Telemadrid, un modelo de calidad y transparencia
El director de la televisi¨®n auton¨®mica justifica por qu¨¦ ha solicitado al Gobierno de la Comunidad una aportaci¨®n extraordinaria de 10,2 millones de euros para equilibrar el presupuesto.
Telemadrid emprendi¨®, hace 11 meses, una nueva etapa con el fin de ofrecer a los madrile?os la libertad de elegir una televisi¨®n de calidad, propia del alto nivel econ¨®mico, cultural y de cohesi¨®n social de que disfruta la Comunidad de Madrid. La nueva direcci¨®n no esper¨® a ser convocada a reuniones oficiales, ni a peligrosas leyes reguladoras y tampoco a dict¨¢menes de sabios. Ya sab¨ªamos cu¨¢l era nuestra responsabilidad, trabajar desde el primer momento para que Telemadrid fuera incompatible con la manipulaci¨®n informativa y con la telebasura. ?se era nuestro principal compromiso y eso es lo que hemos estado haciendo.
Ahora arrecian las cr¨ªticas hacia el tipo de televisi¨®n que tenemos en Espa?a y el Gobierno de la naci¨®n anuncia medidas de intervenci¨®n, pero Telemadrid ven¨ªa siendo pionera en fomentar contenidos televisivos de calidad. Lo hicimos por propia voluntad, sin medidas coercitivas. Ya mediremos el ¨¦xito o el fracaso del planteamiento del problema cuando lo desarrollemos en un plazo de tiempo razonable. Pero la gravedad y la complejidad de lo que viene pasando en el sector audiovisual no puede explicarse con medias verdades o falsedades enteras, propias de una labor intoxicadora al servicio de espurios intereses pol¨ªticos o muy particulares.
"Un 36% m¨¢s de espectadores escoge ahora nuestros 'Telenoticias"
"La previsi¨®n para la compra de pel¨ªculas en 2005 es un 2,53% inferior a la de 2004"
Existe una explicaci¨®n perfectamente justificada y coherente de por qu¨¦ Telemadrid ha solicitado al Gobierno de la Comunidad una aportaci¨®n extraordinaria de 10,2 millones de euros para equilibrar el presupuesto de 2004. Al hacerme cargo de la direcci¨®n, el 13 de diciembre de 2003, recibo un presupuesto, como no pod¨ªa ser de otra manera, ya elaborado, cerrado y casi comprometido. La previsi¨®n econ¨®mica era de provisionalidad, propia de un interregno. Estaba destinada a financiar la continuidad de una programaci¨®n que no coincid¨ªa con los planes de cambio de la nueva direcci¨®n, ni en contenidos ni en producci¨®n propia.
La nueva programaci¨®n ha tenido un evidente impacto presupuestario y creemos que est¨¢ justificado porque se han potenciado los servicios informativos -diarios, semanales, especiales y directos- con nuevas franjas horarias y nuevos formatos. El esfuerzo de rigor y pluralidad de los informativos de Telemadrid ha sido reconocido por los madrile?os. Un 36% m¨¢s de espectadores escogen ahora nuestros Telenoticias, en t¨¦rminos absolutos y en relaci¨®n con el mismo periodo del a?o anterior.
En cuanto a los programas de entretenimiento, tampoco estuvimos cruzados de brazos administrando un presupuesto congelado y destinado a una programaci¨®n comercial al uso. Con la cultura, el espect¨¢culo, los debates de actualidad, los concursos... se renovaron las franjas de ma?ana y tarde, se elabor¨® una nueva parrilla, fortaleciendo, al tiempo, la oferta deportiva y de cine.
Una programaci¨®n exigente, alejada de lo que se ha dado en llamar telebasura, tambi¨¦n tiene costes que, en nuestro caso, se han mantenido en los par¨¢metros razonables. Nunca se han disparado a causa de la contrataci¨®n de periodistas, asesores o presentadores estrellas que en Telemadrid no existen y s¨ª los hay en otras cadenas. Se puede demostrar que la suma de todos a los que se les quiere atribuir esa condici¨®n de estrellas no llega a 500.000 euros, justificados por la val¨ªa y el reconocimiento profesional que tienen cada uno de ellos.
El alza de los gastos de explotaci¨®n se puede cifrar en 11,2 millones de euros, de los que 2,4 corresponden a la contrataci¨®n de personal necesario para la realizaci¨®n y emisi¨®n de los nuevos programas (t¨¦cnicos, operadores, iluminadores, etc.). El aumento de la producci¨®n propia en directo a nuevas franjas horarias de ma?anas, noches y fines de semana explican, obviamente, este incremento.
