"El 'Quijote' anticipa la filosof¨ªa moderna"
Pedro Cerezo Gal¨¢n (Hinojosa del Duque, C¨®rdoba, 1935) es catedr¨¢tico de Historia de la Filosof¨ªa de la Universidad de Granada y miembro de n¨²mero de la Real Academia de Ciencias Morales y Pol¨ªticas. Ha sido fundador de las secciones de Filosof¨ªa y Psicolog¨ªa de la Universidad de Granada y decano de la Facultad de Filosof¨ªa. Cerezo ha publicado en el campo de la hermen¨¦utica obras como Arte, verdad y ser en Heidegger (1960), Teor¨ªa y praxis en Hegel (1976) y Reivindicaci¨®n del di¨¢logo (1997). Ha escrito asimismo estudios sobre el pensamiento espa?ol contempor¨¢neo, como La voluntad de aventura: Aproximaciones cr¨ªticas al pensamiento de Ortega y Gasset (1984) y El mal del siglo. El conflicto entre Ilustraci¨®n y Romanticismo en la crisis finisecular del XIX (2003), entre otros. Cerezo es tambi¨¦n un profundo conocedor del Quijote, tal y como ha demostrado en distintos congresos y publicaciones.
"Lo m¨¢s importante en la novela es el incesante rumor de la conversaci¨®n entre don Quijote y Sancho"
PREGUNTA. ?C¨®mo conoci¨® el
Quijote? ?C¨®mo fue su primer encuentro con este libro?
RESPUESTA. Mi primer encuentro fue de ni?o. El Quijote se le¨ªa en las escuelas y se comentaba. Era un libro que entreten¨ªa, pero est¨¢bamos muy lejos de poder captar un sentido moral en esta obra. Dudo que sea positiva su lectura en las escuelas. Hice una segunda lectura siendo universitario. Y una tercera ya de adulto que fue muy morosa y reflexiva con motivo de un grupo de investigaci¨®n de la Universidad de Granada en torno al mundo del barroco. El Quijote me sorprende con cada lectura, como ocurre con otros cl¨¢sicos. El Quijote tiene un poder de sugesti¨®n casi infinito.
P. ?C¨®mo ha sido la evoluci¨®n de su relaci¨®n con este libro?
R. He tenido que leer muchas novelas contempor¨¢neas para hacerme cargo de que esta obra de Cervantes est¨¢ en la g¨¦nesis de todas las novelas. En Cervantes est¨¢n todos los recursos estil¨ªsticos y estrat¨¦gicos que han dado origen a la novela. En el Quijote est¨¢ incluso la invenci¨®n de la metanovela, ya que su segunda parte contempla la novela y la interioriza.
P. ?Se puede hacer una lectura filos¨®fica del
Quijote?
R. Sin duda. El Quijote no es un libro de filosof¨ªa, pero hay mucha filosof¨ªa impl¨ªcita y difusa en ¨¦l. Igual que Heidegger dec¨ªa que hay mucha ¨¦tica en las tragedias de S¨®focles. El Quijote anticipa la filosof¨ªa moderna. Hay una anticipaci¨®n muy genial de la filosof¨ªa de la subjetividad cartesiana y del arco filos¨®fico que va desde Descartes hasta Fichte. Toda esa etapa que se conoce como el idealismo de la libertad est¨¢ como sugerida y anticipada en la posici¨®n existencial de don Quijote.
P. ?Qu¨¦ caracteriza a la ¨¦tica de don Quijote?
R. Yo distinguir¨ªa entre la ¨¦tica de don Quijote y la ¨¦tica de Cervantes. El idealismo ¨¦tico de don Quijote est¨¢ rectificado por el propio Cervantes. La de don Quijote es una ¨¦tica de la desmesura y de una extrema alucinaci¨®n por lo ideal. Y ya Cervantes corrigi¨® con ciertas burlas el idealismo desaforado de su h¨¦roe. Cervantes quema la m¨¢scara de extrema idealidad de su h¨¦roe. Y de ah¨ª que lo someta a una disciplina tremenda de burlas y de humillaciones hasta que don Quijote renuncia a esa m¨¢scara y asume el buen sentido y el buen coraz¨®n. La actitud de Cervantes es hacer que don Quijote se disuelva para que resplandezca el coraz¨®n quij¨¢nico, que podemos definir como el buen sentido humano y el coraz¨®n magn¨¢nimo. Esto es lo que salva a don Quijote. La regresi¨®n a la moral propiamente cervantina salva a don Quijote.
