Berlusconi convoca un gabinete de crisis
Nada m¨¢s conocerse el secuestro de las dos cooperantes italianas, el Gobierno de Silvio Berlusconi convoc¨® una reuni¨®n extraordinaria del gabinete de crisis, en el que participan varios ministros y los servicios secretos italiano. Berlusconi, que se encontraba en Mil¨¢n visitando a Umberto Bossi, viaj¨® r¨¢pidamente a Roma para participar en la reuni¨®n.
La noticia del secuestro de Simona Torretta y Simona Pari, de 27 y 29 a?os, respectivamente, fue recibida con gran preocupaci¨®n por todo el pa¨ªs, donde todav¨ªa escuece el reciente secuestro y asesinato del reportero Enzo Baldoni.
Diversas organizaciones pacifistas convocaron v¨ªa Internet una "sentada silenciosa" delante del Gobierno italiano para solicitar su empe?o en la liberaci¨®n de las dos mujeres y para manifestar su apoyo a las familias de ambas. El llamamiento fue seguido por numerosas personas. Otras ciudades italianas tambi¨¦n convocaron manifestaciones similares.
Los familiares de las dos voluntarias han expresado su temor y sorpresa, ya que en ning¨²n momento se hab¨ªan sentido amenazadas. De hecho, no ten¨ªan escoltas y no hab¨ªa ninguna persona armada vigilando la puerta de la oficina donde se ha producido el asalto.
"Tranquilas"
La organizaci¨®n humanitaria Puente a Bagdad ya ha expresado su negativa a abandonar Irak. Su portavoz, Lello Rienzi, afirm¨® que las dos voluntarias secuestradas estaban "absolutamente tranquilas" los d¨ªas anteriores y que nada hac¨ªa prever lo que pas¨® ayer.
En contra de esto, fuentes del Ministerio de Exteriores italiano declararon que ya hab¨ªan advertido desde hac¨ªa muchos meses del peligro existente en ese pa¨ªs y que avisaron muchas veces de la necesidad de limitar en lo posible la presencia en Irak de ciudadanos italianos que no desempe?an funciones institucionales".
Piero Fassino, l¨ªder de Democr¨¢ticos de Izquierda, declar¨® que "se renueva la angustia que hemos ya sentido en los d¨ªas del secuestro de Enzo Baldoni y que terminaron tr¨¢gicamente con su b¨¢rbara ejecuci¨®n". Aquel suceso conmovi¨® especialmente a la sociedad italiana, ya que se confiaba que los secuestradores tuvieran en cuenta la labor humanitaria del reh¨¦n, que hab¨ªa colaborado en el env¨ªo de dos convoyes sanitarios de la Cruz Roja a Nayaf. Los secuestradores exig¨ªan para su liberaci¨®n la retirada de las tropas italianas del pa¨ªs ¨¢rabe y, despu¨¦s de que el Ejecutivo de Roma se?alara que ¨¦stas s¨®lo se replegar¨ªan a petici¨®n del leg¨ªtimo Gobierno iraqu¨ª, asesinaron al periodista en medio del estupor general. Por el momento, ning¨²n grupo ha reivindicado la autor¨ªa del secuestro de las dos voluntarias.
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