo Estado de las autonom¨ªas y el pago de la deuda hist¨®rica. Luis Pizarro, el secante y marcador de los populares, habla por boca de Chaves y ha reiterado que nunca el Gobierno andaluz aceptar¨¢ un Estado asim¨¦trico y no solidario. Hasta ahora no hay indicio alguno de que la pol¨ªtica y las decisiones de Chaves vayan a ir por otro camino. Para decirlo m¨¢s claro, no creo que Chaves vaya a ser quien ponga en peligro la unidad de Espa?a y mucho menos el que propugne una Espa?a insolidaria; ser¨ªa su tumba pol¨ªtica y la de su partido. Y si el PP pregunta qu¨¦ modelo de Estado quieren los socialistas, ellos mismos tendr¨ªan que aclarar posiciones tan divergentes entre lo que piensa, por ejemplo Piqu¨¦ y la vieja y ortodoxa guardia de Acebes y Zaplana.

Teniendo a Jos¨¦ Gri?¨¢n en Econom¨ªa y Hacienda, con la experiencia acumulada en el ejercicio de la pol¨ªtica, profundo conocedor del terreno en el que se nueve y cintura capaz de sortear tormentas de arena, le dar¨¢ al pago de la deuda hist¨®rica su tiempo, enfriar¨¢ tensiones y esperar¨¢ a que el gallinero se serene y, entonces, la deuda hist¨®rica, su cuantificaci¨®n y calendario ser¨¢ puesto en escena. A Gri?¨¢n nadie le va a hacer su agenda y menos el t¨¢ndem Sanz-Zoido. La crisis de Astilleros y la recuperaci¨®n social y econ¨®mica de Riotinto y su comarca ser¨¢ otra piedra de toque.

Y Chaves tendr¨¢ que dar respuesta a la prometida modernizaci¨®n, quit¨¢ndole el tinte electoral. El consejero Vallejo, que vale para un roto o un descosido, (su futuro pol¨ªtico puede estar en otro cometido en breve) tiene la pelota en su cancha. El salto cualitativo que se pretende tendr¨¢ raz¨®n de ser en las estrategias que emanen de su consejer¨ªa. Lo mismo le sucede a Isa¨ªas P¨¦rez Salda?a, que le toc¨® bailar con la m¨¢s fea nada m¨¢s acceder a Agricultura y Pesca, volc¨¢ndose sobre su mesa todos los problemas que Arias Ca?ete no pudo resolver en Bruselas. P¨¦rez Salda?a est¨¢ en la l¨ªnea de tiro del PP andaluz, sobre todo porque Arenas ya ha dicho que sin el voto rural nunca podr¨¢n ganar. Salda?a tiene el mensaje de seguir transformando el medio rural andaluz y preparar el campo andaluz para la nueva pol¨ªtica agraria.

Almer¨ªa en Atenas. Un deber bien hecho, pero que habr¨¢ que rematar. No hay fisuras y el grado de colaboraci¨®n de la Junta con el Ayuntamiento de Almer¨ªa es excelente. Los Juegos del Mediterr¨¢neo son los juegos de todos los andaluces. Que los veamos.