La trayectoria de Chicago
Tan amantes de las estad¨ªsticas, los estadounidenses han determinado que, tras los Beach Boys, Chicago es el grupo m¨¢s popular del rock made in USA. Algo ins¨®lito por tratarse de una agrupaci¨®n con base en el jazz de las big bands modernas. En Chicago live, la banda repasa su repertorio dorado. Quince temas, desde I'm a man hasta su millonario If you leave me now. El disco se pondr¨¢ a la venta a partir de ma?ana, junto con EL PA?S, por 6,95 euros.
Fundada a principios de 1967 en la urbe de Chicago, esta banda se beneficia de la popularidad de los metales en la era gloriosa del soul. Instrumentos de metal que interpretan, en muchos casos, m¨²sicos con formaci¨®n jazz¨ªstica. As¨ª que el grupo est¨¢ preparado para lo que algunos bautizaran jazz-rock, que se convierte en opci¨®n comercial con el fenomenal impacto de Blood Sweat & Tears.
Se hacen llamar Chicago Transit Authority, aunque lo acortan a Chicago. La reputaci¨®n de su ciudad de origen est¨¢ contaminada por las violentas maneras que la polic¨ªa local aplica a las masas juveniles que, opuestas a la guerra en Vietnam, acuden a protestar ante la convenci¨®n del Partido Dem¨®crata.
Para dejar claro en qu¨¦ lado de la barrera est¨¢ el grupo, el primer disco de Chicago Transit Authority, un doble LP, incluye grabaciones de las manifestaciones y canciones de contenido cr¨ªtico.Ese trabajo demuestra su precisi¨®n y poder¨ªo: tocan de todo, los temas pueden ser largos, se permiten pasajes complejos. El productor-m¨¢nager es James William Guercio, que ya ha tanteado la f¨®rmula del pop orquestal con otra banda local, los Buckinghams. Guercio apuesta por un marketing ins¨®lito: las portadas no muestran la cara de los m¨²sicos, prefiriendo variaciones sobre el logo del grupo, con los sucesivos discos bautizados con n¨²meros romanos. No se cortan: Chicago II es otro LP doble, Chicago IV consiste en una caja con cuatro LP registrados en el Carnegie Hall neoyorquino.
Con el tiempo, el grupo rebaja sus planteamientos. Los siguientes discos -excepto Chicago VII- son LP sencillos. Tambi¨¦n se rebaja su radicalismo: en 1975 destaca su Harry Truman, evocaci¨®n cari?osa del presidente que decidi¨® hacer uso de las bombas at¨®micas contra Jap¨®n. Dos a?os despu¨¦s reciben la medalla del m¨¦rito de Chicago, de manos de Richard Daley, el mafioso alcalde que dirigi¨® la represi¨®n que ellos lamentaban en su debut.
Chicago, como la ciudad, exhibe una notable capacidad para regenerarse: Terry Kath, su guitarrista, muere en 1978 al dispararse una pistola que cre¨ªa descargada; el vocalista principal, Peter Cetera, deja en 1985 su puesto a Bill Chaplin. Se adaptan a tiempos m¨¢s restrictivos y pasan a cultivar las baladas; tras Guercio, colaboran con Jimmie Haskell, Phil Ramone, Tom Dowd o David Foster. Como ocurre con los Beach Boys -con los que giran y graban ocasionalmente- comprueban que llenan grandes locales incluso cuando han dejado de tener ¨¦xitos.
Chicago live aclara los motivos de su longevidad: siguen desarrollando con eficacia sus grandes temas, alternando las piezas turbulentas y las composiciones m¨¢s pop. Grabado en un estudio de Chicago, supone un reencuentro triunfal con los fans de su ciudad de origen. Presentado en pantalla panor¨¢mica y sonido Dolby 5.1, Chicago live resume su trayectoria en 15 canciones y 84 minutos.
Perteneciente a la serie de conciertos Sound Stage, el DVD de Chicago incluye como complemento un trailer de otras actuaciones, con fragmentos de las apariciones de Chris Isaak, Lyle Lovett, Randy Newman, Tom Petty, Ashford & Simpson o el propio Peter Cetera.
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