El cineasta israel¨ª denuncia la esclavitud de la prostituci¨®n

Amos Gitai ha puesto su mirada en la prostituci¨®n y la trata de blancas. En La tierra prometida, en competici¨®n en la Mostra, el director relata el periplo, el enga?o y el secuestro de un pu?ado de j¨®venes del Este, que son atra¨ªdas a la tierra prometida, en Israel, que resulta ser la c¨¢rcel de un prost¨ªbulo, y su venta como esclavas. "Cada a?o 3.000 jovenes de Rusia, Estonia y Ucrania se trasladan desde Europa del Este hasta Israel para adentrarse en el mundo de la prostituci¨®n", denunci¨® el realizador.

"Hay que denunciar en voz alta el tr¨¢fico de mujeres y las formas modernas de esclavitud que a¨²n est¨¢n vigentes. Un alarmante comercio de mujeres que prospera en los burdeles de Tel Aviv, Ashdod y Hadera". "Todos saben la verdad", prosigue, "pero la toleran t¨¢citamente. Lo que resulta ir¨®nico es que ¨¢rabes y hebreos que se combaten a muerte se convierten en socios y amigos si hay de por medio negocios il¨ªcitos rentables como ¨¦ste".

"He conversado con muchas de estas pobres mujeres ilusas. Cada una ten¨ªa un pasado diverso, pero estaban unidas por un tr¨¢gico destino com¨²n: el ser v¨ªctimas de violencia f¨ªsica y psicol¨®gica, de abusos masculinos, de humillaciones, de violaciones".