Mir¨® se inspira en el 'glamour' del Nueva York de los setenta

La Pasarela Gaud¨ª se inaugur¨® ayer con una mirada hacia los colores y el estilo del pasado. Los desfiles para el verano de 2005 se iniciaron con un agradecimiento a las ministras por su inter¨¦s por la moda a prop¨®sito del reportaje en la revista Vogue. La mujer de Antonio Mir¨® busca su identidad en el glamour del Nueva York de los setenta, mientras los hermanos Ailanto apuestan por el movimiento hippy con estampados de flores y vol¨²menes. El mono ser¨¢ una prenda com¨²n.

I?aki y Aitor Mu?oz, de Ailanto, mostraron ayer su peculiar estilo de mujer en un desfile que de tan animado y musical se hizo corto. Los gemelos se sumergieron en su particular jard¨ªn bot¨¢nico para sacar a la luz todo tipo de especies de flora y coloridas mariposas sobre fondos en blanco y negro.

Ailanto apuesta por el movimiento hippy de finales de los sesenta. La superposici¨®n de capas, volantes, aplicaciones de puntilla de ganchillo, vestidos largos con escote ba?era y un fino tirante anudado al cuello, rayas y estampados muestran la evoluci¨®n de estos j¨®venes, que escapan del estilo disco y dise?an una ropa para una mujer que vive la vida relajadamente.

La de Miriam Ocariz tambi¨¦n es para una mujer que piensa en el estampado a la hora de vestirse. Dibujos de hierba, corazones y cerebros y maniqu¨ªes rotos en estampados en seda. La bilba¨ªna muestra colores pastel con otros m¨¢s vibrantes y usa los tejidos fluidos para buscar el movimiento del cuerpo. Su ropa no se ubica en una ¨¦poca determinada, pero tiene fogonazos de muchas. Sus botones forrados recuerdan a los a?os cuarenta, y las cazadoras con cremalleras a un mundo motero m¨¢s reciente. En esta ocasi¨®n, la dise?adora no ha sacado a la pasarela sus caracter¨ªsticos lazos. Una de sus prendas estrella es el short, extremadamente corto, y las mallas, a juego con el estampado de las faldas por debajo de la rodilla.

Entre tanta flor, volantes y sedas apareci¨® el hombre sobrio de Antonio Mir¨®. Un desfile de color arenoso, marcado por sus monos cremallera, pantalones bermudas con bolsillos en la parte delantera. El dise?ador catal¨¢n prosigue con la experimentaci¨®n de los tejidos t¨¦cnicos, como el pl¨¢stico el¨¢stico y el nailon. Para vestir, Mir¨® se decanta por estrechos pantalones y americanas de cuadros. Y si el hombre no deja de ser una evoluci¨®n respecto a la temporada pasada, la mujer de Antonio Mir¨® rompe. Viaja a la movida neoyorquina de los setenta y con la m¨²sica de Barbra Streisand busca el glamour a trav¨¦s de vestidos vaporosos. Sus referencias son Bianca Jagger, Liza Minnelli y Paloma Picasso. Alterna vestidos lenceros con traje chaqueta corta, pantalones masculinos y para la playa incluso un ba?ador de ganchillo en color pastel.

La variedad en ba?adores, sin embargo, corri¨® a cargo de la firma TCN con una colecci¨®n muy comercial. Una vuelta a los a?os sesenta con biquinis cortina anudados al cuello, pantaloncitos, vestidos amplios, t¨²nicas y enaguas.

Si el blanco y negro son dos colores claves para TCN, para Victorio & Lucchino, no. Los sevillanos huyen de los colores b¨¢sicos y de la elaboraci¨®n elemental. Su desfile fue una loa al bordado. La sofisticaci¨®n de los a?os cincuenta y la forma de trabajar los tejidos mostraron una moda de faldas vaporosas, vestidos drapeados y abrigos primaverales jugando con colores sofisticados como el marr¨®n, el berenjena, el rosa y el verde. Los sevillanos apuestan por una ¨¦poca que se reg¨ªa por el romanticismo y la exquisitez artesanal.

La Pasarela Gaud¨ª est¨¢ con las ministras. Durante toda la jornada, adem¨¢s de pol¨ªticos del Gobierno catal¨¢n, circularon pegatinas con el lema Gracias, ministras en alusi¨®n al reportaje en el que las pol¨ªticas posaban para la revista Vogue. La organizaci¨®n neg¨® tener nada que ver con la iniciativa. La primera jornada se cerr¨® con las propuestas de Agatha Ruiz de la Prada y de Josep Font.