Una terrorista suicida palestina mata a dos israel¨ªes en Jerusal¨¦n
Sharon asegura que Arafat puede correr la misma suerte que los l¨ªderes de Ham¨¢s
Tras siete meses de tranquilidad y cuando falta menos de una semana para que la Intifada cumpla cuatro a?os, una bomba sacudi¨® ayer por la tarde Jerusal¨¦n, provocando la muerte de dos polic¨ªas israel¨ªes y heridas en una veintena de viandantes. El atentado lo llev¨® a cabo una suicida palestina, que hizo estallar el artefacto que llevaba adosado a su cuerpo cuando se encontraba esperando en una parada la llegada de un autob¨²s.
La explosi¨®n se produjo en el apeadero de French Hill, en la intersecci¨®n de las carreteras que conducen al Mar Muerto, Ramala, Jerusal¨¦n y Tel Aviv; un punto estrat¨¦gico, que se encuentra normalmente repleto de gente, sobre todo a partir de las cuatro de la tarde, precisamente la hora que escogi¨® ayer la suicida para llevar a cabo el ataque. ?ste es el tercer atentado en esta parada de autob¨²s desde que empez¨® la Intifada.
La suicida, que llevaba la cabeza cubierta con un pa?uelo, hizo explotar el artefacto en el momento en que dos polic¨ªas se acercaron a ella para tratar de identificarla y registrar una bolsa sospechosa que llevaba en la mano y en cuyo interior podr¨ªa haber escondido la bomba, que, seg¨²n los artificieros, pesaba entre tres y cinco kilos.
"Hizo un gesto con la cabeza. Como ech¨¢ndola hacia atr¨¢s. Luego se oy¨® un estallido y m¨¢s tarde su cuerpo qued¨® envuelto en llamas", asegur¨® uno de los testigos presenciales, mientras los bomberos, la polic¨ªa y los sanitarios trataban de ayudar a los heridos y rescatar a un grupo de viandantes que hab¨ªa sufrido cortes por la rotura de los cristales de una garita de las fuerzas de seguridad.
?sta es la octava mujer que protagoniza un ataque suicida en Israel desde que se iniciara la Intifada. En esta ocasi¨®n, como en los otros siete casos restantes, la operaci¨®n fue reivindicada por las Brigadas de los M¨¢rtires de Al Aqsa, un grupo formado por disidentes de Al Fatah, convertido, junto con Ham¨¢s, en la punta de lanza de la revuelta palestina. Un comunicado de la organizaci¨®n asegur¨® que el ataque era la venganza por las muertes de los dirigentes de la organizaci¨®n acaecidas en los ¨²ltimos d¨ªas en Nabl¨²s y Yen¨ªn por disparos u operaciones selectivas del Ej¨¦rcito israel¨ª.
Este atentado suicida no sorprendi¨® a las fuerzas de seguridad israel¨ªes, que desde hace varios d¨ªas hab¨ªan alertado a la poblaci¨®n sobre un presunto ataque terrorista en la ciudad. Fuerzas del Ej¨¦rcito patrullaban desde hac¨ªa 48 horas por las calles de Ramala tratando de abortar una operaci¨®n que consideraban inminente. El ataque se produjo a la misma hora que un destacamento irrump¨ªa en la plaza de Menara, en el coraz¨®n de la capital cisjordana, para practicar una serie de arrestos.
Esta situaci¨®n de tensi¨®n llev¨® ayer al primer ministro israel¨ª, Ariel Sharon, a levantar la voz contra el presidente palestino, Yasir Arafat, al que anunci¨® el mismo final que los dirigentes de Ham¨¢s, el jeque Ahmed Yassin y Abdelaziz Rantisi, abatidos la pasada primavera en Gaza: "Hemos actuado contra los jefes de Ham¨¢s y contra otros de la manera que consideramos m¨¢s adecuada y en el momento que nos conven¨ªa. Cuando llegue el momento oportuno nos ocuparemos del caso Arafat, se actuar¨¢ de la misma manera".
Las amenazas de Sharon, pronunciadas a trav¨¦s de la radio p¨²blica israel¨ª, eran difundidas pocas horas despu¨¦s de que el presidente norteamericano, George W. Bush, desde la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, conminara a la comunidad internacional a dar la espalda a Arafat, como castigo por haber traicionado a su pueblo.
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