El peligro de una huelga indefinida
Desde hace ya demasiadas semanas el precio del barril de brent ven¨ªa cotizando en torno a los 45 d¨®lares y todo apunta a que tambi¨¦n de forma sostenida en el tiempo se mantendr¨¢ por encima de la barrera psicol¨®gica de 50 d¨®lares. La huelga (otra m¨¢s) en el sector de petr¨®leos de Nigeria y la subida de los impuestos para la exportaci¨®n del crudo, ahora en Venezuela, antes en Argentina, no suponen novedades relevantes. A no ser que el alcance de la huelga supere con creces lo ocurrido en otras ocasiones y Nigeria se retire totalmente del mercado durante varias semanas. No obstante, pueden ser un empuj¨®n definitivo para romper esa barrera porque los mercados hoy est¨¢n especialmente sensibilizados debido a que el balance oferta-demanda a corto plazo est¨¢ muy tensionado y esto es lo que en el fondo importa.
Efectivamente, los factores por el lado de la demanda apuntan casi un¨¢nimemente en una sola direcci¨®n: crecimiento sostenido del consumo; explicado por la buena salud econ¨®mica mundial, muy especialmente en Extremo Oriente y Europa, la proximidad del invierno y la estabilidad en niveles bajos de los stocks, especialmente en EE UU. Adem¨¢s, los planes de ahorro y eficiencia energ¨¦tica en los pa¨ªses desarrollados apenas afectan al sector del transporte, que es el principal consumidor de petr¨®leo y los mecanismos del protocolo de Kioto todav¨ªa no han arrancado.
Por el lado de la oferta, ahora ning¨²n exportador tiene capacidad para aumentar su producci¨®n a corto plazo salvo Irak (que no lo har¨¢ en los pr¨®ximos meses), Arabia Saudita (con un margen de maniobra solo en torno al mill¨®n de barriles/d¨ªa, el m¨ªnimo desde mediados de los 70) y Rusia (d¨®nde es extremadamente urgente capitalizar Yukos y que vuelva a su producci¨®n habitual).
Adem¨¢s muchos pa¨ªses productores dificultan la exploraci¨®n, por falta de incentivos, o la exportaci¨®n, al subir los impuestos. Por ejemplo, Colombia, hasta hoy un exportador relevante fuera de la OPEP, podr¨ªa en plazo de unos tres a?os pasar a importador neto y sin embargo sus reservas potenciales son grandes. Estas tensiones en el mercado tambi¨¦n se explican porque, desde al menos hace dos a?os, la producci¨®n supera con creces a las nuevas reservas descubiertas, lo que no es normal en un entorno de precios altos (que son el principal incentivo a la investigaci¨®n y exploraci¨®n). Venimos gastando m¨¢s de los que descubrimos.
El sombr¨ªo panorama que nos dibujan los fundamentos se corrobora con el planteamiento de la OPEP, que ha transitado desde una filosof¨ªa de precios estables y convenientes para todas las partes (en alg¨²n momento se llego a insinuar 25 d¨®lares / barril) a lo que hace pocas semanas este peri¨®dico rese?aba de las declaraciones del ministro de energ¨ªa y minas venezolano: "La era del barril de crudo por debajo de los 30 d¨®lares toca a su fin".
Tambi¨¦n es relevante que los mercados financieros en los que el activo subyacente sobre el que se contrata es petr¨®leo o productos refinados, requieren volatilidad. Y el que suscribe tiene la tentaci¨®n de pensar que quien necesita de la volatilidad para vivir puede que la est¨¦ creando. Dicho de otra forma, es muy factible pensar en precios a corto plazo por encima de 50 d¨®lares / barril, pero ?por qu¨¦ no? por debajo de 20 cerca del verano de 2005 siempre y cuando los fundamentos hayan variado.
El panorama de hoy podr¨ªa cambiar radicalmente si se anunciara el descubrimiento de nuevas reservas, por ejemplo en los pa¨ªses ribere?os del Caspio, o si se arreglara la situaci¨®n en Irak, o si hubiera un plan para recuperar la carencia en investigaci¨®n y exploraci¨®n tras 20 a?os de bloqueo en Irak, Ir¨¢n, Libia y otros pa¨ªses. Pero no son estas las noticias recientes, sino la huelga en Nigeria y la subida de los impuestos para la exportaci¨®n del crudo venezolano, por lo que s¨®lo nos resta pedir que el euro nos siga protegiendo de la subida, al menos seis meses m¨¢s.
Javier de Quinto es profesor agregado de la Universidad San Pablo-CEU.
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