Los expertos alertan de las deficiencias nutricionales en los comedores escolares
Los m¨¢s peque?os realizan poca actividad f¨ªsica y abusan de los alimentos precocinados
Les encanta la pizza, las hamburguesas y las patatas fritas. Como la mayor¨ªa de los ni?os, los escolares andaluces prefieren la comida precocinada a la verdura y el pescado, alimentos que los responsables de los comedores escolares tratan de introducir en sus men¨²s con mayor o menor ¨¦xito. Un estudio elaborado por la revista Consumer critica que no se sirva la verdura como plato independiente con la frecuencia deseada, error que tambi¨¦n se comete con el pescado y las legumbres. Los especialistas en nutrici¨®n apuntan al exceso de productos elaborados, ricos en grasas, como uno de los principales problemas de estos men¨²s.
Unos 1.200 comedores de colegios p¨²blicos andaluces abrieron sus puertas el 15 de septiembre. La incorporaci¨®n de la mujer al trabajo o el deseo de realizar actividades extraescolares hacen que cada vez m¨¢s alumnos, este curso unos 100.000 en Andaluc¨ªa (el 15% del total), utilicen este servicio. El comedor escolar es uno de los mejores escenarios para adquirir buenos h¨¢bitos alimenticios pero tambi¨¦n puede convertirse en un peligro si la comida no es equilibrada. La ingesta de alimentos durante la comida supone entre el 30% y el 35% de las necesidades energ¨¦ticas de los ni?os, por ello los especialistas aconsejan a los padres que vigilen que los men¨²s est¨¦n compensados y que los complementen con las comidas que los ni?os hacen en casa.
"Los platos no deben elaborarse en funci¨®n de la cocina escolar o de los gustos de los ni?os", explica Jos¨¦ Mataix, catedr¨¢tico de Fisiolog¨ªa y Director del Instituto de Nutrici¨®n de la Universidad de Granada. Y a?ade: "A veces los padres no entienden que no es necesario comer carne con tanta frecuencia. Nuestra dieta deber¨ªa ser mucho m¨¢s vegetal".
El estudio Enkid sobre h¨¢bitos alimentarios de la poblaci¨®n infantil y juvenil espa?ola ya advert¨ªa hace dos a?os de que la alimentaci¨®n de los ni?os se aleja cada vez m¨¢s de la dieta mediterr¨¢nea. Hay demasiados refrescos, huevos, boller¨ªa y carne, y poca fruta, legumbres, cereales y patatas. Mataix subraya el ambiente obesog¨¦nico de la sociedad actual: "Hablamos mucho de dieta cuando lo que hay que hacer es aumentar la actividad f¨ªsica".
Jos¨¦ M¨¢rquez Serres, presidente de la Sociedad Espa?ola de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, radicada en Sevilla, coincide con su colega. "No cabe duda de que un ni?o puede ser muy sano pero las consolas de videojuegos o la televisi¨®n hacen que pase mucho m¨¢s tiempo frente a una pantalla que en el parque jugando o practicando alg¨²n deporte". La pr¨¢ctica de ejercicio f¨ªsico y una alimentaci¨®n equilibrada son factores que modifican hasta un 20% la densidad mineral ¨®sea (DMO) y contribuyen a la prevenci¨®n de enfermedades como la osteoporosis, el raquitismo y la osteomalacia (deficiencia de vitamina D), concluye el manual Nutrici¨®n y salud ¨®sea, presentado en el Colegio Oficial de M¨¦dicos de Madrid, y elaborado por m¨¢s de 20 especialistas.
"El gasto energ¨¦tico ha bajado considerablemente, por lo que padres y autoridades sanitarias deben fomentar la pr¨¢ctica de deporte entre los m¨¢s j¨®venes -aconseja M¨¢rquez Serres- as¨ª se prevendr¨¢n enfermedades derivadas de la obesidad".
"La situaci¨®n de la salud infantil no es alarmante, aunque podr¨ªa ser mejor", se?ala Mataix, que prefiere adoptar una postura optimista sin dar la espalda a los problemas de la sociedad. Entre los estudios que han ca¨ªdo en sus manos, cita uno, elaborado en Galicia, que advierte de que el consumo de refrescos entre los adolescentes es de 700.000 litros, con una media de dos refrescos diarios.
El problema no es el elevado consumo de bebidas gaseosas de por s¨ª, sino que en la mayor¨ªa de las ocasiones sustituyen a la leche, de forma que muchos j¨®venes desayunan un refresco o dejan de tomar agua en las comidas. "Tenemos conocimiento y capacidad adquisitiva suficiente para vivir mejor, pero hay que corregir estos defectos", aconseja.
El 16% de los ni?os es obeso
El 16% de los ni?os que tienen entre 6 y 12 a?os en Espa?a padece de obesidad. Esta patolog¨ªa se ha multiplicado por cinco desde 1984. La proporci¨®n en este tramo de edad es superior a la de adultos obesos (el 14,52%), seg¨²n la Sociedad Espa?ola para el Estudio de la Obesidad. Espa?a es el segundo pa¨ªs de la UE en porcentaje de ni?os obesos, despu¨¦s de Reino Unido y se acerca a EE UU (18% de ni?os obesos). La situaci¨®n contrasta con la de los pa¨ªses en desarrollo, donde el 28% de los ni?os est¨¢ por debajo del peso recomendado, seg¨²n Unicef.
La Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria, afirma que el consumo medio de calor¨ªas es de 2.811, un 19% m¨¢s de las recomendadas. Adem¨¢s, se toman m¨¢s prote¨ªnas y l¨ªpidos de los convenientes y faltan hidratos de carbono.
Ocho de cada diez menores no desayuna en casa y el 27% de las familias rara vez come unida, por lo que no se transmiten los h¨¢bitos alimenticios.
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