Un s¨ªmbolo que el alcalde ?lvarez del Manzano dej¨® olvidado
El proyecto internacional campana de la paz naci¨® en Jap¨®n hace exactamente 50 a?os. En plena guerra fr¨ªa, la delegaci¨®n de Naciones Unidas en ese pa¨ªs organiz¨® una recolecta de monedas en m¨¢s de sesenta pa¨ªses. Con el metal recolectado se fundi¨® la primera de las campanas, que fue instalada en una especie de santuario shitsu, una construcci¨®n t¨ªpicamente oriental en los jardines de la sede central de la ONU en Nueva York.
Luego, paulatinamente se fueron sumando otras ciudades. Precisamente la ¨²ltima en incorporarse ha sido Alcobendas, en febrero del a?o pasado.
Pero la historia comienza m¨¢s atr¨¢s, en 2001. En ese a?o, la World Peace Bell Association (WPBA), a trav¨¦s de su representante en Espa?a, Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez, regal¨® a Madrid la famosa campana, y el alcalde de entonces, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, del PP, se comprometi¨® a habilitar un espacio id¨®neo para su colocaci¨®n. Sin embargo, el tiempo pas¨® y el famoso s¨ªmbolo de paz permaneci¨® arrumbado en un polvoriento dep¨®sito municipal, seg¨²n afirma el alcalde de Alcobendas, Jos¨¦ Caballero.
En 2002, y tras una serie de gestiones infructuosas, el municipio de Alcobendas y la WPBA solicitaron formalmente al Ayuntamiento de Madrid que cediera el famoso regalo. El plan era instalarlo en el Jard¨ªn de la Vega, el espacio verde m¨¢s significativo de este municipio, sito a 12 kil¨®metros al norte de la capital.
Una vez que Manzano dio el s¨ª fue dise?ado para alojar el s¨ªmbolo pacifista un jard¨ªn japon¨¦s de 5.000 metros cuadrados. En ¨¦l se destaca una ¨²nica construcci¨®n: una pagoda peque?a, proyectada por el arquitecto Fernando Parrilla Villafruela, siguiendo las leyes del feng shui, que promueven el equilibrio entre los elementos de la naturaleza: aire, agua, fuego y tierra.
Por eso, el "santuario de la paz" fue levantado en el centro de un estanque, rodeado de flores de loto, rocas y ¨¢rboles. La estructura fue construida con madera de Valsa¨ªn (Segovia) y piedras de la sierra madrile?a.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
