Patinazo colectivo
En deportes de equipo, Espa?a rompe la racha de ganar al menos dos metales iniciada en Barcelona 92
Si el ¨²nico baremo v¨¢lido son las medallas, el fracaso de los equipos espa?oles en Atenas ha sido absoluto. Ninguno de los siete conjuntos que participaron en los Juegos acab¨® en el podio. Se rompi¨® una racha exitosa que se hab¨ªa iniciado en Barcelona 92 (tres medallas: f¨²tbol, oro; hockey femenino, oro, y waterpolo, plata), hab¨ªa proseguido en Atlanta 96 (tres medallas: waterpolo, oro; hockey, plata, y balonmano, bronce) y se hab¨ªa mantenido en Sidney 2000 (dos medallas: f¨²tbol, plata, y balonmano, bronce). En la historia de los Juegos modernos, los equipos espa?oles lograron medallas en siete ocasiones, pero pasaron inadvertidos en otras siete oportunidades, la ¨²ltima en Se¨²l 1988. La primera medalla (plata) la gan¨® el f¨²tbol en 1920, en Amberes, y posteriomente entraron en el cuadro de honor el hockey sobre hierba, bronce en Roma 60 y Mosc¨² 80, y el baloncesto, plata en Los ?ngeles 84.
Este a?o, Espa?a acudi¨® a Grecia con muchas aspiraciones en baloncesto, hockey y balonmano y con dudas en waterpolo. De todos ellos, el que m¨¢s cerca estuvo de la medalla fue el hockey, que perdi¨® con Alemania en el partido por el bronce. Los dem¨¢s o no entraron en los cuartos de final o sucumbieron en unos cruces muchas veces injustos. Es probable que Espa?a habr¨ªa obtenido alguna medalla s¨®lo con liguillas.
HOCKEY, CUARTO
Desde que gan¨® la medalla de plata en Atlanta 96, la selecci¨®n masculina hab¨ªa ido dando tumbos sin encontrar un rumbo fijo. Hace dos a?os, la federaci¨®n decidi¨® fichar al t¨¦cnico holand¨¦s Maurits Hendricks, oro con Holanda en Sidney 2000, para que pusiera orden y devolviera la ilusi¨®n. Se entren¨® 20 horas diarias, "el l¨ªmite asesino" seg¨²n Hendricks, y el equipo lleg¨® a Atenas proyectado por una l¨ªnea ofensiva -Freixa, Tubau, Amat y Sojo- de primer orden. Su trayectoria fue impecable hasta las semifinales, a las que lleg¨® sin ninguna derrota. Pero en ellas acus¨® el desgaste f¨ªsico y Australia le situ¨® en la lucha por el bronce. La medalla se le escap¨® en un partido a cara y cruz con Alemania, que empat¨® en los ¨²ltimos minutos y gan¨® luego con un gol de oro (3-4), marcado por Bjorn Michel en su ¨²ltimo partido como jugador internacional.
El equipo femenino acab¨® d¨¦cimo tras perder todos sus partidos. Su oro de Barcelona 92 queda ya muy lejos.
BALONCESTO, S?PTIMO
La presencia de Pau Gasol lo llenaba todo. No s¨®lo era el s¨ªmbolo de calidad del equipo espa?ol, sino tambi¨¦n una de las estrellas del campeonato. Fueron inevitables las comparaciones con la selecci¨®n de 1984, que gan¨® la plata en Los ?ngeles. Y demostr¨® su calidad en la fase preliminar, en la que gan¨® con solvencia todos sus partidos. El problema le lleg¨® en el cruce de los cuartos, el emparejamiento maldito del deporte espa?ol. Acab¨® la primera de su grupo, pero le toc¨® enfrentarse a Estados Unidos, cuarta en el suyo. Y all¨ª se acab¨®: 94-102. Una derrota que le llev¨® a la disputa de la s¨¦ptima plaza contra China, partido que gan¨®. Gasol se fue como una de las estrellas de los Juegos. Argentina e Italia, batidas precisamente por Espa?a, alcanzaron el oro y la plata respectivamente mientras Estados Unidos se qued¨® en el bronce.
En el torneo femenino, la selecci¨®n tuvo un protagonismo mayor del esperado. En una buena primera fase, s¨®lo cedi¨® ante Estados Unidos. Despu¨¦s, cay¨® en los cuartos ante Brasil (63-67) en un partido muy disputado. Al final, se clasific¨® sexta.
BALONMANO, S?PTIMO
El referente eran las dos medallas de bronce consecutivas que Juan de Dios Rom¨¢n hab¨ªa conseguido en Atlanta 96 y Sidney 2000. El list¨®n estaba alto, pero Espa?a acudi¨® a Atenas con un equipo para elevarlo. Impresion¨® en sus primeros partidos, pero Croacia (22-30) le devolvi¨® al terreno de lo humano. Aquel rev¨¦s fue importante porque dej¨® a Espa?a segunda de grupo y la emparej¨® en los cuartos con Alemania, campeona europea y subcampeona mundial. La otra opci¨®n era Grecia, el rival de Croacia. La paradoja fue que Espa?a perdi¨® en su mejor partido. Frente a Alemania se roz¨® la perfecci¨®n y sobresali¨® la figura de un Barrufet imbatible. Hubo dos pr¨®rrogas y penaltis. Pero los jugadores de C¨¦sar Argil¨¦s no lograron marcar ninguno y anularon la gesta del portero barcelonista, par¨® tres lanzamientos desde los siete metros. "Todo lo dem¨¢s sobraba", dijo Argil¨¦s. Croacia gan¨® el oro, Alemania la plata y el bronce fue para Rusia.
En la primera participaci¨®n ol¨ªmpica que se hab¨ªa ganado -en Barcelona jugaron como anfitriones-, la selecci¨®n femenina qued¨® encajada en el grupo m¨¢s fuerte. Sali¨® de la fase preliminar con tres derrotas y un empate (Angola) y perdi¨® en los cuartos ante Ucrania. Acab¨® la sexta, con una sola victoria: contra China.
WATERPOLO, SEXTO
Con la marcha de sus grandes estrellas, la plata de Barcelona 92 y el oro de Atlanta 96 parecen ahora un objetivo muy dif¨ªcil de conseguir. El equipo espa?ol sigue en plena renovaci¨®n -Roll¨¢n anunci¨® su adi¨®s- y el principal problema que afronta es la irregularidad. A un gran partido le sigue otro desastroso. Y en esa din¨¢mica las medallas se escapan. Le ocurri¨® en Sidney y le volvi¨® a pasar en Atenas, donde entraron en los cuartos de final de rebote -por la victoria de Grecia sobre Italia- y perdieron ante Serbia, finalmente plata. El oro volvi¨® a ser para Hungr¨ªa mientras que Espa?a acab¨® siendo sexta.
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