Primer balance contra la rutina
Manuel Chaves se enfrenta a una excelente oportunidad para convencer a los suyos de que su Gobierno no est¨¢ adormecido en la mayor¨ªa absoluta de la que goza en el Parlamento andaluz. Tiene por delante la celebraci¨®n esta semana del Comit¨¦ Director del PSOE de Andaluc¨ªa, el primero tras el ¨²ltimo congreso regional y despu¨¦s de los congresos provinciales. Desde el punto de vista org¨¢nico acude a este c¨®nclave con los deberes hechos al desencadenarse un proceso de renovaci¨®n que ha supuesto la llegada a la primea l¨ªnea de la acci¨®n pol¨ªtica de caras nuevas. De igual modo, se ha superado el trauma que supuso el pulso que le plante¨® el que fuera portavoz del grupo parlamentario socialista, Jos¨¦ Caballos.
Chaves har¨¢ balance este viernes de estos primeros seis meses de trayectoria tanto del partido como de su Gobierno. Tal vez aproveche la ocasi¨®n para lanzar propuestas novedosas que marquen el devenir de su Ejecutivo a corto y medio plazo. Es esa imagen de despiste y descoordinaci¨®n que ha proyectado su Ejecutivo en tan corto periodo de tiempo el primer problema a resolver. Es cierto que en estos meses se ha trabajado intensamente para conseguir logros de inter¨¦s, como resolver el conflicto de la liquidaci¨®n del anterior sistema de financiaci¨®n auton¨®mica en los t¨¦rminos que desde aqu¨ª se planteaban y no como t¨¦cnicamente lo ten¨ªan formalizado, inicialmente, los altos mandos del Ministerio de Econom¨ªa de Solbes.
Igualmente, estaba el desaf¨ªo de lograr unas cuotas considerables de inversi¨®n en los Presupuestos Generales del Estado as¨ª como desactivar el conflicto de Astilleros, asunto ¨¦ste que ha posibilitado observar a un Chaves lanzando sus primeras se?ales p¨²blicas de distanciamiento del "Gobierno amigo" y de sus altos rectores en la SEPI. Al final ese objetivo parece que se ha conseguido. En fin que, seg¨²n dicen, han trabajado a la sombra de forma eficaz por lo que es el momento para que pongan en valor dicho esfuerzo y no lo arruinen como ha ocurrido con la "venta" que han hecho de los pr¨®ximos presupuestos de la Junta. El percance protagonizado por el consejero de Turismo, Paulino Plata, ha tenido una gran repercusi¨®n a pesar de que pretendan limitarlo a una simple "tormenta en un vaso de agua". Este episodio ha tenido la virtud de encender las alarmas para que unos y otros se pongan las pilas en una legislatura llamada a acometer grandes desaf¨ªos.
El m¨¢s acuciante es el territorial. Se ha conocido el debate suscitado el pasado comit¨¦ federal del PSOE sobre las aspiraciones de Pascual Maragall. El presidente de la Generalitat s¨®lo encontr¨® recelos en sus propuestas de reforma del Estado encaminadas al reconocimiento como nacionalidad hist¨®rica de Catalu?a, Pa¨ªs Vasco y Galicia. Chaves ha dicho en reiteradas ocasiones que una distinci¨®n de este tipo supondr¨ªa consagrar discriminaciones con el resto de comunidades. Por ah¨ª no van a pasar, tal y como se lo reprocharon varios dirigentes socialistas. Sorprende, en todo caso, que en esa discusi¨®n en Ferraz del pasado s¨¢bado no interviniera en los mismos t¨¦rminos ning¨²n dirigente andaluz, que los hab¨ªa y bien importantes. Hay quien puede justificar ese silencio en el hecho de que no hiciera falta ninguna participaci¨®n m¨¢s en esa l¨ªnea dada la lluvia de palos que se llev¨® el pol¨ªtico catal¨¢n. Pero todo hace indicar que si bien Maragall encuentra rechazo en sus iniciativas, no se quieren cerrar todas las v¨ªas para evitar rupturas en el seno de la familia socialista. El debate est¨¢ abierto y le pilla en medio al presidente andaluz a quien le persigue siempre el papel institucional que debe jugar, aunque eso no debe hacerle olvidar que Andaluc¨ªa nunca podr¨¢ admitir privilegios de nadie.
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