El 'fraude' de Musikene

No salgo de mi asombro al leer que el Tribunal Vasco de Cuentas ha denunciado m¨²ltiples irregularidades en el Centro Superior de M¨²sica-Musikene. No voy a entrar en la consideraci¨®n de fraude de ley en su creaci¨®n como fundaci¨®n privada, que alegan tres consejeros del tribunal, o en otros aspectos legales que pueden ser discutibles. Solo quiero expresar mi indignaci¨®n porque Musikene, cuyas irregularidades aparecen tres a?os despu¨¦s de su creaci¨®n, representa el gran fraude que el Departamento de Educaci¨®n ha ocasionado a la sensibilidad educativo musical en el Pa¨ªs Vasco. Este centro, inventado el a?o 2001 por un consejero de Educaci¨®n, Inazio Oliveri, por la puerta de atr¨¢s, con enclave provisional (Palacio de Miramar de Donostia), surge con la oposici¨®n del colectivo de estudiantes y profesores de m¨²sica por no ubicarse all¨¢ donde m¨¢s demanda existe, y como culminaci¨®n de la pir¨¢mide Escuelas de Musica-Conservatorios Medios-Conservatorio Superior, donde se deben formar los futuros m¨²sicos profesionales.

Pero nuestra realidad educativo musical es muy distinta. Los antiguos conservatorios municipales fueron reconvertidos en Escuelas de M¨²sica merced a la Ley de Escuelas de M¨²sica del Gobierno vasco y a una labor de presi¨®n desde Educaci¨®n, con promesas de subvenciones, declaraciones de que la ense?anza reglada iba a desaparecer, etc., con un claro objetivo: evitar que aquellos centros, por aplicaci¨®n de la LTH, pudieran pasar al Departamento de Educaci¨®n, como as¨ª fueron transferidos los conservatorios de Bilbao, Gasteiz y Donostia, y que de esa forma fuesen costeados por los propios ayuntamientos.

Las Escuelas de M¨²sica cumplen un fin social, loable, pero se han convertido en un caj¨®n de sastre, en el que caben todo tipo de ense?anzas y actividades m¨²sico-l¨²dicas, pero su nivel de calidad acad¨¦mico musical es muy discutida. De hecho, s¨®lo un peque?¨ªsimo porcentaje de sus alumnos acceden a un conservatorio medio. La teor¨ªa de la pir¨¢mide se ha ca¨ªdo por su propio peso.

Tenemos Musikene, pero pr¨¢cticamente no tenemos estudiantes de m¨²sica que puedan acceder a un grado superior, y, en caso de hacerlo, optan por irse a centros de reconocido prestigio tanto en el Estado como en Europa y no a uno de experimentaci¨®n en manos de gestores novatos, aunque su coste sea superior al mejor de los centros europeos.

El debate sobre la conveniencia de uno o varios Conservatorios Superiores en Euskadi ha durado m¨¢s de quince a?os a?os de indecisi¨®n y de dejadez pol¨ªtica, y da grima que al departamento s¨®lo se le ocurra como justificaci¨®n a su pol¨ªtica dedocr¨¢tica la falta de tiempo ante el curso que iba a comenzar.