Una misi¨®n espacial trae por primera vez en 30 a?os material extraterrestre
La c¨¢psula con las part¨ªculas de viento solar caer¨¢ ma?ana sobre el desierto de Utah
Una c¨¢psula de 200 kilogramos que cae del cielo suspendida de un paraca¨ªdas y un helic¨®ptero que la engancha en el aire para su traslado a un laboratorio de alta seguridad. ?ste es el escenario previsto para el pr¨®ximo mi¨¦rcoles en un campo de tiro militar del Estado de Utah (EE UU), cuando regrese a la Tierra la misi¨®n G¨¦nesis, que ha estado m¨¢s de dos a?os a 1,5 millones de kil¨®metros de distancia recogiendo part¨ªculas procedentes del Sol, el viento solar. Ser¨¢ la primera vez que llegue material extraterrestre a la Tierra desde que las misiones Apolo y las rusas trajeron rocas lunares.
El m¨¦todo de recogida de la c¨¢psula en la que viajan, adheridas a unos paneles especiales, las muestras del viento solar tomadas por la sonda G¨¦nesis de la NASA es lo m¨¢s espectacular de la misi¨®n, pero no es nuevo. Aunque es la primera vez que se usa en una misi¨®n espacial civil, es un m¨¦todo que se utiliz¨® en Estados Unidos al menos durante a?os en los tiempos de la guerra fr¨ªa para recoger los carretes con fotograf¨ªas tomadas por sat¨¦lites esp¨ªa. Sin embargo, la NASA no ha recurrido a pilotos militares, sino a Cliff Fleming, un piloto especialista cinematogr¨¢fico que ha trabajado en muchas pel¨ªculas, entre ellas Hulk (La Masa).
La c¨¢psula pesa unos 200 kilogramos y entrar¨¢ en la atm¨®sfera a una gran velocidad, que se reducir¨¢ con el paraca¨ªdas compuesto hasta unos 35 kil¨®metros por hora, demasiado alta para arriesgar un aterrizaje que podr¨ªa da?ar las placas colectoras.
La pesca
El helic¨®ptero, un Eurocopter A tripulado por Fleming y otros dos especialistas, empezar¨¢ a perseguir la c¨¢psula cuando ¨¦sta se encuentre a unos 3.000 metros de altura. Luego la intentar¨¢ pescar con una p¨¦rtiga de seis metros de longitud que tiene un gancho al final, dotado de un mecanismo pirot¨¦cnico que funcionar¨¢ para impedir que se pueda soltar. Otro helic¨®ptero igual estar¨¢ preparado por si el primero no logra completar la operaci¨®n. En los ensayos realizados hasta el momento, Fleming ha conseguido recoger la c¨¢psula en todos los intentos, lo que hace pensar que esta parte final de la operaci¨®n de regreso tendr¨¢ ¨¦xito.
El helic¨®ptero enganchar¨¢ el paraca¨ªdas compuesto del que cuelga la c¨¢psula y la depositar¨¢ suavemente en un contenedor que estar¨¢ preparado en el suelo y ser¨¢ cerrado de forma estanca para su posterior traslado al laboratorio que acoger¨¢ las muestras.
La ¨²ltima fase del regreso comienza unas cuatro horas antes de la hora fijada para la recuperaci¨®n de la c¨¢psula, que es alrededor de las 18.15 del mi¨¦rcoles (hora peninsular espa?ola). G¨¦nesis dej¨® hace cuatro meses su punto de recogida de muestras en el punto Lagrange 1, a 1,5 millones de kil¨®metros en direcci¨®n al Sol y se encamin¨® hacia la Tierra. En los ¨²ltimos d¨ªas su trayectoria se ha ajustado para dirigirla hacia su objetivo, en el desierto de Utah y se ajustar¨¢ nuevamente en las ¨²ltimas horas antes de la reentrada en la atm¨®sfera. Cuatro horas antes la sonda empezar¨¢ a girar y soltar¨¢ la c¨¢psula con las muestras mientras se dirige a una ¨®rbita alrededor del Sol, donde quedar¨¢ aparcada para siempre. En caso de anomal¨ªas en esta fase, se dejar¨¢ que la sonda siga su camino con las muestras y se intentar¨¢ la operaci¨®n nuevamente dentro de seis meses.
Los cient¨ªficos no saben todav¨ªa exactamente de qu¨¦ est¨¢ hecho el Sol y esperan que esta misi¨®n les ayude a saberlo mejor. El viento solar sale del Sol y fluye por el sistema solar, pero no puede medirse en la Tierra porque el campo magn¨¦tico terrestre lo deflecta, de la misma forma que el agua que fluye rodea una piedra en su camino. Sin embargo, el viento solar logra entrar en la magnetosfera terrestre a veces y entonces se producen las llamativas auroras boreales. Tambi¨¦n es el viento solar, cuando refleja violentas explosiones en la estrella, el que puede llegar a causar aver¨ªas en los sat¨¦lites artificiales que rodean la Tierra.
Para los estudiosos del Sol, resulta imprescindible que las muestras de viento solar sean puras, que no est¨¦n alteradas por el campo magn¨¦tico terrestre, y por eso se dise?¨® una misi¨®n que se alejara de la Tierra.
Primicias
A la espera de que todo salga bien, la NASA recuerda que esta misi¨®n espacial est¨¢ llena de primicias. Es la primera que traer¨¢ material procedente de m¨¢s all¨¢ de la Luna, la primera que volver¨¢ del punto de Lagrange 1, donde se anulan la gravedad del Sol y la de la Tierra, la primera en la que se utilizar¨¢ el m¨¦todo de recuperaci¨®n en el aire, la primera con un colector de cristal met¨¢lico, la primera en la que se utilizar¨¢ un sala limpia clase 10 y la primera que estudie el viento solar con espectr¨®metros de masas muy avanzados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.