El negocio de la 'mar¨ªa'

Adem¨¢s de una evidencia -basta con alzar la vista hacia los balcones de Barcelona o cualquier otra gran ciudad-, el cultivo de c¨¢?amo ¨ªndico para autoconsumo y la cultura que lo rodea es un negocio. En Espa?a ya hay m¨¢s de 350 growshops, 60 en Catalu?a, tiendas que venden todo lo necesario para plantarlo.

No son ilegales porque s¨®lo venden semillas, abonos, fertilizantes o tierra; lo ilegal son las plantas despu¨¦s de la floraci¨®n, cuando aparece el THC, la sustancia psicoactiva. Esas tiendas tambi¨¦n comercializan productos elaborados a partir del c¨¢?amo industrial, una planta de la que se aprovecha casi todo y de la que se saca, por ejemplo, ropa, papel, cosm¨¦ticos, aceite o cerveza, o incluso aislantes para la construcci¨®n.

Sumadas, estas tiendas facturan m¨¢s de 31 millones de euros al a?o, informan fuentes del sector. Otra muestra de la vitalidad del ramo son las tres revistas sobre la marihuana que se editan cada mes. Vendedores y consumidores tienen una cita entre ma?ana y el pr¨®ximo domingo en el sal¨®n Highlife BCN, que se celebra en la feria de Cornell¨¤ (Baix Llobregat), organizado por la revista La Mar¨ªa y la misma empresa Highlife. En 8.000 metros cuadrados, el sal¨®n congregar¨¢ a 80 expositores nacionales, pero tambi¨¦n de Gran Breta?a, Canad¨¢, Alemania y Holanda, de donde es originaria la feria. All¨ª las siete ediciones que lleva la han convertido en el principal referente internacional.

Con Highlife BCN -cuyo programa de actividades tambi¨¦n incluye conferencias en el auditorio del recinto ferial, desfiles de moda y conciertos el s¨¢bado por la noche-, el ¨¢rea metropolitana de Barcelona habr¨¢ pasado de no tener ninguna feria dedicada al c¨¢?amo a celebrar dos en el mismo a?o. En febrero pasado, el Palau Sant Jordi acogi¨® Spannabis, pionera en Espa?a e impulsada por una organizaci¨®n distinta.

Pero pese a la competencia entre ambas organizaciones, muchos expositores presentes en la feria de febrero repetir¨¢n ahora. Es el caso de un buen pu?ado de growshops, distribuidoras al por mayor, las revistas mencionadas y entidades que defienden el uso tanto l¨²dico como terap¨¦utico de la mar¨ªa, como la Asociaci¨®n Ram¨®n Santos de Estudios sobre el Cannabis (ARSEC).

En cuanto al p¨²blico, los organizadores de Highlife esperan superar las m¨¢s de 10.000 personas que pasaron por Spannabis y alcanzar entre 15.000 y 20.000 visitantes, algunos llegados del extranjero, asegur¨® ayer el portavoz de la organizaci¨®n, Sergio Mart¨ªnez, durante la presentaci¨®n del sal¨®n.

El objetivo de la feria es, explic¨® Mart¨ªnez, "dar a conocer las utilidades y los beneficios que puede aportar el c¨¢?amo a la sociedad como alternativa a determinadas materias primas y lograr la normalizaci¨®n de todos los comercios que tienen relaci¨®n con el cannabis". "Si somos realistas y conscientes de que existe el consumo, demos a la gente la oportunidad de hacerlo con garant¨ªa, sea con fines de ocio o m¨¦dicos, al margen de mafias, gracias al autocultivo, que es la v¨ªa para acabar con el tr¨¢fico ilegal", a?adi¨®.

Para prevenir riesgos y velar por el "consumo responsable", la organizaci¨®n ha invitado a la asociaci¨®n Energy Control, que se dedica a informar a los j¨®venes en espacios de ocio. Su caseta ser¨¢ la primera que el p¨²blico encontrar¨¢ al llegar a la feria.