El Gobierno de Maragall no da su brazo a torcer en el d¨¦ficit sanitario
Bargall¨® pide que los presupuestos "no aumenten" el problema
El Gobierno catal¨¢n no entra en pol¨¦micas p¨²blicas con el Ejecutivo central, pero tampoco da su brazo a torcer. El Gabinete de Pasqual Maragall ha decidido mantener su petici¨®n de que los Presupuestos Generales para 2005 incluyan el d¨¦ficit sanitario catal¨¢n, que sit¨²an en un m¨ªnimo de 600 millones de euros y en un m¨¢ximo de 1.000 millones. As¨ª lo reiter¨® en Argel el consejero de Econom¨ªa y Finanzas, Antoni Castells, saliendo al paso de las exigencias del ministro de Industria y primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC), Jos¨¦ Montilla, quien el pasado s¨¢bado consider¨® "absolutamente inviable" la propuesta.
Maragall rehuy¨® ayer cualquier referencia a una pol¨¦mica que le enfrentar¨ªa al primer secretario del partido que ¨¦l mismo preside. Pero los gestos y las palabras -por contenidos que sean- de los miembros del Gobierno catal¨¢n no han dejado en las ¨²ltimas horas lugar a dudas: persisten en las posiciones que fueron anunciadas p¨²blicamente el pasado jueves por la plana mayor del tripartito, y compartidas, por lo menos hasta el s¨¢bado, por los 31 diputados de izquierdas y catalanistas en el Congreso, as¨ª como por los senadores de l'Entesa. Son las mismas fuerzas pol¨ªticas que dieron la investidura presidencial en primera vuelta a Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.
"De la reuni¨®n del Gobierno catal¨¢n con los diputados y senadores del tripartito surgieron dos ideas muy importantes, dos consecuencias pol¨ªticas: la unidad, que el Gobierno tiene con los palamentarios para lograr unos objetivos que considera prioritarios y, por otro lado, una voluntad de di¨¢logo, de entendimiento de no querer privilegios, de no plantear las cosas de forma agresiva", resumi¨® sucintamente Antoni Castells.
"No he escuchado a Montilla"
El consejero de Econom¨ªa y Finanzas asegur¨® que no ha habido contacto alguno con el ministro Jos¨¦ Montilla, cuyas palabras se neg¨® a comentar alegando desconocimiento: "No he escuchado las palabras del se?or Montilla, estoy en Argelia", y agreg¨®: "Con los ministros a veces estoy de acuerdo y a veces no".
La Generalitat se mantiene en las posiciones adoptadas el pasado jueves, que pasan por atajar el d¨¦ficit sanitario para 2005 en la ley de los Presupuestos; reformar la ley de estabilidad presupuestaria y solicitar el incremento de las inversiones del Estado en Catalu?a en materia de infraestructuras.
Pero no s¨®lo eso. El Ejecutivo catal¨¢n tambi¨¦n se ha atrevido a transgredir otro de los claros tab¨²es de esta pol¨¦mica: las negociaciones de Gobierno a Gobierno. Si la vicepresidenta Maria Teresa Fern¨¢ndez de la Vega aseguraba tras el Consejo de Ministros de la pasada semana que este tipo de negociaciones no deb¨ªan manatenerse entre ejecutivos, ayer Maragall primero, y luego Castells, confirmaban los contactos mantenidos con el ministerio que dirige el vicepresidente econ¨®mico Pedro Solbes.
De Gobierno a Gobierno
En concreto, con el secretario de Estado de Econom¨ªa, David Vegara. "Hemos conversado en los ¨²ltimos d¨ªas con el se?or Vegara, porque hay voluntad de di¨¢logo y porque creemos que nuestros objetivos son realizables", subray¨® el consejero de Econom¨ªa.
Fuentes del Gobierno de la Generalitat confiaron en que la crisis abierta por las palabras de Montilla se cierre de forma relativamente r¨¢pida y sin realizar declaraciones que puedan hurgar en la herida. Tanto el conseller en cap, el republicano Josep Bargall¨®, como el consejero de Relaciones Institucionales, el ecosocialista Joan Saura, pasaron de puntillas sin ahondar en la controversia, aunque sin moverse tampoco de sus posiciones de partida.
Bargall¨® no quiso entrar ayer en pol¨¦mica con Montilla, quien el s¨¢bado dijo que era necesario desvincular el d¨¦ficit sanitario de la sanidad catalana de la negociaci¨®n para los Presupuestos de 2005. Tras su intervenci¨®n en la clausura del di¨¢logo Movimientos humanos e inmigraci¨®n del F¨®rum, el conseller en cap dijo que aunque los Presupuestos no son el marco adecuado para solucionar el d¨¦ficit que arrastra la sanidad catalana, "¨¦stos tampoco pueden ser la v¨ªa para aumentarlos", informa Ester Riu. "Los Presupuestos de 2005 deben contener la financiaci¨®n necesaria para que el d¨¦ficit no aumente", dijo.Por su parte, el consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, asegur¨® que las reivindicaciones del Gobierno catal¨¢n respecto a los Presupuestos del Estado para 2005 son "justas y solidarias", informa Efe.
Saura, quien se dijo "optimista" a pesar de "algunas voces del Gobierno central", a?adi¨® que el Ejecutivo catal¨¢n "batallar¨¢" con perseverancia por estas demandas. El consejero rechaz¨® tambi¨¦n que la Generalitat est¨¦ haciendo "ning¨²n chantaje ni pidiendo cosas que no le corresponden", porque el "d¨¦ficit sanitario es una cuesti¨®n que reclaman resolver hoy Andaluc¨ªa, Valencia y que empieza a pedir Madrid"; "y decimos que se ha de resolver para todo el mundo", a?adi¨®.
Pese a sus palabras, la tesis del "chantaje" es la que esgrime el Partido Popular. Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila, coordinador de comunicaci¨®n del PP, cree que "en los Presupuestos manda Maragall". Por eso pidi¨® ayer al presidente, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que "explique por qu¨¦ ha dado a Maragall la descomunal capacidad de chantajear al Gobierno de Espa?a".
Adem¨¢s de calificar al presidente de la Generalitat de "chantajista", record¨® que gobierna "tras haber perdido las elecciones -el PSC tuvo m¨¢s votos pero menos esca?os que CiU- y a?adi¨® que "no le interesa la sanidad de Andaluc¨ªa, Extremadura y Galicia".
Parad¨®jicamente, la reacci¨®n del PP de Catalu?a vino a criticar al ministro Jos¨¦ Montilla.
Cr¨ªticas del PP de Catalu?a
Su portavoz, Daniel Sirera, asegur¨® que Montilla "no defiende los intereses de Catalu?a" en la negociaci¨®n de los Presupuestos del Estado, ya que "se opone a que contemplen alguna medida para mejorar la financiaci¨®n de la sanidad catalana".
En realidad, las palabras de Montilla han ca¨ªdo como una bomba en un Ejecutivo que se siente desautorizado por el l¨ªder de la principal fuerza pol¨ªtica (el PSC) que le da apoyo. El Gobierno catal¨¢n insiste en que no pide la financiaci¨®n de la deuda sanitaria, que son m¨¢s de 2.000 millones de euros, sino que s¨®lo persigue mitigar para 2005 un d¨¦ficit anual que ronda entre los 600 y los 1.000 millones de euros. Montilla, como todo el Gobierno central, sostiene, en cambio, que los Presupuestos no son el marco adecuado para resolver este d¨¦ficit, que deber¨ªa abordarse en el Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera.
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