"He ganado gracias a Valverde"

En Italia, las v¨ªsperas de los Mundiales y tambi¨¦n las resacas, son la ocasi¨®n del ajuste de cuentas con la historia, del recordatorio de c¨®mo un pa¨ªs m¨¢s rico que ninguno en tradici¨®n y amor por el ciclismo es tambi¨¦n el florentino de las intrigas, las traiciones y las pu?aladas por la espalda.

Su prensa recordaba ayer c¨®mo Lanfranchi, hace tres a?os, persigui¨® a Simoni en Lisboa y puso el t¨ªtulo en bandeja a Freire; como la rivalidad Coppi-Bartali fue fatal para ambos en 1948, en Valkenburgo (Holanda); c¨®mo Saronni no pod¨ªa ver a Moser; c¨®mo Bettini hab¨ªa vetado esta vez a Rebellin, que no pudo correr como argentino, y Simoni... Y tambi¨¦n, a los espa?oles: c¨®mo gan¨® Olano a Indurain en Colombia, en 1995, o c¨®mo, en Hamilton, en 2003, Astarloa atac¨® cuando Freire esperaba la llegada en grupo.

Pero a todo ello, a la m¨ªtica que quiere que el Mundial, la ¨²nica competici¨®n con selecciones nacionales, sea el territorio de los desencuentros, de la contradicci¨®n entre el deseo individual y el bien de un compa?ero quiz¨¢s de otro equipo; a la interpretaci¨®n de unos espa?oles incapaces de trabajar en conjunto..., respondi¨® ayer Freire con una frase desarmante: "He ganado gracias a Valverde, plet¨®rico".

Si Valverde, el fen¨®meno murciano que llegaba con dudas despu¨¦s de una Vuelta frustrante que mostr¨® sus l¨ªmites, fuera franc¨¦s, holand¨¦s, ruso o estadounidense ser¨ªa, sin duda, l¨ªder ¨²nico, hombre para el que todos habr¨ªan de trabajar. El a?o pasado, despu¨¦s del ataque de Astarloa en Hamilton y cuando ya no corr¨ªa peligro la victoria del vasco, salt¨® y termin¨® el segundo. Lo suficiente para llegar con aspiraciones a Verona. Pero en el territorio de Freire no dud¨® en poner su fuerza y su velocidad al servicio del crack c¨¢ntabro. Fue la decisi¨®n inteligente, la misma que llev¨® a Freire en Hamilton a no moverse, no fuera a ser que ni ganara ¨¦l ni Astarloa. "Sab¨ªa que Freire estaba como un tiro y que siempre me vencer¨ªa", dijo Valverde; "as¨ª que en ning¨²n momento dud¨¦ de lanzarle el sprint. Habr¨ªa sido terrible que yo lo hubiera hecho por mi lado, ¨¦l por el suyo y no hubi¨¦ramos ganado ninguno".

M¨¢s tarde, Freire se lo agradeci¨® tanto que hasta minimiz¨® su victoria: "Le debo mucho. Es un gran corredor por el que se pelean muchos equipos. La l¨¢stima es que tenga los problemas que tiene para salir del suyo [el Kelme]. Ser¨¢ m¨¢s feliz cuando salga. Tendr¨ªa que estar m¨¢s valorado econ¨®micamente de lo que lo est¨¢".

Un mensaje de generosidad que cuadra con el ambiente de solidaridad que se viv¨ªa en el autob¨²s espa?ol, en el que corr¨ªan, festivas, las limonadas, o con las palabras de Paco Antequera, un seleccionador voluntariamente discreto: "Todos los integrantes del equipo, desde el primero hasta el ¨²ltimo, han trabajado para Freire. Si no hubiera sido as¨ª, no habr¨ªamos ganado. Todos los corredores que van a un Mundial saben que se deben a la selecci¨®n y nunca, nunca, me han fallado". Cada uno de ellos, por su trabajo, recibir¨¢ una prima de 9.600 euros por parte del Consejo Superior de Deportes.