?Crisis? ?El abuelo depredador, culpable?
Este verano empez¨® a circular la idea de que llegaba una ?crisis tur¨ªstica? y, adem¨¢s, algunos relevantes "expertos" sosten¨ªan que la misma era debido a los errores del modelo de turismo de sol y playa . Lo m¨¢s duro fueron las opiniones de los que se atrev¨ªan a indicar las razones de ese fracaso; los culpables eran sin duda los empresarios y los ayuntamientos, que movidos por una af¨¢n desmedido de lucro hab¨ªan construido inmensos y horrorosos bloques de cemento, carg¨¢ndose las costas y mares. Nuestros competidores, por el contrario, estaban construyendo bonitos complejos inmersos en la naturaleza, respetando el medio ambiente. Este modelo de turismo nos hab¨ªa llevado a tener que soportar a una horda de turistas borrachos y cutres, a la que hab¨ªamos llegado por improvisar y ser malos gestores. Hab¨ªamos tenido la oportunidad de haber hecho algo importante, y los del turismo se hab¨ªan forrado con dinero f¨¢cil a base de hipotecar la naturaleza y el futuro de nuestro pa¨ªs.
En el a?o 1978 los ingresos por turismo fueron de 3.000 millones de euros. En el a?o 2003 ascendieron a 35.000 millones
?Es que los espa?oles hemos perdido la memoria? ?Es que no somos capaces de reconocer lo que ¨¦ramos hace 50 a?os y lo que somos hoy? Los que recuerdan con nostalgia este tiempo mencionan siempre unas playas limpias sin gente, unos pueblos blancos empedrados, paz, tranquilidad, serenidad. Sin embargo, desgraciadamente junto a estas id¨ªlicas instant¨¢neas, tambi¨¦n encontramos algunas m¨¢s dram¨¢ticas; las fotos de las estaciones de tren, repletas de emigrantes, aquellos grandes barcos que llevaban a Am¨¦rica a lo mejor de cada casa, a los m¨¢s j¨®venes y emprendedores. Los que se fueron eran envidiados por los que se quedaban, ya que no hab¨ªa horizonte para ellos.
Sin embargo, los que se iban, empezaron a tener que dejar de irse. Unos cuantos iluminados, empezaron a creer en algo nuevo, el turismo de sol y playa. Algunos alcaldes imaginaron su particular Bienvenido, Mr. Marshall, algunos locos apostaron todo su patrimonio en crear los primeros chamizos. La demanda aumentaba, ya que Espa?a era un destino ex¨®tico, barato y lleno de gente amable. ?Pero.... aumentaba sola o fruto del esfuerzo de los primeros que se fueron a anunciar las excelencias de nuestro pa¨ªs, esas cosas tan t¨ªpicas que ahora les da verg¨¹enza a muchos de los expertos, esa Espa?a de pandereta, que curiosamente es la que a¨²n muchos vienen buscando? El desarrollo exig¨ªa intentar hacer una industria. Se adaptaron a las necesidades de los clientes. Muy pocos buscaban playas solitarias, los que ven¨ªan quer¨ªan tener diversi¨®n, buenas instalaciones, lo m¨¢s cerca del mar posible. Y algunos, montaron de la nada sus empresas, arriesgando todo lo que ten¨ªan y lo que no, con noches sin dormir, trabajando siete d¨ªas a la semana en doble turno. Lo que se iba construyendo era lo que necesitaban los turistas y los pueblos. A muchos no les asust¨® ver c¨®mo algunos emprendedores quebraban, arruinando a los de su alrededor.
Y as¨ª, poco a poco, con una gran originalidad, imaginaci¨®n, toneladas de trabajo, esfuerzo combinado de alcaldes, patronos y trabajadores, microempresarios de chiringuito, fuimos creciendo. Los j¨®venes ya no emigraban, incluso ven¨ªa gente joven a quedarse a esos pueblos de emigrantes atra¨ªdos por el nuevo fen¨®meno. Y los pueblos se fueron transformando, los caminos se asfaltaron, las playas se prepararon, ol¨ªa a riqueza y progreso. Y a los ajenos a esta industria les parec¨ªa que todo ven¨ªa ca¨ªdo del cielo, por casualidad.
El hoy denostado "abuelo depredador" , el culpable de nuestros males actuales, hab¨ªa tra¨ªdo el progreso. Su esfuerzo, trabajo, renuncias e inteligencia nos hab¨ªa subido a otro status social.
Si pudi¨¦ramos tener datos fiables de hace 50 a?os, el comparativo ser¨ªa demoledor. Comparemos los datos de hace s¨®lo 25 a?os con los de ahora. En 1978 los ingresos por turismo fueron de 3.000 millones de euros. En el a?o 2003 de 35.000 millones. En 1978, las entradas de visitantes fueron de 33 millones de personas. El a?o pasado fueron 82,5 millones. En 1978 se registraron 93 millones de pernoctaciones. En 2003, 230 millones.
En el a?o 2003 el turismo supuso un 11,8% del PIB espa?ol, con una producci¨®n directa e indirecta que llega a los 150.000 millones de euros, una renta fiscal que supera los 14.000 millones de euros por todos los conceptos y un sistema productivo que mantiene y emplea a 1.600.000 trabajadores.
De acuerdo que no todo lo que se hizo es bueno y sostenible, visto con nuestra ¨®ptica actual. Torear a toro pasado y desde la barrera es f¨¢cil. Pero visto 50 a?os despu¨¦s, rodeados de todos los lujos y del Estado de bienestar, sus errores fueron mucho m¨¢s peque?os que sus aciertos, y estaremos siempre en deuda con los que so?aron con poder dar a sus hijos y nietos algo mejor que lo que ellos tuvieron. Estoy seguro que muchos pa¨ªses que a¨²n siguen luchando por salir de la pobreza hubieran querido tener nuestra gente, ya que tambi¨¦n ten¨ªan playa y sol a raudales. El abuelo depredador no s¨®lo no es culpable, es un h¨¦roe.
Ram¨®n Estalella es secretario general de la Confederaci¨®n Espa?ola de Hoteles y Alojamientos Tur¨ªsticos.
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