Calixto S¨¢nchez: "La Bienal deber¨ªa ser m¨¢s corta y con m¨¢s protagonismo del cante"

En 1980 las pe?as flamencas recibieron una carta del Ayuntamiento de Sevilla. No eran m¨¢s impuestos, sino que la misiva les ped¨ªa los nombres de los cantaores que, a su juicio, fuesen capaces de hacer 12 estilos de cantes. El motivo era retar a los seis m¨¢s votados a que midieran su arte en un concurso, un desaf¨ªo que se convirti¨® en la primera edici¨®n de la Bienal de Flamenco de Sevilla.

Las cartas que envi¨® el entonces concejal de Cultura, Jos¨¦ Luis Ortiz Nuevo, se abrieron ante notario y los m¨¢s votados fueron: Fosforito, Jos¨¦ Menese, Lebrijano, Luis de C¨®rdoba, Curro Malena y Jos¨¦ de la Tomasa. La prueba no era obligatoria, as¨ª que entre los seleccionados hubo una baja: Lebrijano. La lista corri¨® un puesto y apareci¨® Calixto S¨¢nchez, un maestro de escuela de Mairena del Alcor (Sevilla) que entonces ten¨ªa 33 a?os. El primer Giraldillo del cante lo gan¨® Calixto S¨¢nchez y desde entonces no ha faltado ni a una sola de las ediciones de la Bienal.

"Cuando me enter¨¦ de que las pe?as me hab¨ªan votado ya lo consider¨¦ todo un ¨¦xito. La verdad es que fue importante porque artistas como Camar¨®n, Morente o Naranjito no hab¨ªan aparecido en las votaciones", comenta Calixto S¨¢nchez, quien durante todos estos a?os ha hecho muchas cosas por el flamenco adem¨¢s de cantar. Entre ellas, dirigir el Centro Andaluz de Flamenco creado por la Consejer¨ªa de Cultura de la Junta entre 1997 y 2002.

"El Giraldillo para m¨ª supuso dar un salto cualitativo muy grande. Yo soy un cantaor cl¨¢sico, de los que tenemos muy pocas posibilidades de promoci¨®n y el premio supuso un empuj¨®n. Aunque en la d¨¦cada de los setenta ya hac¨ªa unos 20 o 30 festivales cada verano y compart¨ªa cartel con Camar¨®n, Curro Malena, Miguel Vargas, Diego Clavel...", recuerda el cantaor quien el pasado viernes no falt¨® a su cita con la Bienal. Calixto intervino en Festival en el teatro Lope de Vega junto a Macanita, Fernando Terremoto y la bailaora Milagros Meng¨ªbar. Desde aquel primer Giraldillo hace un cuarto de siglo, el cantaor ha cuidado su instrumento de trabajo ayudado por logopedas y foniatras y asegura que ahora es capaz de hacer la misma proeza e, incluso, incrementar el repertorio.

"En 25 a?os mi voz se ha puesto m¨¢s gruesa, es decir que ha adquirido un poco de color, y, en algunos cantes, he bajado medio o un cuarto de tono. Con 57 a?os, me puedo dar con un canto en los dientes", explica el cantaor, que ha grabado unos 10 discos, el ¨²ltimo Retrato flamenco (2000) con poemas de Machado.

"La Bienal empez¨® siendo un concurso cl¨¢sico y, poco a poco, se le han ido sumando espect¨¢culos y ha ido creciendo mucho. El mundo del flamenco est¨¢ sujeto a la ley del p¨¦ndulo. Quiz¨¢s sea ahora el momento de retroceder y hacer una Bienal m¨¢s corta en la que el cante recupere el protagonismo", reflexiona el artista.