Se estrena en EE UU el filme en el que Jamie Foxx revive a Ray Charles

El esp¨ªritu de Ray Charles se ha apoderado de Jamie Foxx, un actor pr¨¢cticamente desconocido fuera de Estados Unidos pero cuya candidatura al Oscar como mejor int¨¦rprete parece un hecho esta temporada. Todo gracias a su trabajo en Ray, pel¨ªcula biogr¨¢fica sobre esa leyenda del blues que hoy se estrena en las pantallas estadounidenses. Puede parecer un estreno oportunista, menos de seis meses despu¨¦s de la muerte del m¨²sico, pero ser¨ªa una cr¨ªtica injusta ya que Taylor Hackford, su director, lleva trabajando en este proyecto desde que, hace 15 a?os, Ray Charles Robinson Jr. le sugiri¨® la idea de hacer una biograf¨ªa sobre su padre tras ver La Bamba, otro filme de este realizador centrado en la figura de Ritchie Valens. Lo que parec¨ªa un filme obvio fue casi imposible de financiar. Finalmente, cay¨® en manos de los estudios Universal porque su presidente, Ron Meyer, quiso pagar con retraso la deuda que contrajo con Charles el d¨ªa que siendo un chaval se col¨® en uno de sus conciertos. Luego se tard¨® a?os en encontrar al actor. "Creo que Dios me puso en el mundo con la misi¨®n de interpretar a Ray Charles", fanfarronea Foxx.

Pero ni el actor ni Hollywood se dieron cuenta enseguida de esos designios divinos ya que a sus 36 a?os Foxx tiene a sus espaldas una carrera como c¨®mico en la televisi¨®n estadounidense, como cantante con el ¨¢lbum de R&B Peep this y como deportista, pero como actor su ¨²nico papel de peso fue en Un domingo cualquiera, de Oliver Stone, cuyo fracaso en la taquilla sentenci¨® su futuro. Hasta este a?o, cuando Foxx sorprendi¨® en su paso por Collateral, donde casi le roba la pel¨ªcula a Tom Cruise, y ahora con Ray. El actor absorbi¨® tanto la m¨²sica de Ray Charles como sus movimientos y tuvo sus ojos cubiertos con unos p¨¢rpados postizos. "S¨®lo me dejaron una peque?a abertura para que pudiera ir al ba?o solo", dice el actor, quien mantuvo el ap¨®sito durante todo el rodaje para poder interpretar este papel con la misma ceguera que afect¨® al m¨²sico desde la infancia. Pero la prueba m¨¢s dif¨ªcil que Foxx recuerda fue su primer encuentro con el m¨²sico para conseguir el papel. "Nos sentamos al piano y empezamos a tocar". Alguien le record¨® que sab¨ªa "jugar con las teclas" pero estaba lejos de la maestr¨ªa de Charles.

"Consegu¨ª mantenerme a flote hasta que empez¨® con Thelonious Monk. Ah¨ª fue cuando me empez¨® a parar cada vez que tocaba la nota equivocada. '?Es que no la ves?', me dec¨ªa. '?No vuelvas a repetirlo!' Me di cuenta de que el perfeccionismo era parte de su ser. Probamos una y otra vez hasta que se levant¨® de un salto, se sacudi¨® las piernas, sonri¨® como s¨®lo ¨¦l sab¨ªa hacer y dijo mientras sal¨ªa: 'El chico tiene madera'. Entonces supe que contaba con su aprobaci¨®n", recuerda Foxx. Y tambi¨¦n con la de la cr¨ªtica y la del p¨²blico. Durante la presentaci¨®n de Ray en el Festival de Toronto, Foxx fue objeto de una cerrada ovaci¨®n adem¨¢s de las mejores cr¨ªticas.

Nadie duda de la presencia de Foxx entre los candidatos al Oscar en una categor¨ªa que esta edici¨®n parece muy re?ida. Si las quinielas de Hollywood se van cumpliendo, Foxx podr¨ªa competir por esta estatuilla con Javier Bardem y con Gael Garc¨ªa Bernal, otros dos de los actores m¨¢s mencionados. O quiz¨¢ junto a Johnny Depp, cuyo trabajo en Finding Neverland tambi¨¦n est¨¢ ganando adeptos. Pero a¨²n queda tiempo y Foxx prefiere no pensar en ello. "Los Oscar..., el lugar donde te vistes de ping¨¹ino... Ser¨ªa genial pero no quiero gafarlo. Si llega, aleluya, y si no, sigue siendo la mejor experiencia de mi vida", asegura con una mezcla de humor y seriedad.

Ray tiene previsto su estreno en Espa?a en enero de 2005.