Respecto al presupuesto de Radiotelevisi¨®n Madrid, el contrato-programa se fij¨® en 63,2 millones de euros para 2004, la misma cantidad que el a?o anterior, que no recoge la subida del ¨ªndice de precios al consumo (que fue del 2,6% en 2003) ni tampoco la prevista para este a?o (actualmente del 3,5%). Si tenemos en cuenta esta variable, computable en toda relaci¨®n econ¨®mica, el aumento solicitado por RTVM en el contrato-programa ser¨ªa de un 3,5%, hasta los 69,3 millones de euros para 2005. De esta forma, con un 9,7% m¨¢s, se actualizar¨ªa el contrato-programa para atender las necesidades de financiaci¨®n de la nueva programaci¨®n.
No obstante, la publicidad sigue siendo la principal fuente de ingresos de Telemadrid, que ha aumentado sus ventas, hasta el 30 de septiembre pasado, un 2,1% respecto al a?o anterior. El mercado publicitario sigue dando muestras de dinamismo, como reflejan los datos de inversi¨®n en las distintas cadenas privadas y p¨²blicas de televisi¨®n. Cabe esperar que as¨ª contin¨²e el pr¨®ximo a?o, en el que Telemadrid prev¨¦ hacer un esfuerzo en el mercado para aumentar sus ingresos por publicidad un 3%, hasta los 70,2 millones.
En cualquier caso, si comparamos los presupuestos para 2004 de Telemadrid y los de las otras televisiones auton¨®micas, el balance es claramente positivo para la televisi¨®n madrile?a. Los gastos de explotaci¨®n por habitante (esto es, lo que le cuesta a cada madrile?o mantener su televisi¨®n) son un 42% inferiores al promedio de las televisiones aut¨®no-micas de Catalu?a, Andaluc¨ªa, Comunidad Valenciana, Pa¨ªs Vasco y Galicia. La necesidad de recursos financieros p¨²blicos de Telemadrid es un 46% inferior a la del promedio de las otras televisiones auton¨®micas y nuestra suficiencia financiera es muy superior al promedio del resto de las televisiones de las comunidades aut¨®nomas (52% frente a 35%).
Sufrimos tiempos convulsos y de cambios en el audiovisual espa?ol, con mucha voracidad pol¨ªtica y comercial, una lucha en la que ni siquiera se respetan los datos. Cuando se habla de "espectacular subida del 122% que figura en el cap¨ªtulo destinado a compra de pel¨ªculas" es rigurosamente falso. La previsi¨®n presupuestaria para la compra de pel¨ªculas en 2005 es un 2,53% inferior a la de 2004. No se puede confundir lo que todo el mundo entiende como compra de pel¨ªculas con la amortizaci¨®n de las inversiones financieras en coproducciones de cine espa?ol, en cumplimiento de la cuota legal impuesta a todos los operadores de televisi¨®n, que no guarda relaci¨®n alguna con la emisi¨®n, y que se ha incrementado, por otra parte, en 915.000 euros.
Tampoco es inocente la tergiversaci¨®n cuando se dice que dentro de los informativos, los gastos de profesionales y de artistas crecen en Telemadrid el 100% en el presupuesto del pr¨®ximo a?o, lo que en t¨¦rminos monetarios supone 300.000 euros. Esto se debe a que en la nueva parrilla participan m¨¢s colaboradores con el fin de ampliar la pluralidad de las opiniones.
En estos meses de gesti¨®n en Telemadrid, la direcci¨®n habr¨¢ cometido algunas equivocaciones, pero puedo afirmar que ninguna de ellas se ha desviado del necesario control del gasto ni por tener ¨¦xito de audiencia pagando un alto coste en valores democr¨¢ticos y culturales.
Contamos, afortunadamente, con la estabilidad econ¨®mica y pol¨ªtica suficiente para realizar una radiotelevisi¨®n que dignifica a los profesionales y que merecen los madrile?os. Telemadrid puede y debe ser una gran instituci¨®n al servicio de todos los madrile?os, sin excepci¨®n, para ofrecer una informaci¨®n rigurosa, ¨²til y plural, as¨ª como un entretenimiento que no destruya la convivencia, las normas legales y el desarrollo econ¨®mico y cultural en libertad de la Comunidad de Madrid.
Manuel Soriano es director general del Ente P¨²blico Radiotelevisi¨®n Madrid.
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