Religiones en jaque
La Olimpiada de ajedrez no debe coincidir con el Ramad¨¢n, sostiene desde hace a?os la Federaci¨®n de Emiratos ?rabes Unidos y, como este a?o coincide, no jugar¨¢. Pero ning¨²n otro pa¨ªs musulm¨¢n estar¨¢ ausente por tal motivo. Incluso participar¨¢n Ir¨¢n y Afganist¨¢n, donde el ajedrez fue prohibido por los gobiernos del im¨¢n Jomeini y los talib¨¢n respectivamente. Los jugadores de esa religi¨®n nunca han pedido que las partidas se interrumpan para cumplir con su rezo vespertino, por fortuna para los ¨¢rbitros, pero ¨¦stos suelen tener peliagudos problemas con los jud¨ªos estrictos.
El jud¨ªo Bor¨ªs Gulko, quien ahora juega por Estados Unidos, cuya selecci¨®n masculina est¨¢ compuesta por ex sovi¨¦ticos al 100%, origin¨® una situaci¨®n surrealista en la Olimpiada de Kalmikia, rep¨²blica aut¨®noma rusa de religi¨®n budista, en 1998. "El Succoth es una fiesta muy importante, que debo respetar", aleg¨® Gulko. Ello implicaba no realizar ning¨²n trabajo mec¨¢nico ni producir energ¨ªa el¨¦ctrica. Por tanto, no pod¨ªa montar en un coche ni en un ascensor y tampoco pulsar el reloj tras realizar su jugada. ?C¨®mo lo arregl¨® el ¨¢rbitro? Colocando a la derecha de Gulko a un muchacho kalmikio, que se encarg¨® de la acci¨®n mec¨¢nica durante toda la partida. Curiosamente, Gulko no puso objeciones a jugar en un tablero electr¨®nico ni, unos d¨ªas antes, a que la primera ronda se disputase por la tarde, coincidiendo con la fiesta del Yom Kippur, a pesar de que el equipo de Israel exigi¨® competir ese d¨ªa por la ma?ana.
Hoy no queda ning¨²n pa¨ªs donde la pr¨¢ctica del ajedrez est¨¦ perseguida. La selecci¨®n afgana ya no tiene que viajar clandestinamente como ocurri¨® en 1996. China, donde fue prohibido durante los ¨²ltimos a?os de Mao Zedong, es una potencia mundial e Ir¨¢n va camino de serlo. Jomeini fue tajante en 1976: "El ajedrez es un juego diab¨®lico que perturba la mente de quienes lo practican". Pero cambi¨® de opini¨®n tres a?os m¨¢s tarde, convencido por algunos intelectuales.
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