Una rebeli¨®n islamista en la c¨¢rcel de Topas en 2002 fue el germen de la c¨¦lula de Achraf

Mercedes Gallizo, directora general de Instituciones Penitenciarias, ha ordenado a los directores de prisiones "un seguimiento exhaustivo" de todos los incidentes que se produzcan en los centros, especialmente "en los que hay mayor n¨²mero de extranjeros". La pretensi¨®n es evitar nuevos brotes de islamismo radical, como el que se produjo entre el 28 y el 30 de mayo de 2002 en el penal de Topas (Salamanca), tras una rebeli¨®n de cinco islamistas que ahora han sido relacionados con la c¨¦lula terrorista M¨¢rtires por Marruecos liderada por Mohamed Achraf, que pretend¨ªa volar la Audiencia Nacional.

La c¨¢rcel de Topas se convirti¨® en el centro de una conspiraci¨®n criminal de radicales islamistas, donde, seg¨²n las investigaciones de la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n, detectaron que varios internos "estaban reclutando gente, de origen magreb¨ª, con el objeto de formar un grupo integrista isl¨¢mico, de car¨¢cter salafista, que se denominar¨ªa M¨¢rtires por Marruecos, que estar¨ªa compuesto como m¨ªnimo por 12 personas".

Los informes policiales revelan que la existencia de dicho grupo se confirm¨® "a principios de noviembre de 2003", pero que su origen data de "entre finales de 2001 y principios de 2002", cuando los radicales se constituyeron en "un grupo de musulmanes con actitudes radicales y dirigidos, al parecer, por un interno, por causas comunes, llamado Mohamed Achraf, quien se pudo constatar que era conocido como el emir del grupo salafista". Achraf, detenido en Suiza, es se?alado por el juez Baltasar Garz¨®n como el jefe del grupo que pretend¨ªa realizar un atentado con suicidas contra la Audiencia Nacional.

El centro penitenciario tambi¨¦n se puso a rastrear estas actividades radicales, gracias a lo cual se pudo observar, a finales de 2001, "c¨®mo un grupo de varios internos musulmanes comenzaban a reunirse y mantener comunicaciones dentro del mismo centro penitenciario, organiz¨¢ndose para rezar y mantener estrictamente los ritos de su religi¨®n". Los funcionarios indicaron que "la reclusi¨®n de todos los reclusos de origen magreb¨ª ¨²nicamente dentro de dos m¨®dulos, favoreci¨® la cohesi¨®n y el proselitismo entre ellos".

El preso que los manipulaba a todos, seg¨²n los informes, era Ahmed Mohamed Ahmed, "oblig¨¢ndoles, bajo amenazas, a mantener de forma escrupulosa los ritos musulmanes". En su expediente penitenciario existe una minuta, en la que dec¨ªa que se encontraba en huelga de hambre y solicitaba un lugar "para rezar todo el d¨ªa". Se concluy¨® que en Topas lo que ocurr¨ªa era que un grupo de "delincuentes comunes" se hab¨ªa juntado en la c¨¢rcel "con un individuo que conoc¨ªa la ciencia isl¨¢mica y que se erigi¨® en su emir, inculc¨¢ndoles la yihad [guerra santa] y la defensa de los intereses de los musulmanes en el mundo".

El emir era Mohamed Achraf -estuvo en Topas desde el 13 de junio de 2000 hasta el 26 de enero de 2001 y luego del 17 de abril de 2001 hasta el 4 de junio de 2002- pero cuando lo trasladaron a Palma de Mallorca su rol lo ocup¨® Ahmed Mohamed Ahmed.