P. Idealismo y realismo son los dos polos del
Quijote y son tambi¨¦n los dos polos sobre los que bascula cualquier vida.
R. En la obra hay un reflejo de la condici¨®n humana y de las tensiones internas del hombre. Lo genial de Cervantes es la iron¨ªa con la que relativiza el exceso de que un polo quiera imponerse al otro. En el Quijote tambi¨¦n se puede hablar del polo del sensualismo y del universalismo de la raz¨®n. Cervantes entiende la parte de raz¨®n que asiste a cada polo y, a la vez, quiere evitar la hegemon¨ªa de un polo sobre el otro. Se genera, as¨ª, un equilibrio en tensi¨®n entre ambos polos, que es una tensi¨®n productiva.
P. ?Qu¨¦ representa Sancho en este equilibrio?
R. La figura de Sancho es fundamental. Lo m¨¢s importante en la obra es el incesante rumor de la conversaci¨®n entre don Quijote y Sancho. A lo largo de ese di¨¢logo no se llega a un acuerdo, pero s¨ª ocurre que cada uno de los dos relativiza su posici¨®n abriendo un lugar a la posici¨®n contraria. Es una fecundaci¨®n rec¨ªproca.
P. Algunos cr¨ªticos hablan de una evoluci¨®n en el propio libro a trav¨¦s de la cual don Quijote se
sanchifica y Sancho se quijotiza. ?Qu¨¦ opina de esto?
R. Eso es verdad no tanto por el hecho de que cada personaje pierda su identidad, sino porque cada uno deja lugar en s¨ª mismo a la voz del otro. As¨ª, ambos son capaces de hacer florecer dentro de ellos esa parte de raz¨®n que les viene de fuera. El gran mensaje ¨¦tico del Quijote es el del di¨¢logo incesante sin b¨²squeda de un acuerdo necesario.
P. Episodios como la liberaci¨®n de los galeotes o el gobierno de Sancho en su ¨ªnsula muestran toda una filosof¨ªa sobre la justicia.
R. En la liberaci¨®n de los galeotes est¨¢ el ideal de una justicia absoluta. Puesto que el hombre no puede ponderar todos los motivos para una justicia absoluta, que ser¨ªa el punto de vista de Dios, don Quijote opta por dejar a toda la gente en libertad. En cambio, la justicia en Sancho est¨¢ por debajo de la ley. Es una justicia en la que Sancho hace primar el buen sentido humano, una justicia casi salom¨®nica. Sancho se crece como gobernador hasta el punto de ser capaz de liberarse de la burla que los duques ejercen sobre ¨¦l. En cambio, don Quijote padece esa burla sin liberarse de ella.
P. Don Quijote realiza en el libro uno de los elogios m¨¢s bellos sobre la libertad que se han escrito nunca.
R. El gran acierto de Cervantes en el Quijote es darnos h¨¦roes que tienen la energ¨ªa para determinar el sentido de su vida y para oponerse a todas las resistencias que vengan del medio social y pol¨ªtico. Esa libertad puede en alg¨²n momento descarriarse en la extrema idealidad, pero el juego mismo de los antagonismos hace que esas libertades tomen conciencia de sus l¨ªmites. La idea de que no hay m¨¢s honor que el que dimana de la virtud es una ense?anza inmortal del Quijote.
P. Cervantes tuvo una vida llena de experiencias: combati¨® en la batalla de Lepanto, fue cautivo de los turcos, sufri¨® c¨¢rcel en Espa?a, muri¨® en la pobreza... ?Qu¨¦ influencia pudo tener todo esto en su visi¨®n del mundo y en las ideas que subyacen en el
Quijote?
R. Muchos h¨¦roes de Cervantes son personajes marginales y rebeldes porque han sido engendrados desde la penuria existencial y la necesidad de reivindicar el yo. En Cervantes lo aprendido en la vida es mucho. ?l mismo fue ese soldado que en su juventud a¨²n cre¨ªa en el imperio de la monarqu¨ªa cat¨®lica. Mucha de la melancol¨ªa del Cervantes que vuelve a Espa?a y entra en la c¨¢rcel es la que rezuma en las derrotas de don Quijote.
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